Las nuevas enemigas de Konoha ©

Capítulo 28

—Aquí es—dijo Tenten, observando aquella entrada.

Era la segunda vez que estaban ahí. Era la segunda vez que sentía miedo al entrar en aquella guarida. ¿Cómo su amiga soportaba dormir las noches ahí?

—Ahh~ Esto me recuerda a cuando Sakura-chan, Sai y yo fuimos a buscar a Sasuke, ¿verdad, Sai?

—Sí. Aunque recordemos que el Capitán Yamato también estaba—sonrió.

—Yo...—la rubia Yamanaka no sabía qué pensar. Parecía haber sido la única en ver el miedo que aquella castaña tenía. Aquella, que era la líder, y por ende, la fuerte. ¿Cómo debería actuar si Tenten estaba asustada?

No.

—Juntas para siempre, Ino-puerca. ¡Ni creas que me separaré de ti! Seré como un maldito grano en el cuelo, ¿me entiendes?

Cerró sus ojos, visualizando a aquella chica en su mente. Su sonrisa, sus lágrimas... Ella pudo, más que Sasuke, ver cómo se esforzaba una y otra vez. Pudo ver sus entrenamientos contra Tsunade. Pudo ver cómo se centraba al cien por cien para curar a alguien. ¡Pudo ver cómo daba su vida cientos de veces por gente que ni conocía! ¿Cómo debía abandonarla?

La rubia calló. No quería que temblara. No en esos momentos. Dio un paso al frente y colocó una mano sobre el cabello de Tenten.

—No te preocupes, Tenten-chan.

—Está bien, líder, ¿cuál es el plan?

La castaña se enrojeció algo aquellas palabras. Que el sexto le tratase como líder era algo vergonzoso. Pero, no había tiempo para darle importancia. Debía de planear algo.

—¿Estás bien?—le preguntó Neji.

—A nadie le importa—contestó Sasuke—. No tenemos prisa. Así que, dinos ya el plan o entraré sin é-

—¡Sasuke-kun!—regañó Ino.

—L-Lo siento chicos... pero Sasuke tiene razón—apoyó el Uzumaki—. No dicho de esa manera, claro, pero sí que debemos darnos prisa. Así que, ¿estás bien?

La castaña miró a su equipo. Hyuga Neji, Yamanaka Ino, Yamanaka Sai, Uzumaki Naruto, Uchiha Sasuke y Hatake Kakashi. No todos dependían de ella. Es más, eran independientes. Se protegerían, no había duda.

¿Y todo por qué?

Tenían sitios a los que volver. Familias. Amigos. Sueños.

—Naruto y Sasuke irán juntos—dijo la castaña, preparándose—. Seguramente Reiko pueda notar tanto chakra, así que debe imaginar que somos muchos. Y no se equivoca. Pero... con el chakra de Naruto podemos camuflarlo. Además, él ha escuchado hablar de vosotros.

—¿Una especie de señuelos?—preguntó el Uchiha.

—No del todo. Iremos por turno.

—¿No será mejor atacar todos juntos?—dijo, aquella vez, Neji.

—Claro que lo es. Y así será. Al menos, todos vosotros. Yo esperaré aquí a que Ino me informe con su jutsu que puedo entrar.

—¿Cuándo entrarás?—preguntó la rubia.

—Cuando Reiko muestre venas por su alrededor. Así como... el Byakugan, pero por todo su cuerpo. En ese momento avísame de inmediato. Yo apareceré.

—¿Así, sin más?—añadió el sexto Hokage.

—No, claro que no. Entraré sin el anillo.