Cuarta carta

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Seungcheol llegó al instituto emocionado; tenía ganas de ver a Jisoo con su nuevo color de pelo.

Estaba tan emocionado que casi se olvidó de la carta, pero al final la cogió y se la metió en el bolsillo. Ya la leería más tarde, en ese momento no le apetecía estar de malhumor.

Fue corriendo hacia su aula ganándose un par de regaños y al llegar se quedó con la boca abierta.

El pelo de su amigo era ahora de un color rosa asalmonado y se veía completamente sexy con sus gafas de lectura concentrado en el cómic que estaba leyendo.

Se apoyó en la pared a unas mesas de distancia y se lo quedó mirando por unos minutos hasta que éste notó su ausencia y levantó la vista para encontrarle mirándole.

-¿Qué?¿Te gusta?

Seungcheol se acercó y arrastró una silla para sentarse a su lado.

-Mucho. Te ves caliente con ese pelo y las gafas.

Incluso si estaban acostumbrados a soltarse cumplidos entre ellos, Jisoo se sonrojó hasta quedar del mismo color que su pelo.

El mayor rió y se acercó a olerle la cabeza.

-Hueles bien.

Jisoo le empujó lejos- ¿Acaso soy una planta para que me huelas así?

Con una sonrisa burlesca, Seungcheol le contesté- Nah, las flores huelen bien cuando no están podridas, tu ya estás podrido por dentro desde hace tiempo pero sigues oliendo bien.

Esa vez le soltó un buen golpe en la mejilla.

Aunque dolía, el moreno rió- Hey, hey, pero sigues siendo sexy y hermoso. Eso lo compensa casi todo. Hasta me dan ganas de besarte.

Jisoo levantó una ceja algo sonrojado- Pues hazlo.

-¿Y arruinar nuestros títulos de solteros de oro delante de toda la clase? Nah, no le voy a quitar las ilusiones a las chicas.

Ambos rieron hasta que Jisoo apoyó la barbilla en sus manos y miró a su amigo- Bueno...¿y qué tal tu admirador?

Seungcheol resopló y le tendió la carta.

-Léela tú.

Con una risa, Jisoo la tomó y se aclaró la garganta para leer con voz clara:

"Te odio.

Odio como vas por todas partes sonriendo la gente como si realmente fueras alguien.

¿Realmente te crees importante?"

Seungcheol levantó una ceja y Jisoo le miró sonriendo.

-Parece que tu sonrisa es demasiado encantadora para él.

Ambos rieron y Seungcheol cogió la carta de vuelta.

-Tengo curiosidad por saber qué dice mañana. Tal vez que mi culo es demasiado grande y no le deja pasar por los pasillos.

Una carta por cada cosa que odio de ti [CheolSoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora