|| Diecinueve ||

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El sol parecía molestarle, no sabía exactamente porqué, pero lo había. Oyó un fuerte ruido antes de despertar completamente, ese ruido fue tan fuerte que no parecía haber sido un accidente. Se levantó con rapidez, sintiendo el mareo llegar a su cabeza con pesadez, volviéndolo a dejar dentado en la agradable cama... Alto, ¿cama?

Miró alarmado a su alrededor tratando de recordar con urgencia dónde estaba, de recordar todo. Pero poco bastó para desear no haberlo hecho.

Los recuerdos se amontonaron en su mente, y junto a ellos lágrimas. De un momento a otro sintió unos agradable brazos rodearlo con cariño. El hombre se sentó en la cama y lo acomodó entre sus piernas, como si tratara de refugiarle de la horrible realidad que significaba su vida, y se dejó llevar ahí, en los brazos de aquella persona con olor a agua dulce y naturaleza pura.

—Tranquilo, Esmeralda —susurró en su oído mientras empezaba a acariciar su cabeza con cuidado, fue un susurro tan bajo que Harry no podía entender porqué lo escuchó—. Todo está bien, yo estoy aquí. No dejaré que te vuelvan a hacer daño.

—Tom —ronroneó el menor con satisfacción al sentir como los finos dedos peinaban sus cabellos con parsimonia.

—Shh, querido —murmuró acercándolo aún más a su cuerpo.

Harry no sabía qué pasaba, pero ya no importaba algo en absoluto. Lo que transmitía Tom era más que necesario para calmarlo, como una droga que recorría cada una de sus moléculas y las acariciaba con éxtasis.

—Me había asustado, Esmeralda —declaró el mayor con suavidad—. Entendía lo que tenías, pero la preocupación me segó a tal punto que Severus me tuvo que explicar todo.

—¿Qué pasó? —balbuceó luchando con las ganas de volver a dormir.

—Te dormiste cuando estábamos en el lago, parecías tener un mal sueño —contestó—. Me diste un gran susto, no lo vuelvas a hacer —regañó. El aliento chocó contra el cuello del licántropo, provocando un pequeño escalofrío en él.

—Era un mal sueño —Harry afirmó con pesadez—, un muy mal sueño.

El pelinegro asintió con cuidado y se recostó en la cama, tirando con sigo a Harry, quien gustoso se acomodó entre los brazos del contrario, sin saber exactamente porqué se sentía así.

—¿Cuánto llevo dormido?

—Una semana —contestó el líder de Slytherin. Harry se tensó ante eso, él no solía dormir tanto, sin mencionar que era propenso a levantarse con cualquier cosa, aunque, bueno, Slytherin era muy tranquilo, mas no explicaba el dormir 168 horas seguidas—. Tuviste tu herencia —comentó Tom como si leyera sus pensamientos—, por eso has dormido tanto.

—No es normal dormir una semana, la mayoría de las personas duermen entre uno a dos días...

—Es porque no eres normal, Esmeralda —comentó—. Ya te lo había dicho, lo normal es para aquellos que se conforman, que están dispuestos a pertenecer a un mismo lugar, seguir los mismos pasos de alguien, ser como los demás, todo por una división social que nos separan de ellos. Tú no eres normal. Yo no soy normal. En todo caso, si fuéramos normales no estaríamos aquí, al lado del otro.

Harry movió su cabeza para lograr ver los ojos del mayor, aquellos ojos fríos que incendiaban tu interior por más tonta que la idea sonara. Ojos que demostraban determinación y confianza, amor y cariño. Todo en una misma persona.

Y su pecho se incendió.

El calor recorrió después todo su cuerpo como aquella persona que en medio invierno se acerca a una fogata abrasadora, tan cariñosa y acogedora en contraste a su alrededor.

—Y tú eres mi pareja —murmuró el menor mirando los zafiros con tranquilidad, no como quien descubre una verdad realmente asombrosa, sino como aquel que siempre lo supo y lo pospuso hasta el momento adecuado.

Tom simplemente asintió.

—Como tú eres la mía.

  ♣ ♣ ♣ ♣  

¡Sorpresa!

Hice un pequeño especial ya que hoy, 16 de octubre, es mi cumpleaños... bueno, no mi cumpleaños en sí, pero sí el día que hice esta cuenta, hace un año que lo hice y tenía que festejar de algún modo, ¿no? ¿Qué mejor forma que subiendo capítulos?

 ¡Les amooooo!

PD: Les invito a leer mis otras historias, he sacado una nueva llamada "El amante", historia corta. Espero que les agrade

Esmeralda.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora