Naranja Y Negro. Una Extraña Combinación 🐱💖🎨

Capítulo 6

~Narra Nath~

Nuevamente estaba enfermo, pero esta vez era peor, me dolían la cabeza y el estómago, no era capaz de levantarme ya que cada vez que lo intentaba mis piernas temblaban. Quería ir a la escuela, solo para disculparme con Adrien por la actitud de mi padre el día anterior, pero mi madre me obligó a quedarme en cama.

Las horas pasaron, como no podia levantarme decidí encender el televisor que había en mi habitación. La inquietud me invadió al ver las noticias, al parecer un akumatizado había atacado la escuela, por más que intentaba calmarme no podía. La preocupación aumentaba cada segundo, deseando cada vez con más fuerza que Adrien estuviera bien.

Mis cabellos estaban completamente desordenados, mi desesperación había echo que moviera mi cabello de un lado a otro con mis manos, como un intento de calmarme.

Cuando escuché que alguien había tocado la puerta fui a abrir está al instante, caí varias veces al suelo pero debía abrir rápidamente para ver si ese era Adrien o no. En cuanto abrí la puerta allí estaba, era el chico rubio que tan preocupado me tenía, él me saludó con una sonrisa. Yo salté sobre él abrazándolo por el cuello, se me fue imposible contener las lágrimas de felicidad al ver que se encontraba bien.

Adrien me abrazó por la cintura impidiendo que ambos cayéramos al suelo, y riendo un poco se separó levemente de mi, pero toda la felicidad desapareció cuando vio mis lágrimas.

- ¿Por qué lloras? - No se molestó en ocultar la gran preocupación que sentía, y eso me alegraba levente, me hacía feliz saber que se preocupaba por mi. Aunque no sabía por qué algo tan pequeño me hacía tan feliz.

- Estaba preocupado por ti, vi que la escuela fue atacada... Tenía miedo de que te haya pasado algo - Dije mirando al suelo levemente sonrojado, ahora que lo había dicho me di cuenta que era algo demasiado infantil.

- Estoy bien, no te preocupes - Él besó delicadamente mi mejilla, esto hizo que el tono carmesí que adornaba lugar que acababa de besar se hiciera mucho más notable.

- Fuera hace frío - Dijo y me cargó estilo princesa sin aviso a alguno, eso me sorprendió demasiado, no esperaba que hiciera algo así.

Entró conmigo en brazos y me dejó sobre el mueble que había en la sala de mi casa y luego se dio la vuelta y caminó hasta la puerta, cerrando esta al instante en que llegó.

- ¿Por qué faltaste? - Dijo en tono suave mientras volvía al sofá en el que yo estaba, y me miró curioso esperando una respuesta mientras se sentaba a mi lado.

- Estaba enfermo... Realmente aún lo estoy - Dije un poco desanimado, no quería preocuparle más de lo que ya estaba.

- Si fue por eso lo mejor es que te quedes en cama ahora - Dijo acercándose un poco a mi, me di cuenta de ese detalle pero decidí ignorarlo.

- Pero quería ir para disculparme contigo... - el me tomó de la barbilla y giró mi cabeza obligándome a verlo directo a los ojos esmeralda que tanto me atraían.

- ¿Disculparte? ¿por qué? - Dijo y luego besó mi mejilla, sentía mis mejillas arder por lo que acababa de hacer.

- P-por como a-actuó mi p-padre ayer - Le miré inseguro, no sabía como reaccionaría ante eso.

- No te preocupes, fue gracioso - Se acercó y beso suavemente mis labios, solo fueron unos milisegundos lo que duró ese "beso".

- A-adrien... ¿Q-que haces? - Pregunté totalmente rojo sin dejar de verlo a los ojos.

- Nada, sólo fue un simple gesto de amistad - Se excusó riendo levemente - Bueno, me alegra que estés bien pero debo irme. - Creí que solo se levantaría y se iría pero no, se levantó pero en vez de irse volvió a cargarme y me llevó hasta mi habitación, en cuanto entró a esta me dejó suavemente sobre mi cama, besó nuevamente mis labios pero esta vez por un poco más tiempo - Tú amigo te desea buenas noches - Sonrió levemente y por fin se fue de mi casa, este día había sido el mejor de mi vida. Acariciaba levemente mis labios con la yema de mis dedos, no podía quitarme la sensación de los labios de Adrien

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Perdonen si no les gustó el capítulo, a mi en lo personal no me gustó... Pero no es mi culpa, es sólo que no soy muy bueno con la narración en primera persona. Más adelante se explicará la actitud tan coqueta de Adrien, solo esperen