Hay tantas cosas que amo de él; su sonrisa, su estúpida manía de preocuparse por mí, su forma de besarme y hacer de mí un mar de mariposas. Lo amo, lo amo como nunca llegué a pensar que iba a amar a alguien, y si dije alguna vez que ya había amado lo suficientemente, me equivoqué, porque este amor que siento por él, no se compara con ninguno.
Poema para Sehun, escrito en la oscuridad de la habitación.
Corea accesorios:
El pedido que realizaste del anillo ya está listo. ¡Muchas gracias por confiar en nosotros!
La sonrisa que se me formó en los labios en aquella mañana, no se comparaba con la que tuve ahora cuando el paquete llegó. Un anillo plateado estaba dentro de una pequeña caja de correos. Metal inoxidable, parecía de plata a simple vista (cosa que por desgracia no era), una pequeña piedra de cristal en medio y, con letras negras y grabadas, se leía: Oh Sehun. Tal vez era algo tonto llevar un anillo con el nombre de tu pareja, pero no me importaba. Lo use en la mano derecha, dedo medio, encajaba a la perfección.
Y era un poco bobo, porque al llegar a la preparatoria, alzaba mi mano para que mis amigos notaran el anillo. Chanyeol dijo que era algo bastante cursi y lindo a la vez, otros, dijeron que era bonito. Yo solo podía pensar en que llevaba a Sehun en mi mano, aunque siempre estaba presente en mi memoria.
Pero hoy, justo hoy, él está ahí, frente a mí. La sonrisa que me regala, sus ojos en dos medias lunas y sus brazos abriéndose para darme un abrazo, me bastan para correr y abrazarlo. Él se separa un poco de mí, me besa en las mejillas y en la punta de mi nariz, con sus labios susurrando pequeños "te amo" a cada rato. El corazón se me estruja con fuerza cuando me besa en los labios y luego me mira, porque si, amo a ese idiota, lo amo demasiado y siempre termino olvidando porqué estaba enojado ayer por la noche.
-Alguien te extraño-. Susurra Sehun, acariciando con sus dedos mis mejillas-. Te extrañé tanto... perdón por irme de la nada, tenia muchos trabajos y...
-Lo sé, lo sé-. Le respondo-. Pero al menos un pequeño mensaje para avisarme, me preocupas.
-Sabes que siempre aparezco de la nada, pequeño preocupon.
No tengo ganas de pelear, no cuando hace días que no lo veo. Prefiero abrazarlo un rato más y acurrucarme en el hueco de su cuello y hombro. La sensación de estar con él me llena de tanta paz, que olvido los problemas que hay en casa. Nos separamos por un momento y decidimos ir caminando, con las manos entrelazadas.
-Hace días compre este anillo-. Alzó mi mano y se lo muestro, Sehun sonríe-. Sehun, soy de Sehun y lo dice claramente.
El mismo gato de siempre me mira con pereza cuando llego al departamento de mi novio. Galleta está acostumbrado a mí, pero las veces que beso a Sehun, que lo abrazó, juraría que me mira con cierto odio. Es su gato y es comprensible. Me hace recordar al perro que una vez tuve (por el cual conocí a Sehun) y que tuve que dárselo a un familiar.
Sehun tira de mi mano y me hace sentarme en el sofá. Su hogar está igual; limpio, ordenado y solo.-¿Tu padre no vendrá hoy? -Le pregunto. Él se recuesta en el sillón, con su cabeza sobre mis piernas. Ha tenido la costumbre de hacer eso para hacerle cariños en el cabello.
-Ocupado, ya sabes. Ha estado bastante ocupado con el trabajo-. Me dice, sonriendo cuando acarició sus cabellos.
Y aunque él no lo diga, sé que se siente solo y eso lo odio. La soledad es lo más horrible que una persona puede sentir. Me agachó y le beso la frente.
-Cuando te sientas solo, háblame, siempre estaré ahí para ti.
-Lo sé bien, amor.
Mis dedos merodean entre sus cabellos, Sehun cierra sus ojos y solo somos él y yo en su sofá, en silencio. Las palabras me cuestan algunas veces, quisiera contarle tantas cosas... hasta lo más estúpido. Como por ejemplo; que Xiumin escribía cosas demasiado cursis a su novio, que Chanyeol ahora tiene una pareja y que mis amigos saben que me gustan los hombres y no se alejaron. Son cosas tan tontas, pero que me encanta compartir con él, porque se ríe, porque amo su maldita sonrisa y la forma en que me pone atención cuando hablamos.
Es entonces, cuando por segunda vez me pregunto ¿qué será vivir sin él?-Sehun-. Le llamo, él abre los ojos y me mira-. Si algún día... si algún día nosotros ya no fuéramos pareja, si ya no habláramos, escribiría un libro. Y hablaría de ti, y diría que fuiste de las primeras personas que confiaron en mí, que gracias a ti es que publiqué una novela. Les diría que eres lo más precioso que me ha pasado, y serías el protagonista de ese libro ¿me escuchas? -La voz se me quebró, Sehun tenía los ojos rojos mientras me miraba-. Porque sería gracias a ti, porque... por ti, estoy confiando en mi mismo. Mi primer libro será para ti ¿me oyes?
Sehun, quien se sentó en el sillón, me atrajo a sus brazos y me abrazó con fuerza, yo comencé a llorar.
-Joder... te pones así de repente y no sé qué decir. ¿Sabes que haré cuando eso pase? Porque va a pasar. Entraré a la primera librería y comparé tu libro, y cuando llegue a casa, besaré cada página y sabre que mi pequeño soñador lo logró. Besaré todos tus poemas y estaré más orgulloso de ti, más de lo que ya estoy. Sabré que nada fue en vano y que serás todo un escritor.
***
Cuando llegué a casa, todo era como siempre: mi hermana con su barriga cada vez más grande, sentada en el viejo sofá, junto con mamá viendo la televisión. Las dos mujeres me observaron y les sonrió. Mi madre me dice que coma, aunque en realidad no hay mucho que comer; sopa con verduras, lo único que hemos estado comiendo estos días. Pero estoy tan de buen humor, que no me importa.
Me voy a la cama, hay mensajes de Sehun y Xiumin. Abro primero el de Sehun.Sehun:
Te amo, te amo. No me cansaré de decirlo una y otra vez.
Dulces sueños, mi bello soñador.-------------------------------------------------------------
¡Hey, hey! Demoré casi un mes, que vergüenza <|3. He escrito este capítulo por el celular, tan pronto este en pc lo corrijo, igual gracias por leer ♡.
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Cuando una lágrima cae del cielo (HunHan)
Fanfiction"Clic", no sé si fue el sonido de su cámara o de mi corazón. Me había perdido en sus ojos y en esa estúpida sonrisa que hablaba por si sola. Éramos el desastre perfecto para encontrarse y enamorarse, éramos tan opuestos, que era inevitable no buscar...