Miraba con gran interes la fachada de aquel edificio, lo recordaba bien, a pesar que solo habia estado alli una vez. Memoria fotográfica que llaman, y que le funcionaba perfectamente para cada una de sus misiones...
se bajó del automovil y caminó hasta la acera... contando pisos... sabia que el de ella era el quinto... lo sabía porque le parecía curioso que justo viviera en el mismo piso que él, bueno, diferentes edificios, y el uno como a 35 cuadras del otro... pero el mismo piso al fin...
1...2...3...4....
5... la ventana de ese piso estaba entra abierta y se veía salir una luz que dejaba ver una sombra... era ella, en primera, esa ventana efectivamente era del apartamento de ella, y en segunda, bueno... -suspiró- pueden llamarlo loco pero la reconocería donde sea que estubiera y sin importar lo que esta vistiera o lo que viera de ella... asi fuese solo su cabello... o su sombra...
se sintió paralizado, ella estaba arrecostada contra el marco de la ventana con su mirada perdida en la nada... con sus brazos se abrazaba a si misma, o eso era lo que alcanzaba a ver... de inmediato la escena de lo que habia pasado la noche anterior llegó a él...
le habia dicho que la necesitaba, y esa era la verdad mas grande que habia dicho en su vida...
ella se separó del marco de la ventana y se perdió en el interior de su casa, y entonces, el se dio cuenta que no podia dejar que todo terminara así, tenía que hablar con ella, decirle lo que sentia.... pero ni el mismo sabia que sentía. -suspiró- no importaba... no podía irse de allí...
rapidamente se encaminó al interior del edificio y preguntó por ella, a pesar que sabía perfectamente que estaba allí. sin embargo, el portero marcó al apartamento de ella; no contestó a la primera llamada, pero si a la segunda... y entonces el portero hizo una pregunta que el no quería contestar...
Portero: ¿quien la busca?
Alfonso dudó un momento ¿y si le decía su nombre y ella decía que no queria verlo? entonces... ¿y si decia que era cualquier otra persona... de pronto podía decir que era Derrick, o su queridiiiisimo amigo "Christian"... demonios, cuanto odiaba a ese hombre sin conocerlo... ¿cuantas veces Annie no le habia echado en cara que iba a salir con ese innombrable en las últimas tres semanas?...
se mordió la lengua... era mejor optar por la verdad...
Alfonso: digale que la busca Alfonso.... Alfonso Herrera.... -dijo cruzandose de brazos, y medio-sonrió mientras el portero decía su nombre por el intercomunicador... efectivamente, podía imaginarse la cara que tenía Annie en ese momento... el portero colgó y se dirigió a él diciendole que podía pasar, además del numero del apartamento de Annie, y el le agradeció, a pesar que sabía perfectamente cual era... 501... ese numero no se había borrado aún de su cabeza.
--------------------------
la velada hasta ese momento habia sido extrañamente agradable, él le habia recogido a la hora que le dijo que le había dicho que la recogería, la había llevado a uno de los mejores restaurantes de la ciudad, le habia dado rosas, le habia acomodado la silla al sentarse en el restaurante, le había dado un hermoso collar de Oro con diamantes...y... y... demonios, no habia contestado ni una sola llamada en su presencia, es más, este no habia sonado, de tal manera, pensó, que quizás lo había apagado...
¿quien demonios era este hombre...?
Anibal: -mientras retiraban los platos de la mesa y tomando la mano de ella en la suya- ha sido una exquisita velada, me encantó que hubieses aceptado... -dandole luego un beso en los nudillos y dandose la vuelta para pedirle al mesero la cuenta- espero que sigas aceptando mis invitaciones -girandose de nuevo a verle- me fascina tu compañia Dulcesita... -le guiñó el ojo y se volteó a recibir la cuenta de manos del mesero.
Dulce estaba anonadada... hasta el momento no había intentado hacerle nada, ninguna de las proposiciones que le habia hecho con anterioridad habia salido de su boca, es más en ese momento él se estaba levantando de su asiento y dandole la vuelta a la mesa hasta llegar frente a ella
Anibal: ¿nos vamos?... -dijo ofreciendole la mano, a lo cual ella asintió y aceptó la ayuda para levantarse, poniendo su mano sobre la de Anibal...-
ambos caminaros fuera del restaurante y una limosina, la que anibal normalmente usaba para ir a todos lados, los esperaba en la puerta de entrada, ambos entraron en esta y tras unos minutos de camino fue él quien habló.
Anibal: Dulcesita, -dijo acariciandole el rostro- esta ha sido una de las mejores noches... ¿no crees? -le tomó de la barbilla- ¿sabes lo que me encanta de estar contigo? -ella negó y el prosiguió- que eres una mujer hermosa... como pocas que existen en el mundo... de aquellas mujeres que hacen lo que tengan que hacer para cumplir su cometido -le sonrió- eso me encanta de tí...
la besó... fuertemente, como quien marca su territorio, como quien busca demostrar que el el unico que tiene el control de cualquier situación...
entonces la limosina se detuvo y dulce vió por la ventana que estaba en la puerta de su casa lo cual le pareció muy extraño, normalmente anibal, luego de una salida a cenar, buscaba algo más... sin embargo, estaba allí, en su casa... y sin ningún tipo de proposición por parte de anibal...
Anibal: descansa.... -dijo mientras el conductor abria la puerta de Dulce para que esta saliera- quizás mañana podamos volver a salir a cenar o a hacer algo... aunque, mejor que sea pasado mañana, tengo una reunion con empresarios ese dia, una especie de coctel, y me gustaria tenerte ahi para presumirte....
Dulce asintió y el le besó rapidamente, para que luego esta saliera rápidamente del vehículo...
la puerta se cerró y el chofer volvió a arrancar la limosina, entonces Anibal sacó su celular y lo encendió, para luego buscar un nombre en su lista de contactos...
Anibal: Dragona... ¿hiciste lo que pedí? -recibió una respuesta afirmativa del otro lado del telefono y sonrió... el plan iba acorde a lo planeado...
estaba nerviosa, sus pies temblaban, y solo veía desesperada la puerta principal... en cualquier momento tocaría, en cualquier instante ese bendito timbre sonaría y ella abrirá y el estaría allí con esa cara de puño que el siempre tenia, o mas bien de yeso, porque de puño sería que estubiese enojado, pero el nunca tenia cara de enojado, su cara era mas bien indescibfrable, como las de las esculturas, nunca sonreía, no mentira... si lo hacia, pero era tan raro que lo hiciera... el era como la sonrisa de la mona lisa... dificil de descifrar, sus labios normalmente estaban pegados el un al otro, en una linea perfectamente recta, y esa boca era acompañada por unos ojos tan inexpresivos... oscuros como la noche y no por su color... contaba con unos ojos miel que la volvian loca... la analogía la hacia mas bien por su forma tan fria tan... indescifrable con la que miraba...
aunque si lo pensaba bien no era tan inexpresivo... a ella la habia mirado diferente, en el momento en el que se habia acercado a ella, en el momento en que le habia dicho que la necesitaba, habia habido un brillo, un brillo que no había visto antes y que la habia hecho perderse allí, quedando atrapada, clavada a sus ojos sin posibilidad de moverse mientras el se acercaba mán y más, y entonces sus labios se encontraron y entonces ella sintió como una corriente nacía en lo mas bajo de su columna vertebral y subia por esta hasta su cerebro... desconectando por completo...
le había respondido, habia correspondido el beso, y se habia sentido en el cielo... ese Alfonso era al que temía, no al frio y calculador, sino al otro, aquel que se habia presentado frente a ella el dia de la borrachera de él, aquel que la habia besado la noche anterior...
El temor la invadió y fijó de nuevo la mirada a la puerta... ¿acaso se estaba haciendo esperar...? -sacudió la cabeza- Alfonso nunca se hacia esperar... -suspiró y empezó a caminar en circulos tratando de concentrarse....- de seguró solo venía a hablar de algo de la misión, quizás iba a averiguar. de la manera mas fria posible, porque no habia ido ella ese dia a trabajar... entonces le diria que no se sentía bien, y lo devolvería por el mismo camino por el que llegó...
volvió a dirigir la mirada a la puerta... nada... soltando una maldición pensó que por mas lento que hubiese subido ya debería estar allí..... "¿y si se perdió?" surgió la pregunta en su cabeza. y maldijo de nuevo... claro, el solo habia ido a su apartamento una vez... hace mucho... bueno no tanto, pero si...
Annie: ¡bueno ya! -dijo caminando hacia la puerta- lo encontraría, le diría que se fuera porque se sentía mal, y entonces todo volvería a su causa normal, sin apuros, sin problemas, sin besos en oficinas o en cualq...
abrió la puerta y se quedó paralizada con el pomo de la puerta en la mano... allí en frente suyo estaba él... con una sonrisa,. nunca antes vista en sus labios... y... oh Dios! aquel brillo en los ojos al que tanto temía...
Poncho: -sonriente- una de dos... o eres adivina y tus poderes te dijeron que estaba aca a punto de tocar tu timbre; o pensabas escapar... -ensanchó la sonrisa- ¿es alguna de mis hipotesis acertada?...
Annie: -sacando voz de quien sabe donde- pr... primero se saluda... -se sentía nerviosa, sus piernas temblaban tanto que no sabía como seguía en pié-
Poncho: oh si! que descortez soy... -dijo él imitando a un perfecto aristocrata, colocándose derecho, tomándo la mano de ella con suavidad, agachandose hasta besar sus nudillos, haciendo que todo el cuerpo de ella temblara en respuesta- buenas noches señorita Annie -imitó un acento inglés que le quedaba a la perfección- ¿no es esta una hermosa noche?... -levantó la mirada sonriente, y ella sintió como contenía el aire...
Annie: -tartamudeando- al.. Alfonso... qu... que fue eso?
Poncho: -sonriendo- una perfecta imitación de un caballero ingles... -entró al apartamento al ella permitirle el paso- una de mis primeras misiones como agente fue en reino unido, se suponía que era un aristócrata que asistía a la fiesta de uno de los mayores chivos espiatorios de corea del Norte... -suspiró- mi primera misión internacional, con la que me gane los elogios y el puesto como director de la agencia... -sonrió- en una noche me infiltré en una casa con todo tipo de armamento y alarmas de seguridad, recupere un microchip con información confidencial de inteligencia de los estados unidos... salve al mundo y... -sonrió picaramente- baile con unas cuantas aristocratas inglesas...
ella se paralizó, ¿era el mismo Alfonso?, ¿el mismo inexpresivo jefe?.... él....
Poncho: ¿porque me miras como si fuese un insecto con cinco cabezas, treinta patas, alas de vidrio... etc?
Annie: ¿yo....? -dijo desviando la mirada...
Poncho: si tu... -dijo sonriendo mientras notaba el nerviosismo en ella- ¿que sucede Annie...?
Annie.... Annie.... LA LLAMABA ANNIEEEEE!! no le estaba diciendo anahi... ni agente.... LA LLAMABA ANNIEEEE!!!
Annie: nada, no me pasa nad.a... solo me intriga la razón de tu visita...
Poncho: -suspirando- solo me preocupé porque no fuiste a trabajar hoy... -se pasó la mano por el cabello- además... además necesito hablar contigo... -las miradas de ambos se encontraron y el suspriró- es sobre lo que sucedió ayer...
-----------------------
acostada en su cama pensaba en tantas cosas... en la misión, en Anibal... en Annie, en Alfonso..... -suspró- en... en chris... mil veces habia pensado en el tema, se habia preguntado a si misma si podría decirle a él acerca de la misión... es mas, ¿que pensaría él si le decía?... ¿se enojaría? ¿se alegraría?.... ¿la odiaría?...
se dió la vuelta en la cama y observó el reloj sobre la mesa, eran las 12pm, debería estar dormida... pero no lo estaba, no podía...
se levantó de la cama y sacó de su bolso su celular... marcando el número de Chris... el teléfono sono una... dos veces... y colgó, ¿que estaba haciendo?, quizá el estaba durmiendo, no podía despertarlo solo porque ella no podía dormir... ¿que iba a decirle...?
suspiró y fue a dejar el celular sobre la cómoda, más sin embargo este sonó juto antes de que lo dejara...
Dul: Chris... -dijo, luego de darse cuenta que se trataba de él...
Chris: -riendo- si... ¿porque ese timbronazo tan atrevido...? ¿estas sin minutos...?
Dulce: no... -rió- sino que de repente me dí cuenta la hora que era...
Chris: no te preocupes por la hora... cualquier hora que quieras hablar... o estar conmigo... estoy disponible... -se quedó pensando un segundo- bueno no, excepto cuando estoy en una de esas reuniones que inventa maite para informar sobre los avances de la empresa... -rió- ¿como si no pudiera hacer lo mismo en la sala de mi casa con un café de blanquita y unos nachos...? la sala de juntas es muy aburrida... no, corrección, era muy aburrida antes...
Dulce: Chris!... -lo interrumbió ella riendo...- ya entendí...
Chris: bueno... -rió- ya no me voy a poner a enumerar donde lo hemos hecho porque pierdo la cuenta...
Dulce: -poniendose roja- Chris!!!!
Chris: ok... ok... -luego de calmar las risas- no digo nada más... -suspiro- ¿para que llamabas?...
Dulce: no se... quería escuchar tu voz...
Chris: -sonriendo- me encanta que quieras escuchar mi voz... -se quedó un segundo pensado- ¿sabes donde no lo hemos hecho...? -preguntó en voz sensual y ronca... y ella negó en voz baja- no lo hemos hecho por telefono....
Dulce: -riendo- no inventes...! -rió un poco mas- prefiero tenerte conmigo que imaginarte... pero equiz!, Lo que quería era decirte algo sobre Anibal...
Chris: -poniendose serio de inmediato- no quiero hablar de él Dul... por favor...
Dulce: Chris... por favor, necesito contarte un par de cosas...
Chris: a menos que sea que me cuentes que lo dejaste, no quiero saber nada de él... -casí gruñó al finalizar estas palabras- no quiero saber si te beso no no te besó, si te dijo algo o te dijo lo otro... ¿no entiendes que no lo soporto?
Dulce: es algo importante... -dijo en voz casi que inaudible- por favor...
Chris: no Dul... a menos que lo que quieras decirme es que lo has dejado, no quiero escuchar ni una sola palabra en lo que aquel hombre respecta... -dijo cortante, para luego escusarse y cortar la llamada... dejando a Dulce confundida...
se acercó a ella lentamente, temblaba, temblaba por el recuerdo de lo que habia pasado entre ellos la ves en que él se emborrachó, por el recuerdo de lo que habia pasado el día anterior en su oficina... aun recordaba lo que sabian sus labios... su textura... queria probarlos de nuevo... queria reconocer en ellos ese sabor que la habia hecho alucinar toda la noche...
Annie: ¿lo que pasó anoche...? -dijo retrocediendo, necesitaba estar lo mas lejos posible de él, poner barrera espacial o algo asi, porque si se acercaba mas ella no iba a resistirse mas, y se lanzaria a sus brazos hasta que sus labios se encontraran- n... no... p... paso nada.... -tartamudeó nerviosa-
Alfonso: sabes tan bien como yo que si pasó... -la miró intensamente- nos bes....
Annie: si... ya! -dijo tratando de detenerlo- ya se lo que pasó entre nosotros, p... pero no debió suceder... -dijo apartando rapidamente la mirada de él y abrazandose a si misma- f... fue un er...
Alfonso: -llegando donde ella a grandes zancadas y alzandole la mirada- no te permito que digas que fue un error... -su mirada era tan fuerte que ella sintió que sus piernas temblaban- no te voy a permitir que digas palabras de las que despues puedas arrepentirte...
ella sintió que sus piernas perdian fuerza, él estaba allí, mirandola, sus ojos profundamente clavados en los de ella... tan profundamente que el mundo al rededor desapareció, como si una neblina se esparciera a sus alrededores dejandolos solos en la oscuridad...
abrazandola por la cintura él la acercó mas a sí, y ella no pudo hacer mas que sostenerse a sus hombros, si no lo hacia sus pies le fallarian y caería al suelo...
Alfonso: -poniendo su frente contra la de ella- yo... yo queria besarte... -continuó diciendo- tanto como quiero besarte ahora... -ella instintivamente se mordio el labio inferior- quiero... -suspiró- he sido un ogro todo este tiempo y solo quiero dejar de ser ese ogro... contigo... -suspiró- especialmente contigo...
Annie: yo... -en un suspiro-
Alfonso: sh... -sijo poniendo un dedo sobre los labios de ella- no digas nada por favor... -libero sus labios de su dedo, pero con la misma manos acarició su mejilla, hasta luego posarla en el cuello de ella- todos estos meses he sido el frí y calculador jefe, el que no dejaba que sus emociones intervinieran en nada que tubiese que ver con la agencia, la OSN ha tenido el mejor jefe... pero no a la mejor persona... -sus ojos pedían perdon mientras su corazón lo suplicaban- creo que queriendo no dejar que mis emociones intervinieran en las misiones... como sucedió hace algunos años... las eliminé por completo de mí...
ella vió dolor en sus ojos... un dolor que no había visto antes, y eso le golpeó como si fuese un puño en el corazón... una de sus manos le tocaron el rostro, al comienzo este se sentia frío, más sin embargo, tal como si su mano fuese el sol, su piel se fue calentando... al igual que su mirada, la cual recuperaba el tono amarillo que habia visto cuando la habia besado en el coche en medio de su borrachera...
Annie: -acariciandole el rostro- eres humano...
Alfonso: a veces se me olvidaba -sonrió- creo que quise convertirme en algo que no soy... y pagué un precio muy alto....
ella quiso preguntarle el porque, quería preguntarle cual había sido ese momento en que sus emociones habian importunado una mision, pero no le preguntó, no lo hizo porque sabía que eso era algo que él quizás queria guardarse, asi que se tragó su curiosidad y lo besó, sus labios se encontraron e inmediatamente el le continuó, sintiendo aquella conexión que había entre los dos...
Annie: quedate esta noche... -dijo en un suspiro mientras se separaban, para luego mirarle a los ojos y encontrar en ellos aquel brillo que tanto le encantaba- quiero estar contigo...
el sonrió, ella tambien lo hizo... y sus labios se encontraron en un apasionado beso mientras sus pies, por si solos, los hacian ir hacia la habitación...
----------------------
dió varias vueltas en la cama, estaba enojado, muy enojado.... pero no con ella, sino consigo mismo...
había sido un cobarde, lo sabía bien... sabía que debió haber escuchado lo que ella iba a decir, o por lo menos intentarlo... no quería oir ni una sola palabra de lo que su padre respectara, lo quería lejos, fuera de su camino. él sabía que no era una persona que le deseara el mal a los demás, demonios, no podía imaginarse lastimando a cualquier persona que estubiese a su alrededor...
pero cuando pensaba en su padre... pensaba en todas las formas posibles para asesinarlo...
esra una locura, pero era verdad... Odiaba a su padre...
no, "padre" no, ese nombre no le quedaba a ese hombre, a ese.... ese basta*rdo que lo unico que había hecho en toda su vida era jo*derle la existencia, había hechado a su madre... ¡¡¡diciendo que esta le había sido infiel!!! ¿como?... si ni siquiera la dejaba salir de la caja de cristal que era la mansión, ¿cómo? si a cada rato aprovechaba para maltratarla... ¿cómo? si el había sido el que una y otra vez le había sido infiel a ella... ¡¡¡y se lo echaba en cara!!!... sabiendo que eso la lastimaría aún mas que cualquier golpe...
se suponía que él no supiera eso... pero un día, cuando o había podido dormir siendo un adolescente, fue a buscar un vaso de leche, y cuando había pasado por la habitación de su madre y Franco había escuchado sollozos, así que se asomó por la puerta entreabierta, sin dejarse ver, y había visto a su madre llorando, mientras Franco la abrazaba tranquilizandola... esa noche Alexandra le habia contado su historia a su esposo... y sin querer, también a su hijo...
desde ese entonces la rabia que le tenía a su padre por abandonar a su madre se convirtió en furia... furia contra aquel hombre que había destruido por completo su vida y la de la persona que mas queria en el mundo... su madre...
desde entonces había estado planeando su venganza contra su padre... la forma de desruirlo por completo, solo tenía que inmiscuirse en sus negocios, haciendole creer que era el hijo perfecto, el que quería hacer parte de todo lo que estubiese planeando, entonces, encontraría cualquier cosa turbia que pudiera encontrar en la contabilidad... y lo hundiria...
pero entonces la había conocido a ella... a Dulce... a SU Dulce... y esa idea había cambiado... lo unico que quería era salvarla de correr la misma suerte que su madre, salvarla de la destrucción que era Anibal... porque la amaba...
¿porque su padre siempre destruía lo que el mas quería...? no... no lo que mas quería... sino lo que mas AMABA....
volteó a ver hacia el celular que estaba sobre la cómoda de al lado de la cama y suspiró, al día siguiente se disculparía por haberle colgado así el telefono, pero ella tenía que entenderlo... lo unico que quería escuchar acerca de su padre de boca de ella era que lo hubiese dejado... no queria razones, ya no, solo quería un "lo dejé".
-----------------------------
recorrió su cintura lentamente bajo su blusa, sintiendo la suavidad de su piel, sintiendo la dulzura de su voz mientras surgia su nombre en un suspiro... la besó, profundamente, sintiendo como ella se pegaba mas a el, almondandose perfectamente sus cuerpos, se giró, quedando sobre ella, la cual levantó los brazos, mientras el deslizaba la blusa hacia arriba y se la quitaba por completo... él trago seco, sus recuerdos de aquella noche en su carro eran borrosos, pero ahora la veía, plenamente, como una muñequita de porcelana... su piel era blanca, pero no tanto, un sujetador de encaje negro cubría sus pechos, y mas abajo, su cintura era tan delgada, tan delicada que casi le dio miedo de romperla....
se deshizo de su saco, y ella empezó a desabrochar su camisa, botón a botón, haciendolo temblar...
el quería arrancarla, de una vez por todas, le importaba un ble*do si los botones salian volando, o si la camisa quedaba inservible siendo Louis Vuitton... que carajos... ya había decidido destruirla, cuando sintio que esta se delizaba por sus brazos... asi que simplemente la dejó caer y la tiró hacia donde habia tirado la blusa de ella... bien lejos...
ella sonrió, y el tambien, para luego juntarse en un apasionado beso... un beso que los hacía perder la respiración, un beso que los hizo perder el aliento... los zapatos de él quedaron lo mas lejos posible, lo mismo las medias, su pantalon... y el short de ella... todo estaba esparcido por la habitación, y ninguno de los dos pensaba en otra cosa que no fuera besarse... a veces lentamente, y a veces dejandose llevar por la pasión... sintiendose, diciendo tantas cosas con sus acciones que no se decian con palabras...
entonces quedaron piel contra piel, sintiendose el uno al otro, y el la beso, lentamente, deslizando sus labios por el cuerpo de ella mientras ella no podía hacer mas que suspirar; su cuello, sus pechos, cada una de sus costillas fueron victimas de sus besos... luego su cintura, su ombligo... sintiendo como el cuerpo de ella se retorcia y ella jadeaba...
el subio sus manos por las caderas de ella, y recorrio con estas su cintura, sus pechos, masajeandolos, saboreando el sentimiento de tenerl a allí... hace años se habia reservado sentir, habia guardado las emociones en un cajon oscuro... y aquella noche, mientras la acariciaba, sentía que ese cajon se abria y que todas las emociones se disparaban por su piel... por su cuerpo, haciendole desear desesperadamente estar en su interior...
entonces sus ojos se encontraron, y su mirada era un ruego mudo... le deseaba, el lo sabia, asi como ella podía ver en los ojos de él cuanto la deseaba... entonces el maldijo por lo bajo y se disculpó con ella... no tenía preservativos...
Annie: no hay problema -sonriendo- tomo pastillas... las he tomado desde que tenía quince años... -el le miró arqueando la ceja y ella rió- eh... a mi no me mires -dijo acariciandole el torzo haciendolo temblar- ordenes de la ginecologa... y de unos padres sobreprotectores que mandaron a su hijita a un colegio militar con puros hombres... -rió al ver su cara de incredulidad asi que lo abrazó y le habló al oído- pero para tu tranquilidad solo hubo un hombre en el pasado... y fue hace mucho...!
sin dejarle decir mas el la besó, y ella le permitió hacerlo, sintiendo que su corazón latía aceleradamente, que su piel se sensibilizaba cada vez mas, el la acarició mas y mas, haciendola sentir en el cielo, haciendola sentir que perdía el control de su propio cuerpo, se acomodó entre sus piernas y ella le dejó estar, sintiendo como él poco a poco se adentraba en su interior...
jadeos salieron de si, mientras el entraba y salia de ella... sintiendo como poco a poco su cuerpo se tenzaba, como los jadeos se hacian mas fuertes, solo podía pensar en aquella parte de su anatomia que estaba siendo invadida por el, jadeó aun mas, los movimientos de el se fueron haciendo mas rapidos mientras ella perdia la cabeza por completo... y entonces... entonces un grito ahogado salió de su interior... y todo su cuerpo se tenzó perdiendo el control de si misma...
el quedó embelezado, viendo su rostro, sus parpados cerrados, sus labios abiertos y su cabeza hundiendose en la almohada, perdida en el orgasmo... entonces, el empujó un par de veces más, y se dejó ir en su interior perdiendose en las sensaciones experimentadas... sensaciones que se multiplicaron debido a que sus emociones estaban recien liberadas....
luego de un par de minutos se dejó caer hacia un lado, exhausto, mirando hacia el techo... mientras ella se acercaba a él y, pasando su mano por su cintura y su cabeza en su bicep extendido, se quedó dormida diciendo lo cansada que estaba en medio de un suspiro... el sonrió, y le dio un beso en la frente...
esa noche había sido lo mejor que le habia pasado en muchos años...
![](https://img.wattpad.com/cover/106867024-288-k217191.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Armas de Seducción
Fiksi PenggemarTacones altos cuyas cuerdas subían por sus piernas como enredaderas, esas piernas tan bien yorneadas que pareciera que estaban diseñadas para seducir. Autoría: @tikapradi