Poco tiempo después –muy poco, de hecho-, me di la oportunidad de intentar algo con un chico que conocí tiempo atrás. Todo salió muy de la nada si lo pienso bien, ¿cuáles eran las probabilidades? Aún así, pasó, y lo hicimos funcionar.
Fue un noviazgo corto, pero me enseño bastante. Me trajo calma, y estabilidad. Paciencia y atenciones. Y me dejó a un amigo.