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los besos y las caricias no se hacían esperar, el condujo por la avenida rápida, luego de subir el techo del convertible y subir los vidrios para tener un poco más de intimidad...
Dulce: -luego de darle un beso en el cuello- ¿a donde vamos?...
Chris: -sin apartar la mirada de la carretera- a mi apartamento, queda más cerca -rió al sentir como ella mordía el lobulo de su oreja- y si sigues besándome de esa forma voy a parar el carro y me voy a orillar para poseerte acá mismo...
Dulce: nada mas piensas en eso... -luego de reir sensualmente en su oido- ¿no podrías solo pensar en que quizás yo solo quiera... no se... un helado...
-oh demonios- pensó Chris al sentir como su cuerpo se tenzaba, ella era una bruja, pero una bruja sensual.... oirle decir lo del helado le había hecho pensar en ella, con esos sensuales labios, saboreando lentamente una bola de helado... o... Dios santo!... luego, la imagen de que el elado estaba sobre su cuerpo y ella lo lamía lentamente, saboreando cada medazo de su piel, lo hizo tenzarse aún más... apretó el volante hasta que sus nudillos estubieron blancos, y gruñó cuando tuvo que detenerse por un semáforo en rojo...
ella rió, y prosiguió sus caricias hacia el cuello de él, hasta que no tuvo más remedio tomarla del rostro y ponerle frente a él, para besarle con loca pasión, para saborear cada espacio de sus labios y boca como habia deseado todo el dia, para escuhar como un gemido salía de sus labios, para sentir como ella se dejaba llevar y, abrazandose a su cuello, profundizaba más el beso...
se estaban dejando llevar... se estaban diciendo muchas cosas con ese beso... cuanto se deseaban, cuanto querían estar el uno con el otro, cuanto querían creer en el otro, creer en lo que sus cuerpos decían sin que ellos hablaran... se decían lo mucho que odiaban las circunstancias, cuanto adoraban cada segundo el uno con el otro, cuanto se am... - sonó el claxón de un automovil y los dos se separaron estrepitosamente, mientras chris, tratando de recuperar la respiración, miraba hacia el semáforo dándose cuenta que estaba en verde, arrancando así, hacia su apartamento...
Dulce: -luego de unas cuadras de completo silencio- ¿que ibas a hacer en casa de Aníbal?
Chris: hacerle una visita a mi queridiiiiiiiiiiiiisimo padre... -dijo irónicamente- ¿y tu Dul? ¿que hacias donde mi padre?...
Dulce: me invito a cenar...
Chris: oh... -fue lo unico que él pudo respondió, mientras se imaginaba de que se había tratado, más, cuando una mordida se dejaba ver en sus labios, mordida que él no habia hecho... nunca la lastimaría; tomó aire y siguió conduciendo, ella no quería que le preguntaran y él tampoco le iba a preguntar; habían quedado en que él le daría un tiempo para que ella pudiese arreglar su "problemita" con Aníbal... y aunque le carcomiera la piel, no iba a preguntarle que había pasado entre ella y su padre... aunque al parecer ella se dió cuenta.
Dulce: me besó... solo eso... no pasó nada mas...
oh santo Dios bendito... a Chris le volvió el alma al cuerpo; vió como dulce sonreía y se recostaba en su hombro, tras ver la expresión de su rostro ante su afirmación; y él, ante tal acción no pudo hacer más que besarle la frente, y arrecostar su cabeza en la de ella, mientras seguía conduciendo... ya podía ver su edificio a lo lejos, y esa noche iba a ser igual o más mágica que la anterior.
el roce de sus labios generaba suficiente friccion para encender una llama... sus manos acariciando su piel era la sensacion mas cálida que pudiese sentir; si no se detenia en ese momento terminaría por sentir, terminaria por generar un sentimiento que no tiene vuelta atras; pero ¿que mas da?... en su interior no estaba planeado parar...
él le besó acorralandola contra la puerta en el mismo instante en que esta se cerró tras ellos, y ella posó sus brazos alrededor de su cuello diciendole que lo quería cerca de sí; aquel beso se hizo más apasionado, y las caricias de igual forma se fueron intensificando, ella sintió electricidad correr por su cuerpo mientras se perdía en las caricias; y el se deleito con el suave sonido de su voz; mientras un suspiro ronco salía de lo labios de ella.
Chris: -separando sus labios de los de ella- que descortez soy... -sus miradas se encontraron y ella le miró con desconcierto, a lo que el rió- ni un vinito te ofrecí -ambos rieron, y sus labios se volvieron a encontrar en un beso furtivo- en serio... -cuando sus labios se volvieron a separar- ¿quieres algo de tomar?...
Dulce: -besandole el cuello- estas pensando mucho... -rió, y la brisa proveniente de sus labios acarició su cuello haciendole sentir como si una refaga de fuego recorriera su espina dorsal-
Chris: ¿que propones?... -apretandola mas contra su cuerpo y mordiendole el lobulo de la oreja-
Dulce: no pensar...
si eso era lo que ella quería, quería no pensar, dejarse llevar, perderse en sus brazos y borrar de su mente y de su cuerpo cualquier roce de las manos de Anibal, quería que él la besara, quería que él la abrazara, queria que todo lo concerniente al caso que estaba llevando a cabo se borrara de su cabeza, rogaba a los cielos que quienquiera que hubiese mandado Annie tras Anibal encontrara pruebas para encarcelarlo, y luego.... luego no tener que vivir de nuevo lo que vivió esa tarde, ese miedo a lo desconocido, ese miedo a lo que Anibal pudiese haberle hecho...
las manos de él eran su alivio... eran lo unico que le hacía sentirse bien...
el sonrió, y alzandola la llevó a uno de los sillones de la sala, sentándola y levantándose para ir hacia el mini-bar...
Chris: ¿que quieres? ¿cavernet savignon o merlot?... -la vió y sonrió mientras ella le miraba con incredulidad- algo hay que beber... -rió- tenemos que celebrar...
Dulce: ¿a si? ¿que estamos celebrando? -acomodándose en el sillón y mirándolo con soslayo-
Chris: -luego de servir el vino y caminar hacia ella con ambas copas en la mano- el hecho que hoy, al igual que ayer, estes aquí conmigo -le tendió su copa y puso la de el sobre la mesa de centro, para luego apartar su cabello y besarla en el cuello- además del hecho que tengamos la noche para nosotros.... -dándole un beso ahora en los labios- y... -le dio otro beso- además... -otro beso- permiteme ser el primero en informarte que tu y tu amiga fueron escogidas por mi hermana y los de la empresa de moda para ser sus modelos... -el se separó de ella para verle el rostro, y se encontró con una sonrisa que le hizo sentir un calor muy fuerte en su interior-
Dulce: ¿en serio? -sonriendo, aunque no sabía porque... si por el hecho que eso ayudase al caso... o el hecho que estaría más cerca de él...-
-oh no te engañes dul... sabes muy bien porque te alegras- dijo una voz en su cabeza, y esta vez no era Annie, sino su propia conciencia, -su sonrisa se ensanchó aún más porque la respuesta llegó a su cabeza y, luego de dejar la copa de vino sobre la mesa, se abrazó a su cuello para, luego, besarle apasionadamente....
Chris: -separandose de ella- oye, oye...! yo no fui el que te seleccionó...
Dulce: -rozando sus labios con los de él- yo se -sonrió- solo celebraba... -mordiendole el labio inferior- ¿no puedo?... -coqueta-
estaba feliz, algo en su interior brincaba, y quería compartir su felicidad con él; el cual le sonrió y la besó lentamente, como si fuese la primera vez; y ella, lentamente, le siguió el juego, sintiendo como mariposas reboloteaban en su interior... ¿eso era acaso amor? no lo sabía, es más, era muy pronto para tan solo pensar en ello, en ese momento solo quería sentirle, queria saber como sus labios besaban los suyos, queria recorrer con sus manos cada centimetro de su piel...
Chris: -separandose de ella- hum... se me olvidaba... -tomó las copas de vino entregandole a ella la suya, para luego chocarlas- por una noche especial...
Dulce: por una noche especial... -sonriendo, para luego, ambos beber por completo su contenido-
Chris: -luego de tomar la copa de la mano de ella y ponerla, junto a la suya, encima de la mesa- esta será nuestra celebración privada -apartandole el cabello del rostro y besandole el cuello, para luego descender lentamente por su cuello hacia el escote- quiero que esta noche sea especial...
-yo tambien- quiso decir ella, pero de sus labios no salió más que un largo suspiro, rindiéndose a las caricias que él le brindaba; insintivamente, se abrazó fuertemente a su cuello, mientras iban deslizandose en el sillón, hasta quedar él sobre ella... sus miradas se encontraron y una sonrisa se asomo en cada uno de sus labios, para luego estos juntarse en un apasionado beso que los envolvió completamente, perdiéndose, así, el uno en el otro, hasta que la razón se olvidó, hasta que poco a poco las murallas de la ropa fueron desapareciendose, hasta que no quedó nada más a su alrededor que la pasión que los consumía.
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el sonido de su celular interrumpió sus pensamientos, mientras intentaba hacer entrar la llave en el cerrojo de la puerta de su apartamento; maldiciendo, dejó caer su bolso, al sacar de este su celular; y luego, tras revisar el identificador de llamadas, y soltar una maldición mas, contestó, reprimiendo cualquier asomo de su estado de ánimo.
Annie: buenas noches jefe...
Alfonso: no me digas nada, y por favor actualizame acerca de lo que ha sucedido...
Annie: ¿como quiere que le actualice si no quiere que le diga nada?... -oh si, hacer enojar al jefe era su entretención favorita, y más si era en venganza por lo que le había hecho vivir aquella mañana-
Alfonso: no estoy para bromas, agente -oh si, volvía a saer el frío y arrogante jefe de siempre; en esos momentos extrañaba al cariñosito jefe con unos tragos encima- necesito informes; estube ocupado toda la tarde y encontré llamadas perdidas en mi celular...
oh si.... era el mismo jefe al que no se le desubicaba ni un cabello del peinado, volvía a ser ese jefe que nunca admitía un error, aquel tan diferente al jefe que había conocido aquella mañana; era el jefe de siempre... y no recordaba nada de lo sucedido entre ellos...
Annie: -suspirando- Anibal invitó a Dulce a cenar... -escucho una maldición al otro lado del auricular- cenaron... intentó sobrepasarse con ella; pero le entró una llamada a él, algo, según escuché por el micrófono, correspondiente a unos tanques para gasolina que llegaron agujereados...
Alfonso: ¿enviaste a algún agente a seguirle?...
Annie: si, envié a Jack y a Eddie.... -suspiró- ¿ni siquiera va a preguntar como esta Dulce?...
Alfonso: sé que esta bien... -suspiró- sé que aunque te hubiese tocado irrumpir en la casa de Anibal no dejarías que le sucediera nada... -se aclaró la garganta- aunque te recomiendo no hacerlo -con voz fría- el caso caería... -hizo una pausa- en fín Dul es una chica fuerte...
Annie: si... -suspiró recordando como él la había besado, y apartando instantaneamente ese recuerdo de su cabeza- en fín, espero que no te moleste que la haya enviado a descansar...
Alfonso: no... para nada... era lo mejor -suspiró- haz lo mismo tu, creo que no ha sido tu mejor día...
Annie: tienes razón, no ha sido mi mejor dia... -con la voz entrecortada, recordando aquel día, y atesorandolo en su alma; un día que, seguramente el no recordaba, un día que, según ella, nunca se repetiría- han habido muchos problemas...
Alfonso: lamento no haber estado allí... -suspiró- bueno, voy a llamar a jack para que me informe un poco... -hizo una pausa que la puso incomoda- Gracias Annie... por encargarte de todo... -colgó, dejandola sumida en sus pensamientos... ¿a que se había referido con ese gracias, el nunca agradecía, nunca pedía un favor, solo ordenaba, solo daba a conocer lo que pensaba para que se llevaran a cabo las acciones... ¿recordaría...?
Annie: -recogiendo su bolso del suelo y entrando a su apartamento- si claro... como no...
