-No... en realidad, no tienen ningún problema, sólo queremos ir a jugar y descansar un rato a donde ustedes se encuentran... Jajajaja
Una voz seca y sarcástica, habló está vez, era muy obvio que estaba con María en ése momento.
-Quién demonios eres? Llegas a tocarle un pelo a mi prima te mató.
Rugió por la radio el latino con bronca e impotencia.
-Calma amigo, tu primita está bien, pero no por mucho tiempo si no nos abren la puerta, tomensen cinco minutos para pensarlo, yo y mis muchachos esperaremos afuera.
-Qué hacemos?
Preguntó asustada Mei.
-Tienen a María, no podemos arriesgarnos.
Respondió furioso el enojado y nervioso primo de la rehén.
-Pero que nos asegura que no querrán matarnos?
Consideró el teniente, muy preocupado.
-Preguntales cuantos son...
Le ordené, él obedeció sin dudarlo.
-Yo y mis amiguitos somos seis.. ¡Tic-tac tic-tac...!... No nos gusta esperar mucho, tienen tres minutos y medio...
Tranquilamente, nuestro interlocutor hablaba de una forma modesta, pero agresiva.
-Bajaré...
Nos informó, derrotado Javier, lo comprendí, María era lo único que le quedaba en el mundo.
Sé muy bien que si fuera Marina, en su lugar, yo haría lo mismo.-Espera... esto es lo que haremos...
En tres minutos diseñé un plan que nos podría salvar la vida, un plan tan detallado y elaborado que por un momento dudé que fuése mío.
A los minutos, María y su primo entraron por la puerta del apartamento con las manos en alto.
Tras ellos un grupo de seis hombres armados nos ordenó tirarnos al suelo.
-Quién es el anciano?
Preguntó quién parecía ser el líder, señalando al teniente que estaba sentado frente a la ventana,con una manta en sus piernas, salibandosé la camisa y fingiendo estar demente, con la mirada pérdida en el cielo.
-Mi abuelo, quedó loco, estuvo en la guerra de Vietnam y no puede caminar... por favor no lo dañen.
Mentí como parte del plan.
-Claro que no, joven. Respeto a los veteranos.
Alegó el hombre armado.
-Mi nombre es Giovanni y soy un hijo de Lucifer. Al igual que mi muchachos. Jajajaja.
Sólo veníamos por una cervezas o algo para beber.-Tomen lo que quieran no nos oponemos...
Exclamó Xing, con temor en su voz.
-Éso Ya lo sabemos!!...
Gritó Giovanni mientras se acercó a el pobre asiático que yacía en el suelo y lo pateó en el rostro...
La rabia que sentí en ése momento me hizo temblar...
Más aún cuando el resto de nuestros atacantes se echaron a reír.-Maldito...
Gritó Mei levantándose y abofeteando al agresor de su hermano.
En ése instante temí que mi plan se fuése por la borda, pero decidí no actuar aún.
-Huy ésta dama si sabe pegar...
Riendo y tomando el rostro Giovanni gruñó.
-La perra, necesita aprender modales...
Le dió un puñetazo en el estómago a la pobre mujer asiática dejándola arrodillada frente a él..
-Lo ven? Ahora hasta me lo quiere mamar...
Exclamó el violento sujeto riendo exageradamente.
-Te mataré hijo de puta...
Enardecido, Christopher se levantó a pesar de que media docena de armas le apuntaban.
Detrás de él un sujeto calvo y mucho más grande, que el encolerizado novio de Mei, lo golpeó con una escopeta haciendo que volviera al piso.
-Chicos delen una lección al negrito también.
Al decir eso cinco hombres empezaron a patear al infeliz Christopher.
No pude seguir en el suelo mirando cómo masacraban a UNO DE LOS MÍOS.
Aprovechando la distracción saqué un cuchillo que había escondido en los trapos que inmobilizaban mi brazo y lo colgaba a mi cuello.
Me paré sigilosamente y apuñalé a Giovanni quién seguía frente a Mei, dándome la espalda.
El cuchillo entró en su costado y ante su alarido de dolor, sus hombres giraron.
En ése levantándose de la silla, el teniente sacó un revólver que guardó bajo la manta y con su precisión militar mató a todos los amigos de Giovanni.
(…)
-Soy un hijo de Lucifer!!
Gritaba nuestro prisionero atado a una silla. Mi puñalada no lo había herido de gravedad.
Y tampoco tenía hemorragía.-Mi amo, me buscará y los asesinará a todos... Sólo hasta después de que vean como violamos a esas perras hasta que den tanto asco que ni el virgen más lujurioso quisiera tocarlas...
Le dí un golpe tan feroz que le rompí la nariz, no soportaba oír a ésa escoria referirse así a una mujer, me imaginaba que el desgraciado podría referirse a mi hermana.
-Thomas le puedo preguntar algo?.
-jajaja James, puedes decirme teniente, como todos lo demás.
Tu plan nos salvó de esas bestias.Respondió alegremente mi gran nuevo amigo.
-Puedo matar a esta basura?
El teniente me miró sorprendido, no esperaba que yo manifestara deseo de matar a alguien.
-Bien o mal, matar es matar, nunca podrás remendarlo.
Seguro que no deseas que yo lo haga?-Entiendo su sentir, pero debo hacerlo yo mismo por favor.
-Bien.
Xing con la boca partida atendía en la cocina a Christopher, quién al perecer tenía contuciones y hematomas pero nada serio a pesar de la paliza recibida.
-Teniente una cosa más... lo puede llevar a su habitación? Quiero hacerle unas preguntas a nuestro invitado.
-Claro.
____________________________________________________________________
ESTÁS LEYENDO
Cazadores De Zombies
Ciencia FicciónNo pude salvar a mi madre, proteger a mi hermana ni ayudar a mi amigo... Pero ahora llegó el momento de reivindicarse. Junto a este pequeño grupo de personas lucharemos por salvar lo que queda de la humanidad. Vamos a demostrar que somos los Cazador...