—¿A dónde crees que vas? —preguntó James Potter desde el sillón de la sala, mientras leía El Profeta con tranquilidad.
Harry tragó saliva con discreción. Desde hace dos días que no sabía nada de Tom y se encontraba preocupado y -¿cómo dudarlo?- iba a ir a visitarlo.
—Voy a la tienda...
—Podemos decirle a Damian que nos traiga las cosas desde la tienda. Recuerda que no puedes salir —comentó su padre bajando el periódico y mirando a su hijo.
—Sólo voy por una varita de regaliz, no creo que sea muy peligroso salir por ellas...
—Lord Voldemort ha estado más de dos meses viniendo a Gryffindor sin que nadie se dé cuenta, ¿crees que no hay peligro? —gruñó su padre— Ah, ya entiendo, ¿será porque tú y el desgraciado son amigos?
—¿Estás diciendo que...?
—¡No quieras hacerme el estúpido, Harry! —gritó el ojicafé molesto— Te he estado vigilando, pero últimamente te has acercado mucho a él, ¡no puedo permitirlo!
—¡No ha hecho nada malo!
—¡Te ha estado desviando! ¡Se supone que debas ser quien traiga paz a la manada, no dejar que un vampiro te controle! —James ya se encontraba parado, cara a cara contra su hijo.
—¡¿Y quién dijo que yo quería conseguir paz?! —gruñó molesto— ¡Esta manada sólo me ha despreciado! ¡¿Por qué seré yo quien los salve?!
La casa se quedó callada después de esas palabra. Lily, quien acababa de bajar para ver porqué tanto ruido, miraba la escena con asombro, mientras que James se mordía la lengua ante lo dicho.
—Ellos no te desprecian, sólo... sólo no saben cómo demostrar su aprecio —comentó Lily tratando de apaciguar la discusión.
—He visto a madres darle amor a sus hijos, parejas mirándose con aprecio, amigos abrazándose... ¿y me estás diciendo que no saben demostrar amor? —siseó molesto— Desde que Sirius y Remus se fueron a no-sé-dónde pareciera que no hay alguien aquí que me aprecie de verdad.
—¿Qué dices de nosotros? —preguntó James— ¿Nos dirás que no te queremos?
—Mamá es de naturaleza amable, no podría decir algo de ella, pero de ti, padre —escupió la última palabra con enojo—, me tratas como si fuera el arma más poderosa de todo el mundo la cual estarías dispuesto a dañar con tan solo salvar a tu estúpida manada.
—¡Yo sí te quiero!
—¡Pues no es mi culpa que parezca lo contrario! —gritó el menor completamente molesto.
—¡No es mi culpa que me haya tocado un hijo tan estúpido! —gritó James al borde de la furia.
—¡James! —regañó Lily mirando al azabache menor con preocupación.
El nombrado colocó una mirada aterrorizada en su rostro al darse cuenta de lo que había dicho, su pequeño cachorro le estaba mirando con la cara llena de tristeza. Una tristeza que nunca había visto en los ojos del menor.
—Harry... No... Yo no...
—Está bien —interrumpió Harry dejando caer dos pequeñas gotas de sus ojos—, al final, yo no pedí nacer, ¿sabes? —esas palabras fueron suficientes para que los sollozos empezaran a escapar de su boca, y ni su mano tenía el poder de callarlos.
Salió de su casa corriendo, siendo perseguido por el mayor, pero sólo entrar entre los árboles se perdió de vista, mas eso no implicó que se detuvo. Harry no sabía a dónde iba, sólo quería irse de ahí, ¿de qué servía estar en una manada dónde ni tus padres te quieren? Negó con la cabeza.
Salió de los terrenos para seguir corriendo, debía encontrar un lugar donde fuera aceptado. Querido.
Oyó unos gritos atrás de él, pero no le dio importancia. Seguro era su padre.
—¡Eh! —ese grito se oyó cerca y, justo cuando iba a acelerar su velocidad para no ser atrapado, unos brazos le sujetaron la cintura.
Se removió de manera brusca, tratando de liberarse de los brazos que lo atrapaban. Dio media vuelta para soltar un golpe a su captor, pero éste simplemente le sujetó los brazos.
—Hey, Esmeralda, tranquilo —susurró. Harry sólo pudo aventarse al cuerpo ajeno para abrazarlo y sollozar en su hombro, ¿cómo es que Tom siempre estaba cuando lo necesitaba?—. Aquí estoy, mi Esmeralda —murmuró con voz suave mientras le acariciaba el cabello.
♣ ♣ ♣ ♣
Tan, tan, taaaaaaaan...
PREGUNTA: ¿Qué creen que pasará?
Ya se me había olvidado publicar, perdón por eso nwn"
Espero lo hayan disfrutado ❤
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Esmeralda.
FanfictionLos hombres lobo y los vampiros no se llevan, ¿verdad? El vampiro debe estar perdido... Sí, en definitiva. Los personajes pertenecen a la escritora J.K. Rowling. Temática chico x chico. Si nunca has leído este tipo de historias, ¡anímate! Nada pierd...