Do-Re-Mío... (Wigetta)

"Has hecho lo correcto"

Guillermo pudo salir.
Finalmente luego de tanto pensar recibió la salida a su falta.
Samuel será atendido en la primera opción en la solicitud de la beca.
Tomó un momento para pensar en el ensayo del porqué quiere estudiar en esa universidad.
Finalmente​ citaría a Samuel.
Dejaría de lado que ha sido él quién se adelantó en enviar las solicitudes pese a que este sería parte de su participación como profesor encargado.
Samuel volvió a ser el chico alegre de antes. Entró, dejó la maleta en el escritorio pues hay tres chicas aún en el salón.
Guillermo entregó la aceptación de la solicitud, era casi imposible que respondieran.
-Como ha pasado esto?
Preguntó el adolescente, es claro que debía saberlo.
-Ellos han respondido al primer enviado. Ahora debes hacer un ensayo que te ayudaré a redactar.
Y sí, está era una gran noticia pero es que a Samuel le agradaba estar en ese salón.
-Me alejaré de usted? Yo no quiero...
-Samuel por favor, es lo que quieres...
El mayor trató de bajar la voz. Las tres chicas presentes alzaron la cabeza.
-Debo irme.
Samuel tomó el papel. Se marchó casi corriendo
El adulto pudo haber alzado la voz, correr detrás de él pero es que eso sería tan estúpido.
Finalmente llegó la hora de salir de la escuela.
En la salida se encontró con Luzu cerrando el gimnasio.
-Hey, como así te vas tan tarde?
Preguntó Luzu.
-Vamos a tomar algo y te cuento.
Guillermo no paraba de ver las cámaras. Luzu comprendía las razones.
Finalmente estaban entrando al café.
-Fue por Samuel?
-He logrado que acepten su petición, se lo he dicho.
-Y?
-No lo sé, ha reaccionado de manera tosca.
-Es porque se alejará de ti.
-Iba a pasar.
-Sabes que hice algo parecido con Lana.
-Una beca?
-Si.
-Quien te ayuda?
-Se lo dije al rector y este habló con sus padres.
-Ella no reaccionará bien.
-Ya lo sé. Supongo que me será igual de difícil decir adiós.
Lejos de querer terminar esto Guillermo había dejado de lado como se podría sentir ahora Samuel.
Recordó que él jamás se lió así en la adolescencia.
Terminó de hablar con Luzu para ir con el menor.
Samuel abrió la puerta, el padre estaba en la sala más que contento por la noticia.
Guillermo entró, por un momento pensó que no le enseñaría la carta.
Samuel había aceptado que pese a no querer separarse del mayor es quizá la oportunidad más importante que tendrá a partir de ahora.
Se sentó, tomó la maleta y se dispondría a hacer lo que su profesor diga.
Más aún era por así decirlo que el profesor no venía preparado para dar clases, esta vez sí se imaginaba metido en las sábanas del menor.
Su padre no parece que se marchará, empezaron a buscar un tema.
Todo iba tan rápido y frío que Guillermo solo quería darle una señal al castaño para verlo después que acabe esto.
Pero no sucedió. Samuel se puso de pie.
-Gracias profesor, la enviaré mañana a primera hora.
Diría el menor tan directo.
El padre lo despidió a la puerta.
Por cada paso que daba el profesor era un beso que pudo haber dado y que arruinó.