Algo Verdaderamente Dulce

Capítulo 43. La Batalla Prometida y Un Nuevo Comienzo.

En las vísperas del Gran Festival fue cuando nuestros héroes pudieron reencontrarse con Dawn y con Barry provenientes de Sinnoh, al igual que con Bonnie, Korrina y Clemont, quienes vinieron a Hoenn para presenciar la actuación de Serena en dicho evento. Después de varios días llenos de hermosas presentaciones, y espectaculares y emocionantes combates en contra de May y Ariana la peli miel pudo ganar la Copa Listón del Gran Festival de Hoenn y coronarse como la nueva Maestra de Concursos de la región.

Después de eso el grupo se dirigió hacia Ciudad Malvalona en donde tuvieron que separarse de los hermanos Balance, quienes decidieron volver a su casa y dedicarse a entrenar a Max para su batalla en la Liga contra Ash, después de despedirse el grupo se dirigió al Centro Pokémon para pasar la noche y pensar en lo que harían a continuación

—Aún faltan tres semanas para que comience la Liga chicos ¿Que haremos hasta entonces? —pregunto Brock después de que acabaron de cenar.

—Hermanote hay que quedarnos hasta que termine la Liga —pidió Bonnie, pero Clemont y Korrina la veían algo preocupados, ya que no habían contemplado quedarse tanto en Hoenn.

—No lo sé Bonnie, recuerda que la Liga está muy cerca y necesitaríamos hablar con papá —comento el inventor.

Después de cenar los chicos se dirigieron a sus habitaciones en donde por esta ocasión decidieron separarse en chicos y chicas. En la habitación de ellas después de jugar a «Adivina al Pokémon» por un rato fue cuando empezó una divertida discusión.

—Has crecido mucho Bonnie, especialmente cuando te sonrojas cerca de Max —comentó Serena dándole una mirada pícara a la más pequeña.

—No sé de qué hablas —contestó la aludida con aparente calma, cuando en realidad se moría de nervios.

— ¿No me digas que ya se te olvidó ese besito de despedida que le diste? —intervino Korrina en un tono travieso.

—Us-ustedes ¿Lo vi-vieron? —preguntó Bonnie apenada, por lo que ya no podía ocultar sus nervios.

—Claro y los 2 se veían tan lindos y tiernos todos rojitos —contestó Dawn.

Al verse descubierta por sus amigas la pequeña loli no tuvo más remedio que hablar.

—Creo que Max me gusta un poco, es un chico muy tierno y admito que me gustaría verlo de nuevo.

—Aww, que romántico —exclamaron las mayores ante esa declaración con los ojos brillando de la emoción.

Después de algunos minutos donde las chicas le prometieron a la pequeña que la ayudarían con Max, finalmente se fueron a dormir.

Al día siguiente los rubios provenientes de Kalos se dirigieron a los videófonos, Bonnie y Clemont pudieron convencer a su padre de dejarlos quedarse hasta el final de la Liga Hoenn, pero con Korrina no hubo tanta suerte por lo que la rubia debía de regresar a Cuidad Yantra.

En la Agencia de viajes de Malvalona se enteraron de que en unas horas saldría un camión con destino a Ciudad Petalia para que la rubia pudiera tomar el avión que la llevaría de vuelta a Kalos.

—Ash, Serena ¿No les molesta que compruebe que tan fuertes se han vuelto en Hoenn antes de irme? —les preguntó Korrina, recibiendo una sonrisa desafiante de parte de los aludidos.

— ¿Les parece una pelea en parejas 3 vs 3? —pregunto Ash que estaba en una de las esquinas junto con Serena, recibiendo una cabezada de respuesta de los rubios, mientras que Brock hacía de árbitro del encuentro.

Clemont eligió a Bunnelby como su primer pokémon y Korrina enviaba a Mienshao. Mientras que Serena mandaba a Sylveon y Ash a su Lucario, al ver al pokémon shinny la líder de Ciudad Yantra enloqueció de ternura, pero la batalla era primero.