Always [Romione]

Los hombres Weasley

Aviso: Este capítulo estará escrito desde el punto de vista de Ron

Cuando la vi desaparecer por la puerta del jardín se me cambió completamente la cara. Por Merlín, ¡mañana iba a conocer a los padres de mi novia! No estaba preparado para nada, estaba demasiado nervioso. ¿Y si no les parecía suficiente para su perfecta hija? ¿Y si esperaban que fuese de una mejor familia? ¿Y si no llegaban a quererlo tanto como su familia la quiere a ella? Todas esas dudas atormentaban la mente de Ron mientras subía a su cuarto a vestirse.

Cuando llegó arriba se encontró a Harry vistiéndose con ropa de calle. Entró sin articular palabra y empezó a buscar ropa en su armario.

- Buenos días a ti también eh - dijo Harry abrochandose los cordones de las zapatillas.

- Ah, buenos días - dijo Ron cogiendo una camiseta.

Harry se extrañó de ver a su amigo tan serio de repente.

- Ron, ¿te ocurre algo? - dijo el azabache.

- ¿A mí? - dijo mientras se quitaba la camiseta - nada, ¿qué va a pasarme?

- Te noto un poco nervioso.

- ¿Nervioso yo? ¿Por qué será? Ah sí, tal vez porque Hermione acaba de decirme que mañana vamos a comer a casa de sus padres porque quieren conocerme - dijo mientras se ponía unos pantalones cortos - ¿Te parece un motivo suficiente para estar nervioso?

Ron tenía la cara pálida y le temblaban las manos mientras se ponía los calcetines.

- Joder Ron, es un paso importante en la relación, ¿eh?.

- ¿Importante? Por todos los magos Harry esto es acojonante, me da más miedo que destruir un horrocrux, más miedo que mamá cuando está enfadada - dijo mirándolo a los ojos.

- Tranquilo amigo, seguro que después no es para tanto.

- Oh, ¿gracias? Lo dices porque para ti ha sido fácil. Mis padres te conocen desde pequeño y nunca han dudado de que serías el chico perfecto para su pequeña hijita. En cambio yo, no soy el chico perfecto para Hermione, está claro.

- Pero, ¿cómo puedes decir eso Ron? Hermione te quiere con locura y tú a ella, he visto como os miráis y la sonrisa que tienes cada vez que estás con ella. Eso es lo más importante.

- Ya pero, no soy el mago más brillante como ella, ni tampoco un deportista famoso como el estúpido de Krum, un chico guapo como McLaggen ni vengo de una familia especialmente pudiente - dijo resignado - hay cientos de tíos por ahí mejores que yo para Hermione.

Harry se acercó a su amigo y le miró a los ojos.

- Pero ninguno consigue que Hermione se sienta segura como tú lo haces Ron. Ella te adora, se siente contigo como en el lugar más tranquilo del mundo y solo vosotros dos sabéis lo que habéis pasado para conseguir estar juntos. ¿De verdad conocer a sus padres va a echar a perder todo lo que tienes con ella?

Ron se quedó pensando reflexivo sobre lo que su amigo le acababa de decir. Su padre siempre le había dicho que el amor era la fuerza más importante y lo que mueve el mundo. Él tenía claro que estaba enamorado de Hermione y con eso era más que suficiente como para plantarle cara a sus padres y demostrarles que era el yerno que querían para su hija.

- Tienes razón Harry, muchas gracias por todo, siempre sabes que decirme.

- No tienes que darlas, mucho ánimo hermano - dijo dándole una palmada en la espalda.

Ron iba a coger la mochila cuando recordó algo.

- Oye Harry, ¿por qué te has vestido así de arreglado?