Me Soltaste

No te quiero cerca

No te quiero cerca

–el celular de Alberto empezó a sonar–

–Contesta –Mónica lo miro él negó– puede ser importante

–No tanto cómo lo que me vas a decir –él celular dejo de sonar– dime ¿qué hiciste? –Mónica volvió a suspirar y él celular sonó de nuevo, Alberto lo tomó para apagarlo no quería que lo interrumpieran pero en lugar de apagarlo tomó la llamada cuando vio el nombre de quien hablaba– ¿qué pasa? –Mónica sintió alivio a lo mejor era una señal para todavía no decirle nada, o sólo el destino les estaba dando tiempo para encontrar las palabras más indicada–

–Necesito verte ahora –Tabata se escuchaba desesperada–

– ¿te pasó algo? –Tabata sonrió al escuchar el tono de voz de Alberto– dime Tabata ¿estás bien? –Mónica rodó los ojos con desagrado, sin pensarlo más bajo del auto–

–Estoy bien pero necesito verte –Alberto observó a Mónica bajándose del auto y se desabrocho el cinturón de seguridad para bajarse el también–

–Dime ¿dónde te veo?

–Mi departamento, te espero

–Voy para allá –termino la llamada y miró a Mónica– espera –se aceró a ella–

–Ve atrás de ella, te mueres por estar a su lado

–Tú me ibas a decir algo –Mónica negó–

–Eso ya no importa –Mireya la madre de Mónica salía del edificio–

–Mi amor –la abrazó con los ojos llenos de lágrimas, Alberto las dejo solas y se dirigió a casa de Tabata–

–Ariana estaba en la cama sentada leyendo un libro que Tabata le había llevado, trataba de recordar al hombre conque Rafael la encontró en la cama pero no podía sus recuerdos sobre ese día eran vagos y eso la hacían sentir con mucha frustración–

–Hola –la voz de Said hicieron que Ariana dejará de observar el libro y lo mirara de una manera tierna, Said se perdió en la mirada y en la dulzura de esa mujer–

–Hola –ella le regalo una sonrisa– ¿Qué haces aquí? –preguntó sorprendida–

–Bueno estamos en inspección y quise venir a verte, ¿Qué lees? –Ariana alzó el libro y se lo mostro– Isabel allende, excelente escritora

–No había leído sus obras es la primero que estoy leyendo

–Esa es interesante –observo la portada– "el cuaderno Maya" interesante todo lo que nos hace volar la imaginación un libro –Ariana asintió sonriendo–

–Pensé cuando lo vi que trataba de la cultura e historia pero no, ahora sé quién es Maya –Said sonrió ante el comentario tan inocente y dulce que acababa de realizar Ariana–

–Ariana antes ¿qué hacías? –Ariana suspiro con nostalgia al recordar su vida–

–Bueno mucho tiempo sólo me dedique a mis hijos –los ojos se le llenaron de lágrimas que difícil es para Ariana poder hablar de sus hijos y ahí es que se da cuenta que ese dolor nunca lo va a superar, sus hijos siempre estarán presentes en su vida–

–Siento hacerte recordar cosas que aun te duelen –se acercó a ella y acaricio su mejilla con ternura limpiando una lágrima–

–No te preocupes –Said le dio una sonrisa y eso le dio la pauta para seguir contestando la pregunta que le había hecho– bueno estuve en la empresa de la Familia de Rafael, iba a tomar la presidencia antes de que Rafael me viera en la cama con otro hombre –Said frunció el ceño pero no quiso indagar en el tema–