Capítulo 36.

3.5K 261 45
                                    

¿Mamá?

¿Donde estoy? No puedo abrir mis ojos. No puedo moverme. ¿Que pasa conmigo? ¿Que pasó después de la oficina?

Estaba dolida. Mi madre estaba viva pero no me recordaba. Mi abuela muerta por culpa de un mal nacido que se hacía llamar padre. Mi padre es un señor que no conozco del todo. Todos estos años creyendo en que los Hudgens tenían algo que ver con la supuesta muerte de mi madre y tenía al culpable a dos habitaciones de mi puerta.

Encontraré a David La Santa y haré que pagué por todo lo que me ha echo. Haré que se arrepienta de cada uno de sus actos pedazo por pedazo. De esta no saldrá vivo. Lo torturaré hasta que ruegue por piedad.

-¿Por qué no me haces caso cada vez que te digo que no hagas las cosas? - escuché que empezaron a hablar - Yo solo quiero protegerte pero no sabes cuánto me duele no poder hacerlo. Eres muy terca, Patricia. Yo puedo tratar de ponerme en tus zapatos pero no sigues mis consejos. Te dije que no era buena idea ir y ahora mírate. Hace dos semanas te acababan de sacar un disparo del pecho y ahora será lo que Dios quiera. Ya yo no puedo seguir así. No sabes cuánto me dueles.

¿Dos semanas? ¿Estoy en coma? No, yo tengo que salir de aquí.

Traté de sacar fuerzas para aunque sea abrir los ojos pero era inútil. Sentía; sentía el contacto cálido de la mano de Joel encima de la mía. Sentía como sus lágrimas caían en mis brazos y lo escuchaba decirme todo lo que sentía en estos momentos.

Este chico que está frente a mi, vale oro. Este chico que esta frente a mi, es el chico más dulce, caballeroso y humilde que he conocido nunca jamás en mi vida. Sacando de lado todo lo que está pasando, Joel es el chico con el que quiero estar y quiero pasar muchos momentos a su lado.

Pov Joel.

Mi mirada clavada en el suelo, mi ojos estaban hinchados de tanto llorar y mi corazón... ya ni siquiera lo sentía.

Sentía que en cualquier momento la perdería. Hace dos semanas está aquí y los doctores ya no tienen esperanzas.

Los únicos que estábamos aquí éramos Jason, Alan y yo. La policía había comenzado una investigación con todo esto pero como no habían encontrado suficiente evidencia así que lo soltaron.

En ese momento veo pasar los tacones finos de una chica por la sala de espera. No le presté mucha atención hasta que mencionó el nombre de mi chica; Patricia.

Levanté mi mirada rápidamente y solo pude ver a una mujer alta, bien formada. Llevaba un traje color gris, pegado a su cuerpo que le llegaba a un poco más arriba de su rodilla y su cabello marrón por debajo de sus hombros. Tenía unos zapatos de tacón negros y su maquillaje era natural. Tenía un gran parecido con Patricia pero, no podía ser.

Miré a mi lado rápidamente, preguntándome si acaso Jason o Alan la habían visto pero ellos no se encontraban. Froté mis ojos ante la imagen que veían mis ojos y en ese momento un recuerdo vino a mi cabeza. Cada vez que voy a la casa de Patricia hay una gran foto colgada en la pared de la sala en donde se encuentran David, Patricia y su madre pero no me lo creo.

Cuando quise volver a la realidad y correr a preguntarle por su identidad, ella había desaparecido. Ahora solo estaba yo en la sala de espera; yo junto a mis pensamientos.

Pov Patricia.

No podía mover mi cuerpo. Llevaba horas intentando aunque sea mover un dedo pero ni eso. No había nadie en mi habitación, solo se escuchaba el silencio.

Me preguntaba qué estaba pasando. Suponía que estaba en el hospital ya que muchas veces oía a los doctores hablar en los pasillos pero, ¿que pasa conmigo?

En ese momento escucho como abren la puerta y como unos tacones pisan fuerte y firme el suelo.

-Ay mi Patricia, como haz crecido.

Esa voz.

-No sabes cuánto me duele verte así y aún más porque no estuve para protegerte de ese hombre. - tomó mi mano.

Su tacto cálido.

-No tienes idea de cuanto te he extrañado, hija.

¿Mamá?

No se de donde saqué tantas fuerzas pero desperté. Al fin logré abrir mis ojos pero para mi sorpresa, ella no estaba. Desilusionada por completo trato de cerrar mis ojos tratando de volver al maravilloso sueño pero me fue imposible.

-Patricia. - escuchó como me llaman desde la puerta.

Dirijo mi mirada a la a puerta y veo a un chico moreno, de ojos cafés y cabello negro.

-¿Como sabes mi nombre?

-Patricia, soy yo, Joel.

-¿Joel?

Él solo sale corriendo de la habitación y es lo que hace aún más confuso esto para mi. Minutos después entra un médico, y me hace algunas pruebas imagino que para saber que estoy bien. Miro al chico que había entrado hace un rato tratando de recordarlo pero no puedo.

Justo cuando vi como la linterna médica del doctor pasaba frente a mis ojos un recuerdo vino a mi cabeza.

*Flashback*

-Patricia, mírame.

-No quiero Joel. - dije aún con la cabeza baja.

No quería hacerlo; no quería mirarlo. No me gusta mostrarme tan vulnerable y mucho menos me gusta que me vean llorar.

-Vamos, princesa. Mirame.

No se que paso conmigo en ese momento pero mi corazón se ablandó y no pude evitar sentirme culpable.

-No quiero que te sientas mal. Mirame, no me lastimaste. Estoy bien, pero tienes que aprender a controlar tu enojo. Esta vez lo pudimos evitar pero no se sabe si habrá una próxima.

Se me hacia cada vez la respiración más pesada al sólo imaginar que le pude haber echo daño a la persona que solo intenta ayudarme y hacerme feliz.

-Lo siento. - dije y lo abracé.

-Todo esta bien.

*Fin del Flashback*

-Joel.

-Tranquila. Solo tuviste un episodio de amnesia a corto plazo. Todo está bien. - dijo el doctor - Te mandaré a hacer algunos laboratorios y placas para saber como estas. Depende de los resultados se determinará cuando se te dará de alta. - dijo para luego hacer algunos apuntes en su libreta - Buenas noches. - se marchó.

-Patricia, ¿estas bien?

-Si, solo que hay algo que me tiene con dudas. Soñé con mi mamá Joel. Mi mamá estaba aquí. No se si realmente fue un sueño pero fue lo que me dio fuerzas para levantarme.

-Patricia, hay alguien que quiere verte. - dijo Joel seriamente.

*

Hola. Espero que estén bien. Hasta aquí a llegado el capítulo de hoy. Espero les haya gustado y no me maten por dejarles con la intriga. ¿Quien creen que haya ido a visitar a Patricia? Bueno, espero que les haya gustado el capítulo de hoy. No olviden votar y comentar que les pareció. ¡Gracias por leer!

Bad Girl - Joel PimentelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora