-Prima Jay, es nuestra prima.- dije
-Es mi deber cuidar a un nuevo Naturae.-
Todos nos miramos mientras Jamie solo agachaba la cabeza, ella lo sabía y no me lo dijo, miré de inmediato a Damon y negó.
-¿Lo sabías y no me lo dijiste?-
-No estaba segura.-
-¿Qué?, ¿mi hija es como tú?, no, no...-
-Marty...-
-No, yo no voy a permitir que mi hija muera.- dijo Martine mirando a Niklaus.
-No sabemos si ella...-
-Es una puta maldición, tú vas a morir, ¿Quién sabe si ella vaya a hacerlo?-
-No estoy segura, pero por algo pasó esto, te juro Martine que... si yo hubiera sabido de este embarazo, no habría permitido.-
Las órbitas de Perry aparecieron.
-Perry...-
-Disculpa, pero... Jamie tenemos que hablar.-
-¿de qué?-
-¿podemos?-
-Dime.-
-Hay algo de lo que debes enterarte.-
-Carajo dime.-
-A solas.-
-Si mi madre te envía dile a ella que venga.-
-No, no fue ella, vamos dentro.-
Se puso de pie con enfado y caminó hasta el pequeño estudio, intenté escuchar, pero ambos eran brujos, ellos sabían un secreto que yo no, y me enfadaba no saberlo.
-No voy a permitir que mi bebé muera por culpa de tu sobrina-
-Martine, es de mi hermana de quien estás hablando.-
-Lo sé, pero no... no quiero ver morir a mi hija.-
-No nos adelantemos a las cosas Marty.- dijo papá, él siempre tan apacible y paciente. No entiendo de quien saque lo histérica, probablemente de mamá.
Jamie
-¿Qué pasa Perry?-
-Me envía Kol, dice que la maldición está activada.-
-Lo sé.-
-Me dijo también que aceptó el trato y que le permitió elegir el cuerpo.-
-De acuerdo.-
-¿Qué hiciste?-
-Nada.-
-Jamie, ¿Qué hiciste?-
-Lo necesario para salvar a mi familia Perry, no espero que lo entiendas.-
-¿Tu madre lo sabe?-
-No, y no quiero que se lo digas.-
-Jamie...-
-Es por su bien, por el tuyo y de paso por la tía Diana.-
-Jamie...-
-Esto no te incumbe Perry, es el futuro de Ara, de Damon, de la bebé...-
-¿Qué hiciste?-
-Un pacto con mi tío Kol, bueno más bien él es parte de mi plan.-
-Lo sé, pero es el desmadre de los Mikaelson... Una abominación andante-
-¿Yo que soy? ¿Una manzana?-
-Sabes a lo que me refiero, además, ¿él como te puede ayudar del otro lado?-
-Todo a su tiempo Perry.-
Lo miré, era mi primo, mi familia, pero no podía contarle todo, yo sabía que se traía algo con su hermano, y con Enzo, y que Enzo algo con Araceli, y Damon con Araceli, no sabía que, Damon logró dominar la oclumancia desde que se enteró de que yo compartía mis poderes con él.
En realidad lejos de sentirme aliviada, me sentía expuesta, cada vez que descubría algo nuevo, todo se complicaba, al estar mi familia aquí, todo se complicaba, una variedad de guardianes que la naturaleza nos daba crearía una desbalance, eran demasiados vampiros, y licántropos, mientras no naciera, mi primita era licántropo, así que había presencia de 3 licántropos, tío Klaus contaba como uno, el abuelo, tía Rebekah, papá, tío Klaus, eran 4 vampiros originales, y luego estaba Enzo, un vampiro común pero augustine, una raza mejorada por así decirlo, un animago Kit, y un metamorfomago, Warlock, si con Damon ahí y con las visitas de Perry, a veces me sentía asediada, ahora sería peor. Llevé mis manos a la cabeza.
-¿Qué te sucede?-
-Mi poder..-
-¿Qué tiene?-
-Con todos esos seres... están absorbiendo mi poder.-
-¿Qué?, ¿Por qué no me lo dijiste?-
-No le había dado importancia.-
-¿Sabes que si se aparecen las furias tu...?-
-Se lo que me pasaría, así que no sé cómo harás, pero llévate a alguien de aquí ahora, antes de que explote.-
-Me llevo a Warlock, y mantendré alejados a los licántropos que puedan llegar a sentirla, y de paso a las arpías.-
-Gracias Per.-
-No tienes que darlas, solo... no cometas errores... pueden ser peores al momento de...-
-Descuida.-
-Te quiero Jay. Y no porque seas mi cuñada/prima, te quiero desde antes de saberlo.-
-Yo también Perry, créeme que aunque no te lo diga y aunque vengo cuidándote, te quiero.-
-Lo sé.-
Estos dolores de cabeza eran cada vez más cercanos en cuanto a tiempo se refería, estaba cansada todos los días, pero con fuerza, era irónico, tenía fuerza, pero estaba cansada, ni Damon ni Perry se daban cuenta de cuánto daño me estaban haciendo estos dolores de cabeza.
Un ave negra, un cuervo para ser exactos, entro al estudio, se posó sobre el perchero y lo miré, no era Jevel.
-Habla Diaval.-
-Mi señora... temo comunicarte que...-
-¿Qué?-
-Es cuestión de tiempo ahora.-
-¿hay un aproximado?-
-No debiste tocarla.-
-¿Cuánto?-
-No debiste.-
-Mierda Diaval ¿Cuánto?-
-Un par de meses quizá.-
Un profundo dolor en mi corazón me hizo estremecer, ahora era el fin, un par de meses me quedaban, ahora empezaba a añorar todo lo que me faltó hacer. Que en realidad era decirle a Damon lo mucho que lo amo y lo amé. Decirle a mi hermana que su relación con mi tío Klaus no era nada malo, depositar en alguien confiable mis poderes.
-Gracias-
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In The Shadows: Born To Die
VampiriCuando el orden natural de la tierra se ve afectado por la brujería, la propia naturaleza se ve obligada a crear un orden. Luego de varios siglos vagando por el mundo, los vampiros originales, han creado una línea extensa de sangre, los hombres - lo...