Conforme al corazón de Dios _ Volumén 1( el origen) ®

¡ Esos celos! Segunda parte

Porque donde hay celos y contención, allí hay perturbación y toda obra perversa.

Santiago 3:16.

La versión Dios habla hoy dice:

Donde hay envidias y rivalidades, hay también desorden y toda clase de maldad.

Los celos definitivamente pueden ser peligrosos.

Los celos provienen de un corazón que no esta en sintonía con Dios. Cuantas veces nosotros como cristianos, no hemos caído en ellos?  Parecieran insignificantes, pero fuera de control, conducen a otras cosas mayores y lamentables.

Este fue el caso de Saúl y David. El aprecio que Saúl tenía por el desapareció en unos segundos, cuando escuchó los cantos de las mujeres de Israel que los salieron a recibir : Saúl hirió a sus miles,  y David a sus diez miles.  Esto fue el detonante para descubrir el corazón de Saúl.

A Saúl no le gustó para nada escuchar eso " no le falta más que el reino " - pensó para si.  Muchas veces,  así sucede en todas las relaciones,  por ejemplo : hay dos amigas, son súper inseparables,  andan como dicen por allí " como uña y mugre " para dar a entender que andan juntas,  en fin...  Pero a una de ellas, siempre la reconocen como " buena estudiante, simpática,  buena onda, con gran conducta,  etc",  y a la otra no.  Entonces esta empieza a albergar cosas malas en contra de su amiga : nace la envidia, y la envidia lleva a otras cosas,  hasta que se separa esa amistad.

¿ Tu crees que ella realmente era amiga de la otra?

Este ejemplo es algo suave que te he puesto,  pero hay otros casos con consecuencias terribles.

Saúl tenía envidia de David,  hasta el grado que quizo matarlo con una lanza,  sin motivo alguno.  Después, lo puso como jefe en sus ejércitos, a lo mejor pienso que con la esperanza de que este muriera en alguna campaña militar, pero,  sorpresa: Dios conocía tanto el corazón de Saúl y David, y vemos en el pasaje que se nos dice " que Dios estaba con David,  que le daba éxito en todo lo que hacía,  y era tanto admirado en el pueblo y por los siervos del rey".   Esto hizo que Saúl tuviera miedo de el, ya que sabía que Dios se había apartado de el hace tiempo,  y reconocía su poder y gracia en la vida de David.

Así pasa con nosotros y los que no conocen de Dios,  ellos ven que nosotros somos unas personas " prósperas " porque Dios mora en nosotros,  los hace ver que mal están actuando ellos, y hasta pueden ver la diferencia entre ellos y nosotros, y eso les puede dar un poco de temor.

Ya que no tuvo éxito en las dos ocasiones anteriores,  le puso una trampa: le ofreció la mano de su hija mayor, pero al final lo engaño, dándosela a otro hombre.

Después, supo que Mical,  su otra hija ( y no tan buena pieza, eso lo veremos después),  estaba enamorada de el.  Pero antes le puso otra trampa: debía de traer cien prepucios de filisteos,  la coartada perfecta " como venganza de los enemigos",  pero realmente,  el deseaba que los filisteos mataran a David.

Y saben que pasó : David lo hizo.
Y el rey no tuvo más opción que entregarle por mujer a Mical.

Y dice el versículo 20 que : Saúl a partir de esto, fue enemigo de David todos los días de su vida.

¡ Aquí empezaba el calvario del pobre David, todos los días de su existencia,  su camino al trono no iba a ser fácil!.

Un capítulo muy tremendo el de hoy,  del cual podemos tomar de todo un poco:

1. La Biblia nos invita a desechar todo aquello malo que podamos albergar dentro de nuestro corazón. Los celos claramente provienen de las obras de la carne, de la oscuridad, y son algo que no le agrada a Dios,  y El Señor nos invita a desecharlos de inmediato:

19 Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia,
20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías,
21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a éstas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.

Gálatas 5:19-21.

2. Pedirle a Dios perdón si nosotros hemos albergado malas actitudes contra otros,  y reconocer con humildad los éxitos de las personas cercanas.

3. David demostró una vez mas porque Dios lo llamó : un hombre conforme a su corazón.  David era obediente, el rey lo trataba mal, pero el le devolvía bien,  a pesar de que su vida estaba bajo amenaza,  David nunca tomo la venganza en sus manos, sino que,  tenía un corazón perdonador y,  dejaba que Dios hiciera justicia por el. 

Que Dios nos ayude siempre.