capitulo 32

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Dixie

—No Meg, eso no es cierto.

— claro que lo es y también es verdad que no me tienes la suficiente confianza porque no quieres decirme lo que es tan importante como para no salir conmigo.

—si te tengo mucha confianza Meg, eres como mi hermana ¿ como no la tendría?, Si no te digo el porque no puedo salir contigo es porque es una sorpresa, algo que James y yo le estamos preparando a todas las personas que amamos.

—Dixie lo siento, si me lo hubieras dicho antes ...

— no lo se Meg, acabas de decir que sientes que ya no soy la misma, eso me hirió, también que pensarás que no te tengo la suficiente confianza, creo que será mejor que aclaremos todo, ¿estarás hoy en tu departamento?

— siento tanto haber dicho todo eso y si, estaré en mi departamento.

—entonces llegaré para que arreglemos todo esto, y podríamos ver una película ¿ está bien?

—me parece bien— sonríe

—okey, debo irme, nos vemos luego y recuerda que te quiero— me acerco a abrazarla.

— yo también te quiero.

Nos despedimos y camino hacia la salida. En estos momentos es donde más debo de entender a Meg, ella ha estado tan estresada​ con todo lo de Mathew, lo mejor es estar para ella y tratar de entender... me exaltó cuando siento unos labios impactar contra mí​ mejilla.

— hey Dixie, ¿que tal las vacaciones? — pregunta Jhon, Jhon digamos que es el más más guapo de la universidad, todas las chicas están locas por el, pero yo, yo no lo estoy, yo estoy​ loca por mi sexy anciano, Jhon solo es una mujeriego, ¿pueden creer que un día me dijo que deseaba llevarme a la cama ?, Es un estúpido

— muy bien Jhon, si me disculpas, debo irme—digo cortante.

—espera nena, ¿ no quieres ir a tomar algo?— me toma de la mano

— no gracias, llevó prisa—me suelto bruscamente de su agarre

—vamos Dixie, solo serán unos minutos— estoy a punto de hablar cuando escucho una tos falsa, volteo y ¡ mierda! James se encuentra con una cara de pocos amigos, se acerca y me planta un beso en los labios para luego tomarme de la cintura.

— te he estado esperando cariño—habla mientras le da una mirada intimidante a Jhon

— estaba charlando con Meg, pero ahora ya podemos irnos— lo tomo de la mano— adiós Jhon.

—adiós nena, luego podemos salir a tomar algo— tan insistente.

Caminamos hasta el auto en silencio, observo a James, y su mandíbula se encuentra tensa.

— James eso n...- no me deja hablar porque me acorrala contra la puerta del auto.

— no sabes lo mucho que me jode que ese tipo te diga nena— se acerca a mis labios

—y no sabes lo mucho que me jode que las mujeres te queden viendo el trasero cada vez que salimos de compras—hablo de la misma forma que el, acercándome a sus labios.

— sabes que soy tuyo, solo tuyo hermosa

—y yo soy tuya, así que no tienes porque estar celoso—acarició su mejilla.

— tú tampoco debes de estar celosa, soy completamente tuyo— me besa ferozmente, siento su erección acariciando mi entre pierna lo cual hace que suelte un pequeño gemido.

— cariño, nos están observando— logro susurrar

—tienes​ razón, es mejor que nos vayamos, recuerda la cita — subimos al auto y emprendemos camino hacia el consultorio.

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—Cariño, ¿ lo escuchas? —sonrió miéntras lloró a mares

— claro que lo escucho pequeña, es lo más hermoso que he escuchado en mi vida—se agacha un poco hasta llegar a mi frente y deja un dulce beso, cierro los ojos cuando junta nuestras frentes—gracias, gracias por hacerme el hombre más feliz del mundo, por darme este hermoso regalo, grácias por aparecer en mi vida cariño, te amo—abro los ojos y veo como algunas lágrimas caen por sus mejillas. El sonido de su corazón inunda toda la habitación​, es hermoso, mi bebé, aún no lo creo, ¡ seré mamá!, Éstoy ansiosa por decirle a los demas.

— bueno, no hay de que preocuparse, el embrión se encuentra bien, aunque nunca está mal tomar algúnas precauciones señorita Denovan, debe evitar el estrés, no puede tomar bebidas alcohólicas, ejercicio de alto impacto.

—gracias​ doctora, lo tomaré en cuenta—digo levantándome de la camilla

— no hay de que, nos vemos en la próxima cita — se despide con una amable sonrisa.

Salimos del consultorio y nos dirigimos al estacionamiento. En el camino a casa de Meg no dejamos de sonreír, James, el está ansioso, me encanta verlo así tan feliz.

— ya quiero tenerla en mis brazos cariño, me la imaginó con tus ojos, tu nariz, con el color de tu cabello, una mini Dixie—reímos— deseó sacar los viejos libros que nos leía mi madre a Mila y a mi cuando éramos apenas unos niños y ahora ser yo quien se los lea a nuestra pequeña, nuestra hija.

— todo esto es tan hermoso James, verás que en un abrir y cerrar de ojos tendremos a nuestra pequeña en nuestros brazos— acerco mi mano a su rostro para acariciar su mejilla mientras el se concentra en la carretera.

— ¿ que deseas hacer para tu cumpleaños?- pregunta— Solo faltan dos días.

— no lo sé — me encojo de hombros— creo que nada, solo quiero quedarme en casa contigo y ver alguna película o algo así.

— cariño, respecto a eso... Debo de viajar a París mañana para resolver algunos asuntos de mi empresa y quizás esté ahí por una semana, lo siento.

— no James, eso significa que no estarás conmigo en mi cumpleaños​ era la primera vez que íbamos a celebrar mi cumpleaños​ juntos, esto... Esto no es justo—lloró. James estaciona el coche justo al lado del edificio de Meg, se quita el cinturón de seguridad y se acerca a abrazarme

— tranquila, veré qué hago para resolverlo, pero no llores hermosa, lo resolveré.

El Socio De Mi Padre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora