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Febrero, 2021.

No sabía si había sido buena idea pero ya no había vuelto atrás. Después de un tiempo indeciso, había escogido un regalo que, hace mucho tiempo querías y sabía que, aunque el tiempo hubiera pasado, aún era una de las cosas que más ilusión te haría. Aunque, después de recogerlo, me di cuenta de que, aún habiéndome gustado a primera vista, era realmente revoltoso y se perdía por mi piso obligándome a comprarle recientemente un cascabel para poder encontrarlo.

—¿Algún día te estarás quieto, perrito loco? —Le pregunté atrapándole entre mis brazos para hacerle cosquillas mientras él se movía con intensidad jugando conmigo. A pesar de lo revoltoso que era, era un perro que tenía pinta de ser muy amable y cariñoso.

Acabé acariciándolo con cuidado mientras se dejaba dormir entre mis piernas cansado de toda la locura que había formado. Era una cría que iba a cumplir a penas un año y era normal que fuera tan revoltoso, ni siquiera Toki le aguantaba, siempre le ignoraba mientras intentaba mantener su tranquilidad propia de divo que solía tener. Sonreí al ver lo tranquilo que se había quedado encima de mí y llegué a pensar que quizás se encariñaría conmigo durante este tiempo y no querría irse contigo.

Lo adopté hará más o menos una semana cuando decidí que ese sería mi regalo atrasado de Navidades y tu cumpleaños además de regalo de bienvenida. Era un cachorro blanco de raza mezclada pero, tirando más a un korean jindo, de esos perros que a ti siempre te hacían gritar de amor. Al lado de Toki que era un pomerania crema, eran casi del mismo tamaño por lo que era más bien grande para ser una cría.

—¿Cómo va Cascabel? —Preguntó Jimin después de dejar sus cosas ya que había llegado hace un momento. Miró a tu futuro perro con una sonrisa para después sentarse a mi lado y tocarlo con cuidado.

—¿Cascabel? —Reí ante el nombre provocando que él también riera. Asintió afirmando sus palabras y el mote para tu perro.

—Como quieres que Haneul elija el nombre yo decidí apodarlo cascabel porque me tiene loco con el sonido de ese collar que le pusiste, no sé si fue mejor o peor idea —comentó provocando que sonriera. Yo también creía que quizás el cascabel para poder encontrarlo tampoco fue una gran idea.

—Ahora se ha tranquilizado, me da que cuando Haneul se lo lleve para su casa Daehyun va a conseguir tranquilizarlo —bromeé consiguiendo que Jimin riera ante mis palabras. Seguramente tu hermano pequeño lo volvería tan loco que acabaría con él.

—Seguramente, ese niño es tan torbellino como este perro —continuó la broma. Sonreí recordando lo mucho que tu hermano se parecía a ti y la mucha pena que me daba que, después de tanto tiempo deseando tener un hermano, estuvieras lejos de él.

—¿Crees que le gustará? —Pregunté buscando la mirada de Jimin mientras él mantenía sus dedos en el pelo del perrito. Sonrió mientras asentía con la cabeza antes de mirarme.

—Estoy seguro que te amará más de lo que ya lo hace.

Evité la mirada sonriendo gustándome esa idea más de lo que creía que me gustaría. Tomé al cachorro para dejarlo en la pequeña camita que había comprado para él dejándole que descansara con más comodidad. Volví a sentarme al lado de Jimin dejando caer mi cuerpo sobre el sofá cerrando los ojos mientras me quejaba del cansancio que sentía en mi cuerpo. Él rió ante mi actitud clavando sus dedos con suavidad en mi cintura haciendo que me quejara.

—¿Qué pasa? —Me miró con interés y únicamente abrí los ojos para mirarle porque después volví a cerrarlos acomodándome más sobre el sofá. Suspiré.

Remember Her ↠ Jeon JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora