Capítulo 17

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Ambos estaban en la cabaña, Nath en el balo tomando una ducha y el pervertido de Adrien estaba sentado en la cama, moviendo sus pies de arriba a abajo bastante desesperado mientras mordía sus uñas. Necesitaba quitarse la idea y tentación de ir y entrar a aquel baño pata ver a su tomatito desnudo, no lo hacia por la simple razón de que prometió que esperaría a Nathaniel, esperaría que aquel hermoso pelirrojo estuviera listo para pasar a la siguiente etapa de una relación.

Escuchó algunos pasos acercándose a la puerta de la habitación, obviamente era Nath, no había nadie más en la cabaña así que no quedaba de otra.

Adrien abrió sus ojos con total sorpresa al notar al tomatito apoyado en el marco de la puerta con únicamente una toalla cubriéndole de la cintura para abajo, las gotas de agua caían por su abdomen, cayendo por sus cabellos mojados.

— A-a... Amor... E-estuve p-pensando... Y quizás d-d... Deje que toques un poco — Hablaba con timidez el pelirrojo mientras caminaba con sus manos sobre la cintura intentando parecer seductor, pero sus nervios y sonrojo sólo hacían que parecía más tierno e indefenso de lo normal.

Adrien sonrió divertido y se levantó de la cama, caminando hasta donde Nathaniel con una sonrisa pervertida. Puso sus manos sobre la blanca y suave piel del pelirrojo. Acarició las caderas de este, subiendo ambas manos hasta su abdomen y volviendo a bajarlas hasta la cintura.

Nathaniel, lleno de vergüenza lo único que hacia era soltar unos leves gemidos mientras su sonrojo se hacía cada vez más notable, se tensaba con levedad por las pequeñas cosquillas que le producían aquellas caricias.

— Eres... Demasiado perfecto... —
Puso su mano sobre la toalla con la intención de bajar esta y poder contemplar todo el cuerpo de su amado, pero al instante de que empezó a desatar la toalla Nath lo detuvo, este lo miraba con miedo y timidez.

Sonrió con ternura robando un leve beso en los rojizos labios. Se separó y fue bajando con lentitud por el pecho y abdomen de nath, se detuvo al llegar a la toalla y levantó su mirada fijándola en los ojos del pelirrojo. Lo miraba con duda, preguntando si podía retirar aquella estorbosa capa de tela.

Nath negó con la cabeza intentando separar a Adrien, tenia un incomodo y notable problema entre sus piernas, por lo delgada que es la toalla se notaba el miembro de Nath marcado sobre esta.

Adrien sonrió nuevamente, pero ahora con una perversión mucho mayor. Dejó de mirar a los ojos de Nath y volvió a besar el abdomen de este, soltó el nudo que tenia la toalla y esta cayó sin problema alguno. Los nervios del pequeño y tierno Nathaniel aumentaron, intentó cubrir su virilidad cerrando sus piernas pero fue completamente inútil. Adrien tomó las piernas de este y las separó dejando nuevamente a la vista aquel tierno y apetitoso tierno de carne.

Sin dudarlo besó con levedad el miembro de su amado, este gimió ante ese contacto pero sin dejarle tiempo a que reaccionará llevó todo el falo al interior de su boca. Hacía una leve presión con sus labios empezando a moverse desde la base hasta la punta, mientras hacia esto intentaba rozar aquel trozo de carne con su lengua. Nath no podía dejar de gemir, sus piernas temblaban con levedad mientras este tiraba su cabeza hacia atrás con su boca levemente abierta por los gemidos y sus mejillas totalmente rojas, su respiración era agitada y su corazón latía desenfrenado.

Puso sus manos sobre la cabeza de Adrien y entrelazando sus dedos con el cabello de este. Lo hacía sólo pata sostenerse, no se atrevía a empujar ni a detener al rubio.

Naranja Y Negro. Una Extraña Combinación 🐱💖🎨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora