「 s i e t e 」 [II]

5.1K 612 96
                                    

Bueno, Mingyu confundió a Jimin con una chica de cabello corto.

Básicamente, la vio de espaldas y asumió que se trataba de Jimin. En realidad, noté que no era él desde el comienzo, pero creí que sería más divertido si no hacía nada por detener a Mingyu.

Decisión acertada, definitivamente.

La chica incluso le pidió su número.

—¡No es gracioso! —Lloriquea golpeando su frente en mi hombro.

Llevábamos al menos diez minutos sentados en los peldaños de una escalera, Mingyu lamentando su existencia y yo intentando detener mi ataque de risa. Y también buscando a Hoseok. Eso era importante.

—¿Hola? Sí, perdón por molestarte con mi amistad, pero en serio necesito algo de apoyo moral aquí. —Refunfuña otra vez. Me giro hacia él con las mejores intenciones, pero entonces veo sus mejillas apachurradas debido a que está literalmente desparramado sobre mí brazo y el ataque de risa vuelve.

Le doy unas palmaditas en la espalda cuando logro recuperar la compostura. Siento las mejillas calientes por culpa de la risa, y probablemente mi cabello debe estar bastante desordenado.

Mingyu hace un puchero y patalea como todo un bebé adolescente para llamar la atención.— ¡Debí haber notado que no era Jimin! Él nunca salía de fiesta entre semana.

Me encojo de hombros como diciéndole "Bueno, eso es cierto."

Mingyu hace amago de volver a lloriquear, pero entonces se me queda viendo con expresión de espanto.

¿Pero qué...?

Pone ambas manos en mis hombros con fuerza y abre los ojos como platos, mientras mi cabeza comienza a dar vueltas formulando teorías.

—Minnie...—Murmura como si estuviera a punto de decirme que mi madre está aquí. Lo cual sería muy extraño teniendo en cuenta que no tengo madre.— Mañana...tienes escuela.

Suelta lo último casi en un suspiro. Primero me quedo en blanco, luego siento la risa subiendo por mi garganta y finalmente le doy un fuerte golpe en el brazo para que se aleje.

Ruedo los ojos y me pongo de pie. Si me quedo voy a asesinarlo por el susto innecesario que me dio.

—¡Oh Sun Min! —Lo oigo gritar a mi seguidilla.— ¡Mañana tienes escuela y sigues aquí! ¡Es casi medianoche!

Saco el móvil de mi bolsillo con incredulidad; es imposible que ya sea media noche.

La pantalla de enciende y entonces se desata el caos.

Primero veo la hora.

23:54 pm

Y luego, las notificaciones.

Son trece llamadas perdidas de papá, ocho llamadas perdidas de Yoongi y...dieciocho de Taehyung.

Esto es demasiado coincidencia. Ni siquiera hay espacio en mi cabeza para evaluar la posibilidad de que Taehyung me haya traicionado y acusado con papá. Él no lo haría. Jamás. ¿Cierto?

Ya es extraño que me hayan llamado, porque claramente es inútil. Así que solo hay una opción, y es que papá sabe dónde estoy y no le gusta la idea.

talk - jhopeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora