CAPÍTULO 21

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Aquos

Sentí un movimiento detrás de mí, gire la cabeza y me encontré delante de un enorme ojo ámbar mirándome curioso y asustado. Yo lo miraba asustado y emocionado, de algo me sonaban esos ojos, de alguien conocido que hacia mucho que no veía.
Movió su gran cabeza un poco hacia un lado para observarme desde otro ángulo, yo alargue mi mano para poder tocar aquella hermosa criatura, esta primero vaciló pero después se acercó y pide sentir su enorme poder y sus ganas de ser liberado. Aquella fuerza y deseo me crearon el valor suficiente para adentrarme en su celda ya que los barrotes eran demasiado pequeños para el y suficientemente anchos para mi.

El dragón estaba atado a varias cadenas que a su vez estaban ancladas al suelo, sus escamas estaban desgastadas y sucias por no ser cuidadas como es debido, - deberían llevar aquí mucho tiempo - Pensé. En su cuello vi unas heridas infectadas y abiertas que acababan debajo de un enorme collar con una gema morada. Al verlo me paralice, eran las mismas que llevaban los elfos del coliseo así que Tinieblas También estaría robando poder de el dragón.
Me acerque con cuidado a él y examine el collar en busca de la forma quitárselo. Por la parte de la espalda había una inscripción que decía:

Si la maldición deseas romper, el vinculo ha de desaparecer.

Me quede pensando como podría darle sentido a ese acertijo y mientras tanto el dragón dormitaba en la celda, camine por la celda y empecé a dar patadas alas pequeñas piedras que encontraba y según las iba lanzando me di cuenta de como ayudar al dragón.

Cogí una piedra de tamaño considerable pero suficientemente ligera para poder usarla, y me acerque al dragón, la gema había quedado expuesta mientras dormía y empecé a dar golpes con la piedra a la gema. Por cada golpe la gema se resquebrajaba mas y mas hasta que en un último golpe la gema estallo en pedazos que se perdieron por la oscuridad de la celda. El dragón se despertó y yo le señale el collar con la esperanza de que volviera a intentar quitárselo.

Él pareció entenderme y volvió a hundir la garra por donde otras tantas veces lo había intentado y sin aplicar mucha fuerza el collar estallo en pedazos y el dragón quedo libre de nuevo. El dragón empezó a cambiar de forma y una bella mujer apareció ante mi, según termino la trasformación no pudo sostenerse en pie y se lanzó al suelo, sus ojos eran ámbar al igual que los del dragón y su piel pálida y blanca como una perla, pelo castaño y de estatura media.

Me arrodille para ayudarla y se lanzo a mis brazos para abrazarme y empezó a llorar, yo la abrace algo confundido.

— Gracias gracias, — Dijo sollozando — llevo atrapada en ese cuerpo demasiado tiempo y tu me has salvado, como puedo agradecérselo — me dijo mientras se enjuagaba las lágrimas.

Levantó la cabeza y ambos nos sorprendimos.

— ¿¡Perlina!? — Grité.

—¿¡Aquos!? — Gritó.

Ambos nos fundimos en un abrazo.

— ¿Que te ha pasado? — Pregunte con tono preocupado e intrigado.

— Ya tendremos tiempo de explicaciones ahora debemos parar a Tinieblas — Dijo, mientras se ponía en pie pero volvía a caer.

— Perlina.... Me temo que es demasiado tarde, hicimos lo que pudimos pero... La verdadera pesadilla ha despertado. Por eso estoy aquí — Dije, mientras alguna lágrima rodaba por mi mejilla.

— Oh no... Vale pues debemos encontrar a tus amigos, y sacaros de aquí — Dijo decidida.

No me había dado cuenta hasta que vi su cuello lleno de cortes profundos que a cualquier roce se reabrirían y era demasiado peligroso para ella recoger todo el camino para llegar hasta nuestros amigos.

— Perlina esos cortes no pintan nada bien... Deberías quedarte aquí y yoir a buscar ayuda — Dije, mientras me arrancaba parte de la manga y empezaba a vendarla el cuello.

— Ni hablar. Yo voy contigo a buscar a los elegidos, y nadie me lo impedirá — Me soltó decidida mientras hacia una mueca de dolor al apretar el vendaje.

— Menos mal que estas viva Perlina — Dije cariñoso — bueno como te niegas a quedarte aquí, supongo que podrás venir conmigo — suspire a mi pesar.

— Vale pero primero me tienes que volver a enseñar a andar, mientras estaba en ese cuerpo me he acostumbrado a andar a cuatro patas y ya no se volver a caminar — me dijo con tono inocente.

Tarde mas o menos tres horas volver a enseñarla a caminar y a correr, y mientras tanto ella me contó que todas las celdas que había por ese pasillo estaban encarcelados nuestros compañeros, y que para salvarlos teníamos que hacer lo mismo: deshacernos del collar.

Desde que Destiny fue destronada, Tinieblas tomo el control de todo lo que ella poseía y usándolo a su voluntad, cuando se entero de que nos tenia atrapados con los collares decidió enviarnos lejos de la superficie para que el único dragón que existiera fuera él, pero al poco tiempo la sed de poder le invadió y trasformo  las gemas controladoras a gemas reductoras. Estas lo único que hacían era sustraer poder de los individuos que desafortunadamente llevaban el collar. Esto incremento su poder al tener a tantos dragones controlados. Montones de dragones hulleron a la superficie y los pocos que se quedaron a luchar perecieron a manos de Destiny.

Antes de que las bastas praderas, mansos ríos y despejados cielos fueran denominados: Orbis, unos reinos ancestrales convivían en paz pero cuando la profecía se formulo los grandes ancestros predigeron tiempos oscuros y temerosos de que sus reinos acabaran destruidos, encontraron el portal y viajaron a la tierra donde aprendieron a adoptar formas humanas para esconderse y nunca ser descubiertos. Durante siglos los lideres proclamaron una ley que prohibía que los dragones tuvieran hijos con humanos, pero en muchos casos los dragones y dragonas se enamoraban pérfidamente de humanos y humanas hasta tal punto de tener hijos con ellos, al principio todos estos semi-dragones morían al no ser capaces de guardar todo el poder que se les había concedido, pero muy pocos sobrevivían y eran ocultados por sus padres dragones para que los líderes no los descubrieran y asesinaran.

Esto duró por montones de años y los semi-dragones y sus descendientes se seguían escondiendo de la humanidad, llegando hasta tal punto de que no quedaran mas semi-dragones, sino humanos normales y sin poderes. Pero en su ADN si había restos de los grandes ancestros, de los grandes líderes que una vez gobernaron sobre las fértiles tierras del otro lado del portal.

El guardian de las almas sabía que los dragones serían necesarios para tiempos remotos así que altero el ADN de las nuevas generaciones de semi-dragones para potenciar su poder hasta tal punto que a los dieciocho años alcanzaran el grado máximo de poder y pudiesen transformarse en las hermosas y poderosas criaturas. Y así fue, según los jóvenes iban manifestando sus poderes eran llamados al portal donde ellos comenzarían la nueva era de dragones.

— Hemos llegado ya — Preguntó Perlina mientras miraba a todas partes confundida.

— Pues si ya hemos llegado — Dije mientras se iban aclarando las figuras de nuestros amigos.

—hey chicos adivinad a quien he encontrado — Grité de alegría al ver que todos estaban despiertos.

Todavía hay esperanza. Solo hay que crearla.

El Despertar OscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora