Daughter Of Batman ★ Bat-Family

Capitulo 3

La escuela en otros términos fue aburrida, nada emocionante. Al llegar a la mansión Liz me esperaba en la cocina, me pregunto cómo me había ido emocionada, solo le conteste que normal, no le conté de Jon, no quera que se emocionara por nada y mucho menos que pensara otras cosas. El resto del día no fue nada especial, trataba de ayudar a Liz en los quehaceres pero es terca y no deja que mueva ni un plato por lo que lo deje así. Tenía muchas tareas pendientes así que me encargue de ellas el resto del día, fue agotador y eso sin contar que todavía tenía en la mente lo que escuche en la noche anterior.

Liz: Zara, tenemos que hablar –nos encontrábamos cenando. Desde que nos sentamos todo había sido silencioso, algo raro en nosotras. Levante la mirada de mi plato, se notaba nerviosa y muy preocupada ¿será que ella también escucho a los Collins? O es por algo más–. ¿Has visto o escuchados cosas sospechosas últimamente por aquí?

Yo: No, todo está muy normal –mentí–. ¿Pasa algo?

Dudo, volteo la mirada y pensó por un momento ¿Qué está pasando? –. No es nada, solo que pensé que alguien me... estaba siguiendo cuando fui de compras. Ten mucho cuidado cuando salgas ¿Si? –asentí, no mentía pero sé que oculta algo–. Ve a dormir. Mañana tienes clases, yo iré cuando termine aquí y no quiero objeciones.

*Una semana después*

Tuve la misma pesadilla de hace una semana, desperté aturdida como si hubieran disparado el arma muy cerca de mí. Cuando me tranquilice por completo me levante de la cama y me prepare mentalmente para este nuevo día. Cuando ya estaba lista y arreglada baje a la cocina, Liz estaba ahí preparando el desayuno. Últimamente la he notado cansada, como si no durmiera por las noches, además estaba paranoica y muy nerviosa, más de una ocasión le pregunte que sucedía pero no obtuve respuesta. Hoy estaba tensa y pude sentir un eje de tristeza en ella. No me gusta verla así, es de lo peor.

Liz: ¿Qué ocurre? No has terminado tus panques.

Yo: No tengo apetito –apenas había probado uno que otro bocado. Me levante de la mesa sin más y fui a buscar mi mochila. Al bajar Liz se encontraba sentada en donde yo estaba anteriormente, los panques y demás ya no estaban en la mesa–. ¿Mamá?

Me miro y sonrió pero pude ver en sus ojos mucha tristeza–. Cuídate mucho ¿Si? –asentí, el ambiente seguí siendo nostálgico. Bese su frente y ella la mía. En el momento que cruce la puerta de la cocina algo muy dentro de mí me dijo que esa sería la última vez, no sé porque.

Estuve todo el día inquieta, pensando en Liz y esa horrible sensación. Evite a toda costa a Jon y sus amigos, preferí ir a otro lugar a la hora del almuerzo porque a decir verdad, ni hambre o apetito tenia. El tiempo en la escuela se hizo eterno, ansiaba como loca que se terminara ya. Cuando sonó la última campana casi salí corriendo del salón y por la calle iba a toda velocidad, dando tropezones con la gente y evitando ser atropellada por las autos al cruzar. Llegue bastante rápido a la mansión, mi angustia solo crecía más a cada paso que me acercaba. En la cocina todo estaba en orden, nada fuera de lo común excepto una cosa, Liz no estaba ahí. Busque por toda la casa pero no había rastros de ella ni de los Collins, subí a su habitación, tal vez salió y dejo una nota que olvido poner en un lugar que la viera. Al abrir la puerta vi que todo estaba desordenado, pareciera que alguien hubiese irrumpido y buscado algo con desespero pero era el único lugar, el resto de la casa está intacto. Entre con cuidado mirando las cosas destrozadas, bajo mis pies escuche un sonido de vidrio roto, lo comprobé al ver que había pisado los restos de una foto vieja mía y de mamá. Me agache para tomarla, la foto estaba intacta por lo menos. Detrás de mí, escuche unos silenciosos pasos demasiado cerca de mí, lo logre voltear a tiempo o esquivar el golpe. Fue todo muy rápido.