Capítulo 40. Nacimientos llenos de Recuerdos.

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Han pasado algunas semanas desde que Ash y Serena empezaron su viaje por Hoenn en compañía de May, Max y Brock. En estos momentos el grupo se encuentra en Ciudad Lavacalda después de que Ash y Max hubieran obtenido la medalla Calor de manos de Flannery, era la 4ta medalla de Max y la 5ta de Ash, además de que Serena ya había conseguido 3 listones, ya que gracias al entrenamiento con May comprendió muy rápido la esencia de los Concursos y sus diferencias respecto a los Performance.

En ese tiempo el número de pokémon de los chicos también había aumentado ya que Max había atrapado a muchos pokémon y por el momento tenía a Sableye, Makuhita, Shroomish, Electrike, Marshtomp y su recién evolucionado Lairon en su equipo; junto con el Swablu que Serena capturo en la Ruta 114 cuando fueron al Concurso de Pueblo Pardal.

Además de que el equipo de Ash también era diferente al que trajo al inicio del viaje, ya que en cada gimnasio iba rotando a sus pokémon y en este caso cambio a su recién evolucionado Meganium por Squirtle y a Dewott por Krokodile, además de que tenía bastantes combates de entrenamiento con Serena, May y Brock.

La pareja regresaba al Centro Pokémon, después de tener una larga batalla de entrenamiento en donde Braixen y Sylveon finalmente lograron dominar el Contraescudo mientras que Pidgeot le ayudaba a la pequeña ave algodón a mejorar su vuelo, Brock estaba haciendo la cena y los hermanos acaban de salir de la zona de los videófonos después de comunicarle a sus padres que Max ya tenía 4 medallas y su siguiente destino seria Ciudad Petalia.

—Bueno, según mi Nav tenemos 2 formas de volver a Ciudad Petalia, en ambas tenemos que tomar la Ruta 112, podemos dirigirnos nuevamente a Pueblo Pardal y cruzar la Cascada Meteoro para llegar a Ciudad Férrica, o volver a Ciudad Malvalona e ir en dirección al Túnel Fervegal que también nos dejaría en Ciudad Férrica —informo Serena.

—Al parecer ambos caminos son igual de largos así que creo que lo mejor es ir por el camino de la Cascada Meteoro, nunca pasamos por ahí en nuestro primer viaje, además de que es una buena oportunidad para ver nuevos pokémon y entrenar, además de que para ir a Ciudad Arborada debamos pasar forzosamente por Malvalona —comento Max y todos estuvieron de acuerdo con la idea del entrenador, pero a petición de las chicas decidieron quedarse un día más en Lavacalda para tomar un pequeño descanso.

Tras la cena los chicos se fueron a dormir a excepción de Ash y Serena que fueron con la enfermera Joy para que hiciera un chequeo de los huevos que les entrego el Profesor Birch, ambos estaban muy extrañados de que aún no hubieran eclosionado, aunque Brock les menciono que había algunas especies de pokémon que tardaban más tiempo en nacer que las demás y generalmente solían ser pokémon muy raros o muy poderosos.

—Sus huevos están en perfecto estado y les falta muy poco tiempo para nacer —les informo la Enfermera Joy después de entregarles los contenedores donde estaban los huevos —Aunque si quieren conocerlos pronto pueden ponerlos en la arena que esta junto a las aguas termales de esa forma se incubaran mejor —los chicos le agradecieron a la enfermera el consejo y decidieron que es lo que harían al día siguiente, y antes de ir a dormir decidieron dar un paseo ellos solos.

—Al parecer tendrás mucho tiempo libre hasta que lleguemos a Ciudad Arborada, cariño ¿Que harás? —pregunto Serena cuando los 2 se sentaron cerca del Desfiladero para poder ver el estrellado cielo nocturno con tranquilidad.

—Le pediré al Profesor Oak que me envié a Charizard y a Sceptile y aprovechare ese tiempo para dominar la Megaevolución, ahora tengo a Krokodile, Gabite, Pidgeot, Squirtle y Pikachu, de esa manera podré sacar el máximo de su poder, además de que estoy muy ansioso por al fin conocer a nuestros nuevos amigos.

—Es una buena idea, tus pokémon son muy fuertes y el entrenamiento los hará mejorar mucho más. Además yo también estoy ansiosa por finalmente conocer a nuestros pequeños —dijo Serena tocándose el vientre y causando que el chico se pusiera pálido.

Algo Verdaderamente DulceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora