Tú Me Hipnotizas - #NaruHina #SasuSaku #ShikaTema #NejiTen Y Más [PAUSADA]

Capítulo 12

—Hinata, Hanabi —llamo su padre desde abajo.

La peliazul se incorporó de su cama y bajo donde su padre.

—¿Qué dese...? —Su pregunta se queda en el aire al ver a una pelirroja en mido de la sala con una sonrisa burlona.

—Te quiero presentar a... —habló su padre y a continuación miro a la joven.

—Soy Karin, un gusto —se presentó con amabilidad fingida.

Hanabi le extendió la mano, Neji la miro, asintió y volvió a sus cosas, y Hinata se quedó estupefacta, ahí parada.

—Hinata —llamó en señal de regaño y la miro molesto.

—Gomen... —se acerco y le estrecho la mano nerviosa— U-Un gusto...

—Es la hija de un gran amigo mío, se quedara aquí unos meses mientras su padre trabaja fuera del país —anunció Hiashi—. ¡Natsu! —llamó.

La empleada entro a la sala.

—¿Si, señor?

—Lleva a la señorita a la habitación de huéspedes —ordenó.

—Claro, señor. Por favor, sigame.

Natsu subió seguida de Karin.

Hinata al ver desaparecer a ambas por los pasillos, se acercó a su padre.

—Disculpe, pero ¿por cuánto tiempo se quedará? —preguntó cabizbaja y con cautela.

—Eso no te debe de importar —respondió cortante—. Vuelvan a sus habitaciones.

—Claro. Hana...

—Hai.

Ambas subieron y cada una se dirigió a su habitación.

(...)

—¡¿Qué?! —gritó la pelirrosa llamando la atención de algunos de los presentes— Gomen, gomen...

—Sí, parece que vivirá conmigo por un tiempo... —respondió decaída.

—Te doy mi más sentido pésame —dijo tocándole el hombro.

La peliazul sintió una mirada clavada en ella, volteó y vio a Shion mirándola con... ¿rencor? ¿odio?

—Ok... —Volteó de nuevo hacia su amiga— Oye... ¿segura que no hemos cambiado de parientes, amigos, conocidos de nuestros padres? —preguntó recargando su cara en su palma.

—Me pregunto lo mismo, pero... Quien sabe. —Suspiro.

—Ohayo —saludó la maestra de Historia entrando al aula.

Todos se dirigieron a sus respectivos lugares.

—Ohayo, Kurenai-sensei —saludaron a unísono.

—Por favor saquen sus libros...

—Libros que tiene usted —recordó Kiba con una sonrisa.

—¿Ah? —Hizo un pequeño flashback— ¡Verdad! Ehhh... Sakura, por favor, trae los libros, se encuentran en la sala de maestros —pidió Kurenai dirigiéndose a la pelirrosa.

—Claro. —Se acercó donde Kurenai y esta le entregó las llaves.

—Pero... ¿Podras sola? —de preguntó antes de dejarla irse.

—S...

—Yo la acompaño —se ofreció un azabache interrumpiéndola.

—Sasuke-kun...