El Despertar Oscuro

CAPÍTULO 19

Destiny

Enemigo tras enemigo, me iba cansando por cada golpe que daba.

Recuerdo como si fuera ayer como mi reino había caído sobre las garras de las pesadillas.

...

Salí corriendo por el bosque mientras oía a Chispa gritar mi nombre, pero no me detuve, seguí corriendo entre los árboles mientras se perdía su voz.

Al poco tiempo me detuve y mire al cielo pensando que algún elfo de mi reino seguiría creyendo en mí.

Oí unas ramas crujir detrás mía y prepare una bola de energía. El silencio se alargó mas tiempo del que esperaba. Di un giro de 180° y lance mi bola de poder que impactó de lleno en el enemigo, me dispuse a volver a cargar pero este se lanzo encima mía y sus alas cubrieron el cielo. Lance otra bola que le impacto de lleno pero ni se imuto.

Se transformó en humano y yo hice lo mismo al ver que se trataba de Rapton.

— ¿Que haces aquí? — pregunté nerviosa.

— Venia a buscarte — Me dijo mientras daba un paso hacia mi.

— ¿A buscarme? — Repetí.

— El reino te necesita — Me dijo mientras me agarraba del brazo.

— Eres un sirviente de Tinieblas y eso no lo olvidaré — Le grite mientras me soltaba de su agarre.

— Tinieblas me controlaba y ahora soy libre, ayudame a detenerle, juntos lo conseguiremos — Me dijo mientras me extendía la mano.

Las dudas me invadieron, además de ser el amor de mi vida era la mano derecha de mi archienemigo Tinieblas.

Sigue tu instinto me dije a mi misma.

Extendí mi mano y cuando me agarro tiro de ella hasta que nuestros labios se juntaron. Me sobresale y quise separarme de el pero me tenia bien agarrada, sentía como movía sus labios sobre los mios y sentía como mis fuerzas iban desapareciendo.

Lo siento.... Fue lo único que logre oír antes de desmayarme.

Desperté en una celda. Oscura. Sola. Me levante y mire a mi alrededor, encontré un trozo de pan y un baso de agua, al otro lado había una armadura y un escaparate de armas.

Me acerque a la comida y la devoré y después me acerque a las armas. Había una espada, arco y flechas, acha, garrotes y mas armas. Me decanté por un puñal un arco y la espada. Me cogí la armadura me la puse y me senté a esperar al guardia de mi celda.

El tiempo paso lento y yo fui ideando mi plan de escape. Oí pasos y abrí los ojos, Rapton venía con paso lento pero decidido, cuando estuvo suficientemente cerca de la celda se detuvo por si hacia algún movimiento.

— Escoria... — sisee.

No dijo nada y dos soldados elfos entraron y me cogieron por los brazos.

— Soltarme — Chillé — Soy vuestra reina —.

— Eras su reina — Corrigió Rapton con una sonrisa maligna.

Entro en la celda me cogió del cuello y me volvió a besar apasionada mente.

— ¿Te gusta hacer sufrir he? — Le escupí.

— ¿Se nota? — contestó el burlón.

Sacó uno de los collares controladores y me sumí en el trance.

...

Desperté en medio del campo de batalla del coliseo, no tenia collar y desde que Moonlight consumió toda la energía de gema que me quedaba no podría tranformarme en el dragón.