In The Shadows: Born To Die

Capítulo 18

Araceli

-Cállate Enzo.- dije. Miré mi anillo tenía miedo de verla y de sentirme mal por como la traté antes de que me hiciera olvidarla. No quería canalizarme a su poder por miedo.

-Vamos Ar, ¿qué tanto es para ti una muerte?, mataste como a 5 el día del ataque.-

-Arestum canali, evanesci mae corpus, ascendia phimera revertimini, aut statum sanguinem, vitam, dicitur enim-

Sentí como mi cuerpo caía y que alguien me sostenía.

Abrí los ojos al escuchar a Jamie decir el nombre de Damon.

-¡¡Damon!! ¡¡Damon!!-

-Jamie...-

-Caray Damon ¿Qué te pasó?-

-Me da gusto verte.-

-Déjate de idioteces Damon-

-Te recuerdo Jay.-

-¿Araceli?-

-Si-

-¿pero...que demonios?, ¿dónde está Damon?-

-Seguramente en mi cuerpo en Nueva Orleans, necesito que me ayudes a salvar a la bebé.-

-¿De qué hablas?- dijo ayudándome a ponerme de pie.

-Francesca le ha lanzado un hechizo, está sangrando y la bebé se puede morir, necesito tu ayuda-

-¿Qué bebé?-

-El de Martine y Niklaus.-

Me miró sorprendida, por supuesto no sabía nada.

-Klaus embarazó a Martine-

-Pero se supone que es...-

-Lo sé, pero ahora necesito tu ayuda para protegerlas a ambas.-

-¿Por qué? Si ellas mueren tu puedes estar con Niklaus ¿no era eso lo que querías?-

-Sí, pero la bebé no tiene culpa de nada-

-Ara... regresa.-

-No, no hasta que me ayudes, por favor- comencé a llorar, había olvidado que estaba en el cuerpo de Damon.

-eso no funciona. Damon te mataría si se entera que lloraste en su cuerpo-

-Jamie, ayúdame, no quiero que muera y que Niklaus me odie.-

-Regresa a tu cuerpo, te ayudaré.-

-Gracias.- dije dándole un beso en la mejilla y abrazándole. - revertimini vitam, dicitur enim Arestum canali, evanesci mae corpus, ascendia phimera, aut statum sanguinem, revertere ad locum meum et corpus-

Abrí los ojos.

-Bienvenida- dijo Enzo- me ayudó a ponerme de pie.

-¿La viste? ¿Qué te dijo?-

-Me va a ayudar. Ella me hizo volver.-

-ahí está la ayuda- dijo Perry mirando mi anillo.

Me senté de inmediato en el piso.

-revertere anima, corpus, et auferte ista malediction. Revertimini; eamque dimittere; mihi parva potest salvare. Exprome strigae Halliwell Warren virtus ad liberandum infantem nondum natum nece immerita luere. Elviana, Maria, Diana, Melinda, Patricia, Penelope Juliane, Laura. patriis Amaymonis: da mihi virtutem tuam et inertia conveniat.-

Abrí los ojos, Perry me miraba con extrañeza pero el encantamiento había dado resultado.

-Está bien- dijo Enzo

-MAIORES BENIGNE- agaché la cabeza y comencé a llorar, mi hermana me había ayudado y Enzo me había obligado a hacer algo que odiaba, saltar a un cuerpo, pero lo había hecho por esa bebé, por ella. Ella, como nosotras no tenía al culpa de nada.

-Araceli...-

-¿Dime Marty?- dije enjugándome las lágrimas con el dorso de mi mano.

-Gracias.-

-No tienes nada que agradecer.-

-Pudiste dejarla morir...-

-Pero no lo hice, es... es mi familia-

-Gracias.-

-Duerme, mañana ya no tendrás esas marcas ni este dolor.-

-Enzo...-

-Dime.-

-¿Me traerías un vaso con leche?-

-¿De humano, de vaca, de caballo?-

-Hahha- rio con cansancio. –De vaca-

-Ya te la traigo- salió de la habitación.

-¿tú quién eres?-

-El hermano de Damon y Stefan.-

-¿No se supone que está muerto?-

-Es un ángel hechicero.-

-Oh, mucho gusto, lamento las fachas-

-Descuida, he visto a seres en peores posiciones que tú. Araceli, me tengo que ir, mejorara con el tiempo.-

-Lo sé, dale las gracias de mi parte.-

-Lo haré. Martine, un gusto... cuida a ese bebé.-

-Lo haré.-

-Por cierto, con su nombre ya no estará segura.-

-¿a qué te refieres?-

-Ellas no estarán seguras siendo dueñas de la propiedad.-

-Ok, hare que cambien el nombre de la escritura.-

Enzo entró a la pieza seguido de mi padre, Perry lo vio.

-¿Perry?-

-Elijah.-

-¿te vas?-

-No puedo estar mucho tiempo cerca de ella- dijo señalándome con la cabeza –Hay caos cuando paso demasiado tiempo.-

-Lobita, ¿sabes que tuve que compeler a una vaca?, abajo tienes ya una vaca a tu servicio, leche fresca las 24 horas del día... y de la noche también-

-Eres un idiota Enzo- dije riendo con ella.

-Hasta luego- dijo Perry y orbitó.

-¿Dónde está?-

-En la habitación.-

-iré a verla. Enzo...-

-Yo me quedo con ella, solo por el televisor... ¿Por qué ellas tienen?-

-Deja de quejarte Enzo.-

Dije y salí detrás de mi padre.

-¿De dónde sacaste el poder?-

-Papá...-

-No, la verdad, no quiero saber que estás practicando magia oscura.-

-La pedí a mis ancestros, descuida, de otra manera Perry me lo habría impedido-

-Recibimos tu mensaje- dijo el abuelo.

-Gracias Araceli- dijo Niklaus –Gracias por salvar a mi hija.

-Es una Mikaelson ¿no?-