Un mes...

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Un mes...


–el día siguiente las cosas no avanzaron mucho Tabata contrato a un investigador privado para localizar al hombre que Ariana había descrito y empezó el trámite para hacer la exhumación de los cuerpos y poder realizar el ADN a los restos que piensan que eran Alison y Thiago–

–Hola –Tabata miro a Ariana con una enorme sonrisa al verla al lado de Alma en la enfermería–

–Hola – Ariana se acercó y se saludaron– no pensé que fueras a venir hoy

–No quiero que te sientas sola –miro el lugar– veo que han mandado medicamento –Alma asintió–

–Hola Tabata –se saludaron– al parecer el juez Fadul pudo gestionar todo esto –Tabata sonrió y observó a Ariana de una manera dulce–

–Muy entregado ese juez –Alma le dio una sonrisa– ¿cómo estás? –Ariana dibujo una pequeña sonrisa–

–pues me siento bien, sabes estar aquí me está sirviendo mucho para no pensar

–Me alegra escucharte decir eso

– ¿pudiste hablar con Rafael? –Tabata negó– de seguro no quiere saber nada de mí

–No es eso, está fuera del país –Ariana levantó una ceja– según Alberto está en Nueva York en una convección –Ariana suspiro–

–La convección

– ¿qué pasa?

–La estuvimos planeando tanto y mírame aquí –bajo la mirada con tristeza– no puedo creer que mi vida haya cambiado tanto

–Ari no me gusta verte así, por favor –le tomo el mentón– confía en mi pronto saldrás de aquí

–Y de que me servirá salir sino estaré al lado de mis hijos –sus lágrimas invadieron su rostro y Tabata la abrazó sintiendo el dolor en su mirada–

–Hay Ari lo que yo diera porque esto fuera una horrible pesadilla

–Yo también

–Pero tienes que pensar en él –acaricio su vientre– por él es que tienes que salir de aquí

–Lo sé –se separó del abrazo– quiero que me prometas algo

–lo que necesites dime

–Sí cuando nazca yo sigo aquí prométemelo que tú te harás cargo de él

– ¡Yo! –Tabata estaba sorprendida– Pero y Carolina

–Tabata mi madre está muy triste y no está bien con todo lo que ha pasado, no quiero que esa tristeza se la pase al bebé

–y ¿quién te garantiza que yo soy la más indicada?

–Confió en ti

–No me veo con un bebé por eso trataré de que salgas antes –Ariana sonrió–

–Ya prométemelo

–Te lo prometo aunque espero no tener que cumplirla, pero si es necesario yo lo cuidaré

–Gracias –se abrazaron–

–Bueno ya mucha platica –Alma se acercó a ellas– tenemos que trabajar–

–Tabata y Ariana pusieron manos a la obra y empezaron a clasificar el medicamento–


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