B. Parte 2. Encuentro

25 1 0
                                    


Los nervios me tragaban viva. Me sentía ansiosa entre tanta gente, esperando a que él llegara.

Iba a verlo por segunda vez, pero en esta ocasión lo tendría de frente. Me sentía temblorosa, me sudaban las manos –que raro-, y me aterrorizaba pensar que no llegaría; ya era tarde. Y de pronto, lo vi a lo lejos, acercándose, arreglándose una y otra vez la camisa al caminar, estaba tan distraído que no parecía darse cuenta de que lo hacía.

Al pararse frente a mí lucía más nervioso que yo, desviaba constantemente la mirada, y sonreía tímidamente, y yo, me perdí a mí misma viéndolo.

Crónicas de un corazón rotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora