___ es una pintora famosa, con reconocimiento a nivel mundial. Ha pintado a la realeza de diferentes países y a personas común y corrientes, sus obras de artes esta valoradas en millones de dolares, pero la gran parte del dinero que recibe es donado...
___ y Jin pasaron gran parte de la tarde en la habitación de Jin, intentando escoger un vestuario para su pintura. Era muy espaciosa para el solo. No esperaba encontrarla tan recogida, era la primera vez que veía semejante cosa.
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Entre besos y abrazos, por fin escogieron el vestuario. Jin le había permitido usar su habitación de estudio mientras lo pintaran aunque este tenía otros motivos. Ambos estaban envueltos en su propia burbuja que no sabían que eran vigilados.
Narra ___
-¡Kim Seok Jin! ¿Me puedes explicar que rayos estas haciendo?- Estábamos compartiendo un dulce beso cuando de repente esa voz nos separo. Era la esposa del emperador.
-Mamá...por favor no te enojes. Deberíamos de hablar sobre esto.
-¿Que excusa me vas a dar? Estas besando a una empleada, eso va en contra de nuestro estilo de vida.- Baje la cabeza y mordí mi labio inferior. En voz baja, le dije a Jin.
-Me iré...no quiero más problemas.
-No...tu no iras a ningún lado. Mamá, ___ me gusta y quiero estar con ella. Papá no tiene por que enterarse de esto hasta que ambos no estemos seguros de nuestros sentimientos. Por favor, mamá...- Ella suspiro y sacudió la cabeza.
-De acuerdo...lo hago solo porque fui yo quien los descubrí. Tengan mas cuidado la próxima vez, si no sera peor.- Jin fue hasta donde su madre y beso su mejilla. Esta se fue, cerrando la puerta tras ella. Jin se giro a verme, mientras yo me mantuve cabizbaja, me sentía que estaba a punto de llorar.
-___...
-Por favor, Seok Jin... De veras no quiero causar más problemas. Solo hagamos este cuadro y ya. El tiempo corre y no queda ya mucho de el.
-Por favor, solo escuchame.
-¿Has escogido tu vestuario?- Jin suspiro pero asintió.
-Bien, ve y cambiate, por favor. Te tomaré algunas fotos para luego decidir una pose.
***
Narra Jin
Luego de haberme cambiado a un suéter de cuello alto negro y una chaqueta y pantalones de vestir del mismo color, salí del vestidor. ___ había preparado varias estaciones para tomarme algunas fotos. Tomo muchas paradas y sentadas por lo que parecían horas, había tomado un pequeño receso y me senté al frente de una ventana que miraba hacia la ciudad y mire a lo largo, perdiéndome en mi mente. Escuche el leve clic de la cámara de ___ pero no le preste atención.
-Ya terminamos.- La mire algo sorprendida.
-¿De veras?- Con una leve sonrisa, ella asintió.
-Debes estar muy cansado. Pasare las fotos a mi computadora y escogeré una de ellas para hacer un dibujo a lápiz de carbón y luego lo trazaré en un lienzo a lápiz para comenzar a pintarla con pintura de aceite.-
___ comenzó a recoger su equipo. La ayude con lo más pesado y la acompañe a su habitación y deje todo en una esquina.
-¿Vendrás a cenar?
-No, quiero hacer esto primero. Si acaso me pica el hambre, ire a la cocina y me prepararé algo.
-¿Porque no salimos a cenar?- ___ me miro asombrada.
-¿Que?
-Ya estoy vestido, así que ¿porque no salimos a cenar? Me gustaría que conocieras un poco más sobre Seúl.- ___ se sonrojo pero asintió. Tome su abrigo y su cámara y luego salimos a buscar un auto en el garaje.
