Always [Romione]

Familia Granger

Cuando llegamos Harry y Ginny se habían encargado de poner la mesa y George ya había llegado de la tienda junto a Angelina. Llegamos justo a tiempo de que yo me duchara y cambiara de ropa, ya que después llegó Molly y unos minutos más tarde Arthur desde el Ministerio.

- ¡Buenas tardes familia! - dijo Arthur soltando su maletín.

- Hola querido - dijo Molly dándole un beso corto - Vamos sentaos todos que sino la comida se enfría.

La comida transcurrió con normalidad y rapidez, ya sabéis todos del don Weasley para comer muchísimo en poco tiempo y sin engordar. Cuando terminamos yo me disculpé y subí al cuarto de Ginny para meter las últimas cosas en mi bolsito de cuentas. También aproveché para dejarle a Ron en su cuarto una carta que le había escrito, le iba a echar mucho de menos.

Ya eran las 16:00 mientras bajaba las escaleras para encontrarme en el salón con Ginny apoyada sobre Harry y ambos dormidos. Sonreí, no iba a molestarlos para que se despidieran de mí. No veía a Ron por ninguna parte, de seguro que se había olvidado y estaba durmiendo en su cuarto o vete tu a saber.

Me despedí de los señores Weasley que se encontraban en la cocina.

- Pásalo bien Hermione y dale recuerdos a tus padres - me dijo Arthur abrazándome.

- Gracias Arthur - dije - si necesitan mi ayuda o surge algún problema no duden en avisarme.

- Tú no tienes que preocuparte de nada querida, ahora sólo disfruta y descansa un poco de este mundo - dijo Molly dándome un abrazo - Te echaremos de menos, en especial Ronald.

- Y yo a ustedes - dije sonrojándome.

- Por cierto, ¿ Dónde anda este hijo mío? - preguntó Molly - no me digas que no se ha despedido de ti.

- No sé dónde está y no, no se ha despedido - dije apenada.

- Cuando lo vea se va a enterar - dijo Molly - pero no se lo tengas en cuenta, ya sabes que él te quiere con locura.

- Lo sé - dije convencida - y yo a él, adiós.

Salí por la puerta trasera al jardín, me alejé un poco de la casa para poder desaparecerme. Cuando ya me encontraba a una distancia considerable cerré los ojos y cuando iba a imaginar un lugar cercano a mi casa algo me agarró y tiró de mí hacia los árboles.

Me asusté muchísimo, abrí los ojos lentamente y me encontré con unos conocidos ojos azules que me miraban fijamente.

- ¡Ronald! Me has dado un susto de muerte - dije enfadada.

- Lo siento, pero era la única manera de que nos despidieramos a solas - dijo sonriente - Vamos, no pensarás que iba a dejar que te fueras sin besarte una vez más.

- Eres un idiota, Ronald Weasley - dije riendo.

- Y tú una enfadona Hermione Granger - dijo besándome - Te quiero, por Merlín que te quiero.

Continuamos besándonos un poco más hasta que en mi reloj sonó la alarma de las 17:00, hora en la que había quedado con mis padres.

- Ron, tengo que irme, mis padres me esperan - dije intentando dejar de besarlo.

- Está bien, sólo un beso más - y dicho esto me besó, pero esta vez con más fuerza.

Para devolverle lo del susto lentamente introduje mi lengua en su boca sorprendiéndole al principio, pero luego él imitó la acción y justo en ese momento me separé de él.

Corrí hasta donde me encontraba antes y lo miré, se había quedado pasmado y completamente rojo.

- Ron - lo llamé y me miró a los ojos- te quiero.