Hoyo Negro

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- Hey, Rick, ¿qué te pasó? ¿Peleaste contra un oso? Si piensas conseguir una chica el día de hoy no vas a conseguir nada con ese rostro
- Mike, cierra la boca y dame una puta cerveza
- Pero vaya genio, toma
Bendita cerveza es lo único que hace que olvide a esa zorra
- ¿No vas a contarme quien le partió el culo a Rick El Grande?
- Un consejo Mike, no hagas comentarios​ estúpidos a un tipo que pesa el doble que tú
Le dije a ese imbécil mientras le sujetaba el cuello de la camisa y lo acercaba lentamente hacia mí
- Vale Rick, comprendo, tranquilo
- Eres un imbécil
No quería escuchar más al idiota de Mike, así que le di la espalda y aprecie la vista de aquel lugar. Buenas mujeres, buena música, el olor a tabaco y cerveza mezclados en el aire, el murmullo de las conversaciones, que bella mierda de lugar
Bueno, pero si parece ser que ahora hay más universitarios que motociclistas, pura mierda había ahí esa tarde.

Le di un sorbo a mi cerveza y cuando lo hacia note algo, un chico muy imbécil para ser exactos, se parecía al amigo de aquel hijo de perra que me había partido el culo, estaba acompañado de una morena muy candente, esperen, ¡pero si era Pam! Qué pequeño este lugar. Iré a molestarles un poco y mostrarle a ese idiota quien manda en el pool
- Hey, buenas noches señoritos, llegan retrasados
Exclamó el imbécil aquel, pero, ¿a quién se dirigía?
Vaya, vaya, vaya, ya lo veo pero si es Adha, ¡y qué sorpresa¡ Viene acompañada por su caballero de reluciente armadura, le voy a romper la cara a ese niño bonito.

Me ha quitado lo que es mío.

Estaba a punto de levantarme para matar a ese imbécil cuando sentí que alguien me tomaba del hombro
- Ni se te ocurra levantar tu trasero del banco, conozco esa mirada y sabes que en este bar no se toleran las peleas
Era Mike, haciendo fuerza para que no moviera de mi lugar 
- Vale Mike, tranquilo, no mataré a ese tipo... hoy no
- Y en este establecimiento tampoco 
- Jajaja, no, ya hay demasiada sangre manchando el suelo de este lugar
- Vaya que tienes razón, ja

Me sentía demasiado ebrio, ¿qué hora era? Mierda, las 4:30 de la mañana y yo sigo en este lugar de mala muerte, bah, eso no importa. 
Con otra cerveza se me olvidará 
- M-Mike... d-dame otra... otra... otra cerveza 
- No, ya estás demasiado borracho, llamaré un taxi para que te lleve a casa 
- Oh, venga, una no me haría más daño
- No y punto, quédate quieto en lo que llega el taxi 
Mike era un maldito nefasto, yo no estoy ebrio sólo un poco mareado, bueno, sí estoy borracho, ¿y qué? Eso no es impedimento para que yo pudiera manejar mi carro e irme solo a casa.
En ese momento me levanté del banco y no di tres pasos cuando caí de bruces al suelo 
- ¡Mierda Rick! Te dije que te quedaras quieto, menudo imbécil eres 
- Puedo irme solo casa, joder
- No puedes, no has dado ni un paso y ya te caíste, así que esperaba el puto taxi ahí sentado en el mierdero banco, ¿haz entendido?
- Lo entiendo Mike, me quedaré quieto como un perro guardián aquí en el banco de mierda
- Buen muchacho
Me dijo Mike burlándose y ayudándome a sentarme de nuevo en el banco 

- Tenga y quédese con el cambio
Hogar, dulce hogar.
Yo le diría a este lugar: Mierda y más mierda
Vaya que este lugar era un jodida pocilga, debería contratar a alguien para que mantuviera el lugar limpio. Joder, aquí dentro huele a que algo lleva muerto desde hacía varios meses, vaya hogarcito el que me cargo.

Llegué a mi habitación y en cuanto vi mi cama me dejé caer en ella, me sentía fatigado, tal vez sea porque me enojo demasiado, gasto muchas energías queriendo pelear por cualquier cosa, bah, eso no importa, me encanta sentir esa sensación de satisfacción recorriendo las venas de todo mi cuerpo al ver los rostros asustados de las personas cuando ven que un tipo enorme está a punto de matarlos a golpes sin una razón valida.
Vale la pena cada maldita vez que hago eso.

A excepción de hoy, aún no puedo entender que ese maldito renacuajo hijo de perra me haya plantado cara y me haya podido ganar a pesar de que soy más grande, más fuerte y más intimidante que él y todo, ¿por qué? Por un bonito culo, ese imbécil me quito ese bonito culo que es mío, es un hijo de puta con suerte.

Y yo, personalmente, me encargaré de quitarle esa suerte que tiene.



Tú, Mi UniversoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora