El Príncipe de mi Corazón (Jin y ___) ✔

Capítulo 7

Narra ___

Tome muchas fotos de camino a la ciudad, Seul verdaderamente era una ciudad de sueños. Habían muchos edificios modernos y otros tradicionales, mucha de la gente me miraba raro mientras caminábamos por la ciudad, me supongo que era porque reconocían a Seok Jin.

-¡___! No te distraigas mucho que te puedes perder en la multitud.- Corrí hasta donde el y sonreí tímidamente.

-Lo siento...Esta ciudad es tan hermosa que siento la necesidad de documentar todo. No creo que vuelva por un buen tiempo.

-¿Porque no?- Me encogí de hombros y lo seguí. Paramos en un restaurante, donde Jin eligió la mesa más alejada de la gente y ordenó un montón de comida. Jin comió rápidamente y en silencio, mientras que yo secretamente tomé fotos de él y mastique mi comida lentamente.

-No pienses que no te vi tomando fotos de mí. - Me reí y me mordí el labio inferior.

-Perdón, pensé que no prestaste atención. Los borraré si te molesta.

-Mientras no le muestres a nadie, no me importará. ¿Te gustaría probar un postre? Tengo un lugar en el que realmente quiero llevarte.

-Claro, eso estaría bien. ¿Que recomiendas?

-Hmm...¿Qué tal el patbingsu con sabor a fresa?

-Muy bien, voy a confiar en ti ya que nunca lo he probado.- Jin ordenó la patbingsu para llevar y nos trajeron de vuelta un enorme recipiente de metal lleno de una montaña de hielo raspado con leche condensada, trozos de fresa y pastel de queso, sirop de fresa y algún tipo de dulce de fresa.

Ya en el auto, Jin conducía de forma relajada por la ciudad, mientras que yo le daba cucharadas de nuestro postre. Pasamos por un puente de dos pisos, por el piso de abajo, que cruzaba un enorme y estrecho río que parecía nunca tener fin. Luego de cruzar el puente, Jin estaciono el auto cerca de una plataforma y apago el auto. Tomó la otra cuchara y comenzó a darme del postre también. Estaba muy rico y dulce, el hielo raspado era tan sedoso que no parecía ser hielo. Luego de terminar mi bocado, me giré hacia Jin.

-¿Donde estamos?- Jin solo sonrío.

-Ya veras.- Observe el puente con mucha curiosidad. Luego de unos minutos, comenzaron a encenderse muchas luces de colores alrededor de los soportes del puente.

-Se ve muy lindo.

-Espera un segundo...¡Ahora!

Una dulce melodía comenzó a tocar desde afuera y con el ritmo de la canción salían chorros de agua. Mis ojos se abrieron bien grandes, asombrados por el hermoso espectáculo frente a nosotros. Tome mi cámara y comencé a fotografiar el espectáculo.

Jin de repente tomo la cámara de mis manos y la hizo a un lado.

-¿Porque...-

-___, dicen que si besas a alguien durante la fuente de arcoiris del puente de Banpo, esa persona y tu estarán destinadas a estar juntas por toda la vida.

-¿De veras? Que linda historia...- Jin tomó mi rostro entre sus manos y me besó, suavemente al principio luego se torno en algo...indescriptible. Como si el beso nada más no sería capaz de contar sus sentimientos. Comencé a responder, abrazando mis brazos al rededor de su cuello y besándolo de la misma forma desenfrenada que me besaba a mi. No se cuanto tiempo paso, pudieron haber sido minutos o horas, cuando por fin Jin despegó nuestros labios y presionó su frente contra la mía.

-___...se que ha sido poco tiempo desde que nos conocimos, pero esto que siento por ti...nunca lo he sentido por nadie. Me gustas mucho, tanto así que no quiero que termines mi retrato para no tener que dejarte ir...también quiero que seas mi acompañante a algunos de mis eventos como parte de la familia real. Se que no es apropiada pero contigo...contigo todo tiene sentido. Todo esta bien en el mundo si estoy contigo ¿Que dices?

Comencé a masticar mi labio inferior, pensando en los pros y contras de esta situación.

-No lo pienses mucho, hermosa. Solo dejate llevar por lo que dice tu corazón...

Cerré los ojos y suspiré. Sabia que esto que sentía nos iba a llevar a la ruina pero...por lo menos iba a tener la dicha de decir que por fin...quería a alguien con una pasión ardiente.

-De acuerdo...acepto tu propuesta.

Jin inclino su rostro y volvió a besarme dulcemente. Coloque una de mis manos sobre la de el, entrelazando nuestros dedos. Por ahora, solo por un momento eramos solo ___ Rey y Kim Seok Jin, dos corazones hambrientos por amor...

...

Espero que les guste este nuevo capítulo. Voy poco a poco porque pues en esta historia he tenido que estudiar un poco sobre la realeza y sus costumbres. No ha sido muy fácil, pero créanme cuando les digo que es demasiado interesante. Ya creo que en los próximos capítulos podrán comenzar a ver muchas joyas y coronas y todo lo que tenga que ver con brillo y diamantes y toda esa cosa buena ¿porque a quien no le gustaría ser una princesa?

Bueno aquí me despido por ahora ¡Hasta luego!