Mi Vecino, Mi Jefe, Mi Amor

23

Llego la noche, Andy paso por mi a la tienda y me llevo a la cabaña.

-A que venimos -sonreí
-A lo que vamos -dijo Andy.
Me tomo de la nuca y trato de besarme, pero alcance a girar  mi rostro.
-Eres mía -mordió mi labio. Y comencé a sentir escalofríos por todos lados.
Andy se abrió paso a mi entrepierna
-Tu siempre vienes preparada Gatita -sentí su aliento en mi cuello
-Claro -gemí.
El ambiente de formo mas caliente, me arrodilló y saco su pene, lo metió en mi boca.

-Vamos para arriba -dijo Andy, creo. No lo se estoy muy entretenida disfrutando el sexo oral. Estoy muy metida en mi trabajo.

Me llevó arriba en brazos, me recostó en la cama y comenzó a besarme lento.

Me arrancó la ropa, y despedazó mi ropa interior, se tumbo en la cama, y yo subí sobre el, este no perdió el tiempo y me penetro.
-Ahh-gemí
Comenzó a meter y sacar a un ritmo muy placentero. Me recosté en su pecho y comencé a morder sus hombros, salio y no se como chingados le hizo pero ahora estoy en cuatro y  Andy penetrando me con fuerza.

Terminamos de hacer cosas pervertidas y nos dedicamos a hablar, le conté que les hable a las chicas sobre el "Noviazgo" de Andy y mio, y pues, se rió, y dijo que ahora nos estarían observando. Pero dijo algo que no me justo, dijo que ya no tenía derecho a salir a ningún lado sin el.  No me gusto, o bueno me dejo pensando y pensado.
Pues no, no los tiene, es mi jefe y en modo, me manda, pero por el otro lado soy independiente y no tiene derecho sobre mi.

-Andy...
Sonó mi teléfono, lo tome, mire la pantalla. Mierda, es mi papá!
Mire la hora, son las 3:00am.
-Es mi papá -susurré.
-Dame eso -me quitó el teléfono.
-Hola -Dejo de hablar -Disculpe, pero lleve a cenar a su hija, y pues venimos a la cabaña de vacaciones, y nos quedamos viendo una película, y ya cuando volteé a ver a ____, ella ya estaba dormida -dejo de hablar, sonrio. -Si, yo mañana se la llevó a las 5:00am. -colgó.
-Ya esta -dejo mi teléfono en el sillón.
-Que te dijo?
-Pues que en donde estabas, pero pues ya quedo todo claro -sonrio.
-Temos 2 horas -solté con chulería.
-Pero mañana tenemos que trabajar -dijo a la defensiva.
-Aja, pero, yo se hacer un café que levanta hasta a los muertos -susurré a centímetros de su boca.
-Ok, ven -me jalo y me llevó a su  habitación.

Me recostó en su cama y comenzó a besarme lento, y tan sensual a la vez que mi entrepierna ya debe de estar derritiéndose. Me ayudo a ponerme de pie, me desnudo lento, a diferencia de hace rato, parece que hasta le pesa hacerme daño. Comenzó a dejar besos en mi cuello, y fue bajando por mi piel desnuda hasta llegar a mi vagina.

Mierda, ahora no le dije nada.