¿Los sueños se cumplen? | Juan Pablo Villamil.

Capítulo 12

Michelle
No sabía qué hacer, la presencia de Juan Pablo me hacía sentir nerviosa, lo único que hacía era ruborizarme y avergonzarme cada vez que cruzábamos miradas, él no decía nada solo me dedicaba una pequeña sonrisa, me encanta que lo haga.
Salimos de la cafetería y andábamos silenciosos por la acera, fue él quien rompió el silencio y preguntó; Tú sabes mucho sobre mí pero yo todavía no sé ni tus apellidos, ¿no te importaría contarme algo sobre ti?-él me miraba y yo seguía con la vista al frente-no no es una molestia, respondí.
-¿Qué te gustaría saber?-mientras  hablaba le miraba con atención, la misma que el ponía a cada palabra que salía de mi boca, se le veía concentrado, sonreí al ver su cara de concentración, me estaba dando cuenta de que era muy adorable con cada una de sus extrañas caras.
-Lo esencial, pero si me dejas, me gustaría saber todo de ti-dijo con media sonrisa.
-Pues mira, no sé por dónde empezar, mejor sentémonos en aquella plaza-no me gusta estar de pie-así podemos estar sentados.
Caminamos unos metros y nos sentamos en un banco, con las piernas cruzados y mirándonos de frente.
-En Marzo cumplí 18, el 6. Vivo en Móstoles desde que era pequeña aunque no soy de aquí-miraba en silencio, atento-soy de México. Tengo dos hermanos, pequeños, un chico y una chica. Acabo de independizarme, para estar más cerca de la universidad y no tener que gastarme el dinero en transporte cada día, mi sueño es ser forense o policía criminalista, así que estudio medicina, en la Universidad Complutense, fue difícil llegar hasta ahí, desde bien chiquita sabía lo que quería y centre todo mi tiempo en los estudios aún así no fui la típica nerd sin amigos, mi vida está bien compensada-el río entre dientes, yo hablo mucho y más si me preguntan cosas acerca de mí- y bueno creo que no hay nada más que contar.
-Oh vaya, me quedé con ganas de más-hizo una mueca de tristeza-.
Yo no pude evitar reír ante su gesto y él me acompañó con su melodiosa risa, es contagiosa y a la vez tierna. Es demasiado lindo. Ey, que estoy diciendo, olvídenlo.
-Te haré una serie de preguntas, y tú las responderás y viceversa.
Asentí para dar aprobación y él empezó con su lluvia de preguntas.
-Primero, me contaste muy poco de tu vida, todavía no tengo una idea de quién eres así que,¿cuál es tu color favorito?
En serio Villa, en serio. No sabes preguntar algo mejor. Solo sonreí y respondí: el verde y ninguno más.
-Mmm, ok.¿Cuál es tu número favorito?
- De verdad te interesan esas tonterías, pues son unos cuantos; 5, 6, 7 y el 10 aunque también me gusta el 2, ninguno más son muchos ya jajaja.
-Dicen mucho de ti estas tonterías, por ejemplo, el verde te gusta porque es un color alegre que da esperanza así tú no pierdes la esperanza, los números son fechas especiales,¿o me equivoco?
-Wow, pues no, no eres tan bobo como creía-le pegué en el hombro un golpe suave y él lo devolvió. Empezamos nuestra peleas de empujones hasta que dijo:¿Boxeadora?
-Noooo, no me gusta eso. Veo fútbol, práctico fútbol y amo el fútbol.
Vi como en su rostro se dibujaba una gran sonrisa, supuse que a él también le apisonaba y así fue.
Empezó a hablar de lo mucho que disfrutaba con el deporte, hablaba con gran ilusión como un niño pequeño, solo escuchaba y le sonreía hasta que dijo con desgana; pero juego fatal.
-No jugarás tan mal, yo estoy bueno estaba en el equipo de mi ciudad, me hecharon por vieja. Los dos reímos, no enserio, a los 18 ya no puedes seguir jugando le conté.
-¿Y tú JP que puedes contarme de ti?
-Primero ¿qué sabes?bueno contaré lo que no digo en entrevistas. No fumo y tampoco bebo mucho, tan solo en ocasiones. Soy muy pero que muy goloso, amo la comida y más las cosas dulces-le interrumpí diciendo que yo era #gorda y amaba la comida y también lo dulce. Engordaremos juntos dijo, nuestras manos se rozaron unos segundos y él la quitó inmediatamente.

Ey Villita, podrías no haberla quitado, no me incomodaba.

Eché un ojo al reloj, las 23:47.
Le dije a Villa que estaba cansada y que tenía que irme ya a casa,-¿vives muy lejos, compartes piso con la chica de ayer?
-Ah no, ella es mi amiga pero vive con sus padres. Vivo sola y no, mi apartamento está cerca.
-Te acompañaré-se revolvió el pelo, se veía lindo al hacer eso-si quieres claro está.
-No seas bobo, no es ninguna molestia que vengas conmigo.Pero, ¿vuestro piso está muy lejos? no quiero hacer que camines mucho.
-No te preocupes, tomaré un taxi, yo te acompaño, una chica linda como tú no puedo andar sola a estas horas y menos, por Madrid.
Su comentario hizo que mi mejillas se volviesen rojas, lo notó pero no dijo nada.
Mi piso se encontraba a 15 minutos de aquella plaza, el camino fue muy silencioso, solo hablábamos cuando Villa se interesaba por algún lugar que encontrábamos en el camino.
-Todo es tan diferente a Colombia, pero me gusta.
Cuando dijo esa ya estábamos en el portal y yo saqué mis llaves del bolso, él entró cosa que no esperaba, el ascensor seguía roto y tuvimos que subir unos cuantos escalones, hasta un sexto piso. Nuestro aliento se agitaba y Villita preguntaba si quedaba mucho a lo que yo reía,-no queda nada-dije mientras subimos los diez últimos peldaños,-ya está, aquí es.
-Estoy muriendo- colocó su mano en el pecho e hizo como si moría.
No paraba de reír, al igual que él.
-Qué dramático eres Villita.
Me sonrío y dijo:- bueno ya sé que estás a salvo así que me voy yendo.
-Muchas gracias por guardar mi teléfono, por hacerme pasar tan Buen Día, ah y no me olvido, gracias por invitarme a comer dulces, te ganaste mi corazón. Sonreí. Y muchísimas gracias por acompañarme, que llegues bien, Villa.
-No fue nada- sonrió y revolvió su pelo.
Maldita y linda sonrisa. Lo miré un segundo y le di un abrazo, que bien me siento allí, es mi lugar favorito, allí está mi sitio, entre sus brazos.

Ehhhhhh, fin de capt.
Que pasará después de ese abrazo 😏. No sé no sé, tendrán que esperar, al final un capítulo por día 😩
Espero les guste, no olviden votar 🌚💚
Un abrazo grande grande, AM.