Alfonso: -en su apartamento- lamento que no haya estado AHÍ... en mis cinco sentidos... pero quizás haya sido lo mejor... -dejó el celular sobre la mesa de noche- es mejor para nosotros que pienses que no recuerdo nada de lo que sucedió.
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ahora, con la cama como testigo, sus manos acariciaban lentamente su piel, el dolor causado por las manos de Anibal, se borraba ante la suave caricias de sus manos, quería sentir esas manos sobre sí día y noche, queria sentirlo consigo, queria que cada segundo durara años para olvidarse del mundo exterior, y por sobre todas las cosas, quería atesorar aquella noche, y aquellas noches que habrían de venir a su lado... ¿porque? no sabía... pero quería guardarlo en su memoria. quería guardarlo para la eternidad...
no sabía que podía suceder al siguiente día... eddie podría encontrar las pruebas que necesitaban... ¿y que sucedería?, sería sacada del caso inmediatamente y no lo volvería a ver...
se abrazó más fuerte a él ante aquel pensamiento, y aspiro profundamente el olor de su piel para grabarselo en su memoria...
Dulce: -mientras el saboreaba su busto- tengo miedo... -en medio de un suspiro y sin pensar-
Chris: -besando su barbilla y colocando su frente sobre la de ella- ¿a que le temes?...
-a que todo acabe... a que un dia te enteres de la verdadera razón por la que estoy aquí... a que me odies... a que tenga que irme lejos de tí.... a enamorarme de ti...- pensó ella, más ni una palabra salió de sus labios, solo lo besó, solo se entregó a él de la manera en que había querido hacerlo desde el principio, solo se dejó sumergir en emociones, en sentimientos que no conocía aún que existieran, y se abrazó a ese sentimiento único que sabía que nacía en su interior, pero que admitirlo, le costaría su vida.
el se olvidó de toda pregunta y se dejó arrastrar por la pasión que se encendía en su interior, besandola, acariciandola, lentamente, grabandose el tacto de su piel, grabandose la forma de su cintura en contraste con sus pechos y sus caderas, creando un registro mental de las partes de su cuerpo que, al acariciarlas, le hacían gemir, para luego adentrarse posesivamente en su interior, con el conocimiento de que, solo él, y nada más él, ha estado en aquel paradisiaco lugar...
fue primero lentamente, sintiendo aquel contacto como seda fina, sintiendo cada gemido de los labios de ella como el sonido de un laúd, como una melodía mágica y embriagante, luego, sus movimientos se fueron acelerando, y gemidos cada mas fuertes cortaron el aire de la habitación, creando un ambiente embriagante y magico, donde sus cuerpos se fundieron en uno, donde cada caricia se intensificaba por mil...
sudor resbalaba por sus pieles, sus corazones latían rapidamente en una sincronización perfecta, y el silencio de la habitación fue solo interrumpido por la voz de ella, gritando por lo alto, él nombre de su acompañante, mientras su cuerpo se tenzaba bajo él... el cual, tras adentrarse un par de veces más en su interior, encontró su liberación, como una explosión que recorrió su cuerpo y le hizo gritar, sin ninguna reserva, el nombre de ella. cayendo, luego de unos segundos, a un lado de la cama, sosteniendola aún entre sus brazos.
Dulce: -acurrucandose contra él, y en un simple suspiro- estoy exhausta...
Chris: -sonriendo- duerme tranquila... ahorita te despierto...
Dulce: hummm... me suena a segundo round -besandole el cuello y pegándose mas a él-
Chris: segundo... tercero... y hasta cuarto si alcanza el tiempo...
Dulce: no voy a poder caminar mañana -adormilada-
Chris: esa es la idea... -pensando en mantenerla lo mas alejada posible de su padre, buscando en su cabeza alguna forma de enseñarle lo sucio y despiadado que él era, acarició un morado que manchaba su piel en su cintura y que ella le había dicho que se lo había hecho accidentalmente en su casa- yo sé que él te lo hizo... -mientras ella dormía- y voy a averiguar que es lo que te ata a el como para que soportes que te trate de esa forma... -la estrechó mas a él- cuesteme lo que me cueste... eres mia, y no dejare que él te vuelva a tocar...

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