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Llegué a clase y me senté en el mismo sitio en el que me había sentado el día anterior. Abrí mi libro de Matemáticas y suspiré.

De repente sentí que alguien se sentó a mi lado. No me gire, pero se me cortó la respiración. Tampoco supe quien era ya que no había volteado todavía, pero tenía una ligera idea de quien era, porque solo él hace que se me corte la respiración.

- Hola, ______.

- Justin

Sonreí y me removí en mi silla.

- ¿Qué tal?

Me preguntó mientras sacaba su libro. No me dio tiempo a responder porque Jasmine ya estaba sentada sobre su mesa. 

Jasmine era la típica chica alta y delgadísima. Tenía los pechos y el trasero grandes (a decir verdad, lo único que tenía de gran tamaño en su cuerpo) y era capaz de hacer perder la cordura a todos los seres humanos con miembro viril.

Lo miraba pícaramente. Su cortísima falda daba mucho que hablar, pero... para que iba a mentir, sus piernas eran preciosas, al igual que ella. Era normal que Justin saliera con ella.

- Hola, mi amor

- Jasmine

La saludó con la vista en cualquier otro sitio que no fuera ella. Luego se dio la vuelta y clavó sus ojos en los míos. No sabia que hacer, me había congelado completamente. Me comencé a poner nerviosa y empecé a mover la pierna mientras le sonreía.

Dos segundos después Jasmine se fue con una mueca en el rostro de enfado.

El profesor entró antes de poder preguntarle a Justin que acababa de pasar.

Veinte minutos más tarde. En medio de clase.

- ¿Por que has ignorado a Jasmine? Solo venía a saludarte y la has ignorado. -susurré intentando que el profesor no me escuchara.

- No lo entiendes, _______. Está todo el día encima mío.

- Pero si sois novios, ¿no? Es normal.

- ¿De donde sacas eso?

El profesor dejó de escribir en la pizarra. Se giró y mandó callar. Después volvió a voltear para seguir escribiendo.

- Se nota que te quiere...

- ...me quiere. Para follar. Igual que yo a ella.

- Que insensible. -Suspiré.

- ¿Por qué?

- Jasmine no merece que...

- YA ESTA BIEN. SMITH Y BIEBER, FUERA DE CLASE.

- Pero...

- HE DICHO FUERA. PIÉNSENLO BIEN LA PRÓXIMA VEZ.

Nos levantamos y salimos de clase. Justin cerró la puerta de un portazo y bajó las escaleras que había al lado del aula que daban al campo de rugby.

- ¿Donde vas?

- No sé.

- ¿Me vas a dejar sola? ¡Mierda, Justin!

- Vamos, venga.

- Nos van a castigar todavía más.

Suspiró y luego metió la mano en el bolsillo para sacar un cigarro.

- ¿Vienes o no?

Resoplé y corrí hasta estar a su lado. Bajamos juntos las escaleras y salimos a la calle.

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Dio la primera calada y expulsó el humo.

- ¿Vas a quedarte aquí el resto de las clases?

- No lo sé. Creo que sí. Bueno... aquí no, me iré.

- Te meterás en problemas, Bieber.

-Suenas como mi padre.

Soltó aquella frase sarcástica y volvió a dar otra calada. La expulsó y clavó mi vista en mi.

- Lo siento, _____. Otra vez.

Negué con la cabeza y miré hacia el cielo.

- Siento ser tan impulsivo a veces.

- Bruto. A veces eres muy bruto.

Soltó una gran carcajada a la vez que apagaba el cigarro.

- Me vuelvo a clase, Justin. Espérame en el mismo sitio que ayer.

- Claro. Nos vemos luego.

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Narrador externo.


El timbre interrumpió la última clase, y todos los alumnos salieron corriendo.  _______ recogió lentamente, por la que se quedo sola en la gran clase de arte. Metió el último libro en el bolso y fue a salir de clase.

- ¿A donde vas, querida _______?

- No tengo tiempo, Jasmine.

________ iba a esquivarla para poder salir, pero ella fue mucho más rápida y puso su brazo delante de ella.

- ¿Qué tienes que hacer?

- Nada que te interese.

- Tiene que ver con Justin, mi novio, así que sí. Tiene que ver conmigo.

- Jasmine, me da igual tu vida. Déjame en paz.

- Cuidado, _______. Mucho cuidado.

_______ la dedicó una sonrisa y salió del aula, casi corriendo hacia el gimnasio.

Addiction » j.bDonde viven las historias. Descúbrelo ahora