Ana: la oración de una mujer acongojada,parte I

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1 ° de Samuel 1:1-10.

E hizo voto diciendo: Jehová de los Ejércitos, si te dignares a mirar la aflicción de tu sierva, y te acordares de mi, y no te olvidares de tu sierva, sino que dieres a tu sierva un hijo varón,  yo lo dedicaré a Jehová todos los días de su vida, y no pasará navaja sobre su cabeza".

1° de Samuel 1:11.

Este es el principio de 1° de Samuel.

Este capitulo comienza con el corazón triste y acongojado de Ana, para quién,  no todo era felicidad en su vida: ella estaba casada con Elcana, pero este a la vez, tenía otra esposa: Penina.

Sabemos que el matrimonio establecido por Dios fue entre un hombre y una mujer,  pero en el mundo antiguo, sobre todo en el Antiguo Testamento, la práctica de la poligamia se daba entre hombres pudientes,  se diò entre los patriarcas y con los reyes, pero las razones eran:

1. Para producir más prole para ayudar en el trabajo del hombre y asegurar la continuidad de la línea familiar del hombre.

2. Muchos hijos era el significado de posición social y riqueza.

3. Muchos hombres morían en batallas, y la poligamia fue aceptada para ayudar a las mujeres que quedaban viudas.

Pues bien, esto de tener más de una esposa traía muchas veces problemas como le ocurrió a Ana con Penina. Ese ha de haber sido un hogar lleno de muchos conflictos, al parecer,  había una atmósfera cargada de tensión, aunque hubieran tenido muchas riquezas,  pero aquí el dicho " hogar, dulce hogar" no se cumplia a plenitud.

" y su rival la irritaba, enojandola y en triste viéndola, porque Jehová no le había concedido el tener hijos" ( v.  6).

Pues aquí estaba el segundo, y quizás, el mayor problema para Ana: no podía tener hijos.  Una mujer en la sociedad Israelita que fuera estéril, era considerada un fracaso, y quizás, la pobre Ana, así debió haberse sentido. Imaginese, así estamos, muchas veces, con grandes cargas en nuestros corazones, que aunque traten de desanimarnos, nuestro corazón no encuentra consuelo en nada.  Elcana era un hombre piadoso, ya que nos dice que cada año subían a Silo, a la casa de Jehová.

El Tabernáculo de reunión se encontraba ubicado en Silo, ya que este era el centro de la nación en ese tiempo. Pero parece que eso no era suficiente, pues, habían serios conflictos en la casa de Elcana. Porque el amaba a Ana, y eso hacía más que Penina tuviera envidia de ella. 

Ana entró en una gran depresión.  Pero vemos
Que ella fue al Templo a orar,  y " con amargura de alma oró a Jehová, y lloró abundantemente " ( v.  10).

Cuantas veces, nosotros nos acercamos a Dios porque nos sentimos muy mal, tenemos problemas con otros, no vemos que se haga realidad todo aquello que queremos en nuestra vida,  dejando que un sinfín de cosas nos abrumen totalmente. Ya nada nos puede devolver la alegría, como en el caso de Ana, y cuando ya no damos más, es que podemos levantar nuestra vista al cielo,  y Dios estará allí, listo para socorrernos.

Te invito a que derrames tù corazón delante de Dios, solo El puede sanar tus heridas,  y ten fé, de qué esa promesa se cumplirá.

Conforme al corazón de Dios _ Volumén 1( el origen) ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora