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Febrero, 2021.

Nos separamos en busca de reunirnos con cada uno de nuestros equipos. Haneul se encontraba con las chicas y yo en cambio, con los chicos. Me reconfortaba el hecho de que fuera así, porque sabía desde el comienzo que ella debía de estar con ellas y no solo por el hecho de ser chicas sino, porque a ellas realmente no las conocía. Era una gran oportunidad para que hablaran. Además, sabía que se volverían unas grandes amigas porque podía ver cómo se complementaban sin apenas estar juntas.

—Estamos en problemas, un buen peón se ha metido en el equipo de las chicas —aseguró Minhyung con preocupación. No pude evitar sonreír y él se percató de ese gesto—. ¿Sucede algo? —Preguntó molesto. Negué con la cabeza.

—Desde siempre te ha dado rabia que Haneul pueda superarte en algo como los bolos —me miró con molestia. Haneul no era mala a los deportes, pero Minhyung era demasiado bueno en todos, menos obviamente, en los bolos.

—Bueno, bueno, si jugamos bien nuestras cartas podemos ganar —dijo lleno de positividad como siempre, Hoseok.

—Solo no te dejes seducir por Sooyun —reí ante las palabras de Taehyung. Era muy fácil que Hoseok se distrajera con la belleza de su novia. Todos reímos por la cara de Hoseok de yo no he roto un plato en la vida.

—¡Vais a perder! —Exclamó con confianza Sooyun. Sacó la lengua con retintín y le dedicamos una mala mirada.

—¡Eso es lo que tú crees! —Exclamó Hoseok—. Vamos, debemos de idear nuestro plan —nos dijo y nos juntamos en corrillo.

Minhyung comenzó a idear el plan perfecto para poder ganarles ante el hecho de que ellas jugarían sucio con sus armas seductoras a diferencia de nuestra competitividad nata. Mientras indicaba qué cosas debíamos hacer para intentar hacer un pleno, yo miraba cómo las chicas se repartían los puestos a piedra, papel y tijeras, quedándome con el orden en el que saldrían. Una vez terminaron de jugar, le tapé la boca a Minhyung haciéndole callar de una vez para que me escuchara. Nos estaba volviendo locos con sus intenciones de líder.

—Sé el orden en el que piensan salir, ¿qué tal si cada uno sale con su pareja? Será fácil distraerlas —sugerí. Taehyung me miró con desaprobación.

—Sería buena idea si todos tuviéramos...

—Tae somos más, tú te intercambiarás con uno de nosotros, ¿qué más da? —zanjó Jimin serio—. Me parece buena idea, ya que ellas juegan sucio, nosotros también deberíamos hacerlo.

Una vez decidido cómo íbamos a hacerlo finalmente me levanté a coger la bola tomando el primer puesto al igual que Haneul. Se veía sorprendida de que la suerte nos hubiera sacado juntos ya que, para que no se notara que habíamos hecho trampas, hicimos como que jugábamos a ver quién salía en qué orden. Minhyung de siempre había sido un gran tramposo. Observé cómo mi pequeña novia cogía una bola rosa evitando cruzar nuestras miradas, haciendo notar su nerviosismo. Sonreí. Levantó la cabeza para sonreír y guiñarme el ojo, cosa que se vio realmente sexy viniendo de ella.

—¡No te dejes nublar por sus encantos! —Exclamó Sooyun recibiendo un golpe por parte de Jooeun. Sonreí por la actitud de ambas. Me miró por última vez.

Respiró hondo antes de lanzar recordándome los viejos momentos en los que también solía hacer ese gesto antes de lanzar, era algo así como una manera para concentrarse. Caminó un paso a detrás para definitivamente lanzar con aquel gesto tan perfecto como lo recordaba. La bola no tardó en llegar al final de la pista deshaciéndose de todos y cada uno de los bolos dejándome realmente sorprendido. Tenía la esperanza de que la poca práctica le había quitado ese don que ella tenía para el juego. Las chicas corrieron hacia ella para celebrarlo con entusiasmo y no dudé en sonreír por ver la conexión a pesar de que tuvieran ventaja sobre nosotros. Reían juntas y eso me llenaba el corazón de felicidad.

Remember Her ↠ Jeon JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora