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dió una y otra vuelta en la cama, no se podia quedar dormida, sentía, aún despues de las horas que habían pasado, sus labios pegados a los suyos, esos labios fuertes y exigentes, que le reclamaban, le besaban y le acariciaban... lanzó una maldición y, tomando la almohada, la lanzó lo mas lejos posible y se sentó en la cama abrazandose a sí misma...
¿porque la abría besado...? ¿porque había, ella misma, respondido a su beso...? y peor aun ¿porque se había sentido tan bien...?
se tocó los labios con sus dedos y suspiro con aspereza... no podía negarselo a si misma... lo deseaba...
su celular sonó y ella se sobresaltó... corrió a tomarlo en sus manos... y sintió que se le contraía el corazón al ver de quien se trataba... era él...
rápidamente dejó su celular sobre su mesa de noche... y tomando su almoahada se abrazó a ella suplicando porque él pronto se cansara de llamarla... no queria hablar con él... o mas bien si... pero eso era lo malo, él era el jefe... Por Dios!! era "Alfonso"... era el hombre que representaba todo lo contrario a ella... con sus trajes oscuros que parecian haber sido planchados sobre su cuerpo, su cabello cortado justo donde tenia que ser, ni muy largo ni muy corto, zapatos perfectamente lustrados, y un cuerpo que podria ser envidiado por cualquier supermodelo del mundo... oh... y el olor de su colonia... y su piel terza... y...
maldijo en voz alta, lo suficientemente fuerte para que se oyera en la estratósfera y se metio entre las cobijas aun mas cubriendo con la almohada su rostro...
el bendito celular seguía sonando... y las llanas de llorar le hacian arder los ojos... deseaba... amaba a ese hombre que se encontraba al otro lado de la linea... pero amor es una palabra que no se encontraba en el diccionario de "Alfonso Herrera".
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tomó su celular e intento marcarle...repicó una, dos, tres veces... y todas las que tenia que repicar, más sin embargo no le contestaba... el celular fue contestado por el buzon de voz y el, frustrado, colgó el suyo, dejandolo sobre la mesa de centro de su sala, cuando en realidad lo que deseaba era estrellarlo contra el suelo... ¿cuantas veces la habia llamado ya?... ¿5...? ¿8...? no tenía la cuenta, pero al parecer ella no tenía intensión de conctestarle, de tal manera que se maldijo en voz alta...
¿porque había sido tan impulsivo?
solo, solo el hecho de haberla tenido tan cerca, de haber visto como sus labios se separaban lentamente mientras hablaba, y de haber sentido como su perfume invadia todos sus sentidos... lo habia hecho olvidar donde estaba, con quien estaba y quien era...
solo habia deseado besar esos labios... y eso era lo que habia hecho...
tan instintivo... tan primitivo.... tan... tan no-él -se recordó mentalmente- suspiró profundamente y volvió a tomar el celular en sus manos para intentarlo de nuevo, pero ella no le contestó, asi que, frustrado, colgó el celular y, poniendolo de nuevo sobre la mesa, tomó un sorbo del coñac que se habia servido apenas había entrado al apartamento, y se recostó en el sillón...
solo quería disculparse... decirle que no iba a volver a pasar...
pero ella no le contestaba... quizás... quizás ella solo necesitaba tiempo... pero el en ese momento estaba jodidamente ¿arrepentido?... no... no se arrepentia... solo queria disculparse, sin sentirlo en realidad, porque si habia algo de lo cual el no podia arrepentirse era de haberla besado esa noche...
pero necesitaba hablar con alguien...
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sentia el calor de su piel a su lado, y se sentía tan bien... se acurrucó contra su pecho buscando mas calor, y se vio recompensada con que él, en medio de sus sueños, le abrazara por la cintura... sonrió, si, sonrió, y se dió cuenta que no podría vivir sin esto que tenía con él... un dolor... asociable con la tristeza, le aprisionó el pecho y se acurrucó mas buscando consuelo en su contacto...
mientras habia estado acostada en su sofá habia llegado a un acuerdo consigo misma... no iba a decirle nada... ni una sola palabra de lo que habia pensado decirle, solo disfrutaria el momento... y usaria todo su armamento para asi poder atrapar a Anibal lo más rápido posible.... luego de esto habían cenado... la comida había sido deliciosa... mas sin embargo lo que mas le habia gustado es que, luego de que terminaran de comer, el la habia tomado en sus brazos y la habia llevado al dormitorio, haciendole sentir en las nubes, mientras le besaba y le acariciaba... luego, ya desnudos, habia sentido el roce de sus pieles, humedas por el calor que les rodeaba, mientras el le poseía en cuerpo y alma... haciendole sentir que su alma se separaba de su cuerpo e iba a volar a la estratósfera... una sonrisa se dibujó al rememorar el momento exacto en que, luego de aquel maravilloso climax, el le habia besado lentamente, y le habia abrazado pegandola a si... definitivamente lo amaba...
su celular comenzó a sonar...
y ella, separandose lentamente de los brasos de Chris, que extrañamente seguia dormido, a pesar que el celular sonaba muy alto, tomó el celular que estaba sobre la mesa de noche, hablando lo mas bajo que pudo...
Dulce: aló?
Alfonso: hola Dul... ¿te agarro en mal momento?...
Dulce: si... creo que si, Pancho...
Alfonso: ya... deja la broma, no me llames Pancho, y menos en el ambito laboral...
Dulce: -suspirando- ¿estamos en el ambito laboral? -rió, y se fue levantando lentamente de la cama- esta bien Alfonso... ¿que sucede...? ¿alguna emergencia...? -volteó a ver a Chris que seguía durmiendo, asi que, tomando y colocandose la camisa de él, que estaba a sus pies en la cama, empezó a salir de la habitación... la cual se quedó en silencio en el mismo instante en que esta cerró la puerta...
lo cual aprovechó Chris para darse la vuelta y sonreir de oreja a oreja... "Pancho" era "Alfonso..." el mismo nombre que había escuchado de boca de Christian, y que pertenecía al jefe de ellas en la agencia... el jefe de Annie y Dul...
en aquel momento una brisa de calma le llenó... más sin embargo no debía de confiarse... aún estaba su padre al asecho, y Dulce indefensa ante él...
la puerta se volvió a abrir, y el verle despierto ella sonrió y se acercó a la cama lentamente, dejando el celular sobre la comoda, y desabrochandose lentamente cada uno de los botones de la camisa... la sonrisa de Chris se ensanchó y apartó, de momento, los pensamientos acerca de su padre... la camisa cayó al suelo en el justo momento en que ella subía a la cama, y él, levantandose en la cama, la tomó en brazos y la acorraló en la cama bajo él, mientras su risa hacia eco en toda la habitación...
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Anibal: -contestando el telefono en su despacho, con un cigarro y un whisky en la mano- informes obregon... necesito informes... -hizo una pausa para escuchar al otro lado de la linea- ahhh... pues entonces Dulce necesita de un buen escarmiento... -apreto el auricular con fuerza- de mi nadie se burla... nadie... -recalcó, estrellando el vaso de whiky contra el escritorio-

Armas de Seducción Donde viven las historias. Descúbrelo ahora