El sabor de los labios de Jaehyo seguía presente con Yu Kwon, en su boca, en su memoria. Su sonrisa y sus hermosos ojos centelleando bajo la luz de la luna y las estrellas quedaron grabados detalladamente en Yu Kwon y no soñó con nada más que eso.
Qué increíble es el sentimiento de amar a alguien, que al mirarlo pareciera que cualquier problema se resolviera y que es tan perfecto ante tus ojos que es el único que importa. Ese alguien por quien cometerías locuras y por quien llegarías hasta el fin de la tierra. Yu Kwon quería que Jaehyo se convirtiera en esa persona, quería enamorarse de él y que fuera el único por el resto de su vida. Nunca antes había deseado ir tan seriamente con alguien pero eso era porque no había encontrado a la persona indicada.
Yu Kwon se fue a dormir feliz y despertó de igual manera. El día acompañaba su sentimiento, presentándose cálido y azul y el muchacho desde su cama le sonreía a la ventana sin deseos de levantarse. Cambió de posición boca arriba, con sus ojos cerrados pensaba en Jaehyo imaginando que estaba allí con él sobre su cuerpo y besando su piel. Moría de ganas por un íntimo contacto físico y a pesar que Jaehyo no tenía problema con ello, no quería simplemente hundirlo en el colchón y embestirlo con fiereza hasta quedar satisfecho. Quería que fuera algo para recordar, algo que durara y ambos disfrutaran por igual, no podía simplemente dejarse llevar por sus impulsos. Así que por los momentos sólo tenía su imaginación que cobraba vida en su cuerpo; su entrepierna palpitaba ante la idea de Jaehyo compartiendo su calor y para calmarla metió su mano bajo su ropa interior. La respiración se le aceleró y la actividad le hizo sudar; gemía quedamente y en su mente repetía el nombre de Jaehyo, tratando de no gritarlo porque a pesar de estar en su apartamento, temía ser escuchado aunque no fuese posible. Abrió sus ojos cuando el cálido líquido corrió entre sus dedos y pasaron varios minutos antes de que pudiera levantarse e ir al baño. Cuando salía llamaron a su puerta y se topó con la cara regordeta y disgustada de la casera.
-¿Se te dañó el despertador? Son las diez de la mañana y no has limpiado nada -lo regañó la mujer.
-Lo siento, me quedé dormido, estaba muy cansado.
-Pues que no pase otra vez. Vístete y ponte a trabajar.
Yu Kwon no perdió más tiempo y se apresuró a trabajar. Debía lavar la alfombra de la entrada del edificio y ocuparse de una gotera en el estacionamiento. Cuando trapeaba el piso en el que Jaehyo vive, llamó a su puerta varias veces pero no abrió. Lo llamó entonces.
-Estoy en el gimnasio, vine temprano. Debo prepararme para mi sesión- le informó Jaehyo.
- Entiendo. No te sobre esfuerces ¿Sí?-
-Sí, sí, no te preocupes. Debo dejarte, voy a tomar una ducha. Nos vemos más tarde-
Jaehyo se había cansado más de lo normal ese día, eso porque había salido de casa con sólo un pan tostado en el estómago y sin tomar siquiera un vaso de agua. Parte de su dieta era no ingerir ese líquido tan vital para el cuerpo ya que así podría marcar más rápido sus abdominales pero sólo sería algo temporal hasta que fuera su sesión.
Mientras tomaba su ducha reposó los ojos, dejó su cuerpo apoyado en la pared y se relajó con el agua tibia limpiando su piel. Cerró la llave cuando tuvo suficiente y en el espejo fuera de la duchas se quedó admirando su cuerpo. Pasaba sus dedos sobre su abdomen pensando cuánto tardaría en conseguir el resultado deseado para la revista. Miró sus brazos, delicadamente torneados y su ancha espalda.
-Luces muy bien.
Jaehyo se sorprendió por la repentina visita, le apenó haber sido cachado admirando su cuerpo como si fuese alguien vanidoso. Al darse vuelta hacia esa persona, se cohibió al ver que era Ji Ho pero no tenía su ropa cerca para vestirse y sólo pudo cubrirse cruzando sus brazos sin ser muy obvio. No quería que Ji Ho lo mirara, desde que terminaron le incomodaba su presencia, incluso desde antes.
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Devil's Gift
FanfictionUna buena pose y una hermosa sonrisa no es suficiente para tener éxito en el mundo del modelaje, parece algo fácil lo que se ve en fotos y pasarelas pero es algo más complejo que requiere de esfuerzos y sacrificios, agregando la competencia, envidi...