♦CAPITULO 5 ♦

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La tarde caía en la ciudad de Rivendel, los últimos destellos anaranjados y rojizos chocaban con las paredes del Castillo.

Mi vista estaba concentrada en un libro que me había dado el rey Elrond en persona, supuestamente el libro relataba las historias de los Nachtgeist, de como llegaron a la tierra, sus batallas junto con los elfos, hombres y enanos, sus costumbres y poderes, su lengua y como de apoco fueron "desapareciendo". Esa fue la parte más triste, no pude evitar llorar al saber por las torturas y sufrimientos que pasaron por causa de la envidia y avaricia de Sauron.

- Ellos no merecían esto - susurre pasando de página, iba por la 120 y eran en total como  casi 1000 hojas.

Miradas rosadas. Leí en el título de la nueva página.

Hace siglos atrás, cuando el primer Nachtgeist piso la tierra en cuerpo de carne y hueso, su vida era solitaria e infeliz. Cada noche el Nachtgeist llamado por los hombres como Yeni Ulduz o también conocido como nueva estrella, el miraba los cielo recordando su antiguo hogar, en parte lo estrañaba, allí estaba rodeado de espíritus como el, juntos charlaban y se ayudaban mutuamente en una situación peligrosa, en su hogar no estaba solo. Pero ahora, Yeni Ulduz vagaba solo por los pueblos siendo visto por todos, que lo saludaban y lo hacían sentir como en casa pero ninguno de ellos podía llenar ese vacío que sentia, el de ser amado.

Un día Yeni Ulduz recogía los frutos para ayudar a su nuevo amigo Belsidur. Ya había llenado toda la canasta y cuando iba a darse la vuelta para irse, la voz de una mujer lo atrajo, el se dio vuelta lentamente para toparse con una bella mujer, de cabellos rubios, ojos negros y un vestido color crema adornaba su delicado cuerpo.

- ¿ te encuentras bien?- pregunto con un poco de inseguridad en su voz. Oyó los silencioso sosollos de parte de la chica y rápidamente se alarmó.

- Lo siento yo... No pretendía asustarte- se disculpo acercándose a ella, que solo escondía su rostro entre sus piernas.

- Que puedo hacer para que dejes de llorar? - le pregunto arrodillandose frente a ella. De pronto una idea cruzó su cabeza. Comenzó a hacer figuras con sus manos y así creo formas de animales, paisajes e incluso su antiguo hogar. La magia de Yeni Ulduz ya se había desarrollado por completo y eso le permitía hacer más de los que se podía imaginar.

- Es muy bonito - oyó el susurro de la mujer, sus ojos de a poco cambiaron a un color amarillo  como el sol en la mañana. Sonrio al ver su felicidad y belleza.

- Soy Yeni Ulduz - se presentó, ella lo miro y sonrio, el Nachtgeist se estremeció al ver su sonrisa solo para el, y un extraño sentimiento lo recorrió de pies a cabeza.

- Soy Begleiter - le contésto dulcemente. Ambos quedaron en un trance del cual ninguno pudo salir, ambos sumidos en la belleza del otro.

- Tus ojos - murmuró Yeni Ulduz - son rosados - Hablo encantado al verlos.

- Los tuyos están igual - contesto con una sonrisa.

Desde ese día la vida de Yeni Ulduz cambio para siempre, ahora no estaba solo y jamás lo volvería a estar. Cada ves que veía a esa hermosa mujer llamada Begleiter que lo había enamorado en el primer instante sentí que su vida estaba completa y no necesitaba nada más que su amor.

El corazon de un Angel -Legolas Y Tu -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora