Michelle: No quiero volver a verte Villamil. Después de una semana sigo sin saber nada de él, era un estúpido. No podía sacar de mi mente aquel maldito beso pero no podía perdonarle, había jugado conmigo de la peor manera que se puede hacer, nadie juega con mis sentimientos y él no es la excepción, quien se cree que por ser famoso puede hacer lo que quiera con las chicas, si es así está muy equivocado. De tantas vueltas al asunto acabé descubriendo lo que había pasado, solo me utilizó para poner celosa a su novia, él sabía que iba a llegar a Madrid también sabía que estarían en el restaurante y solo me invitó a salir para que ella nos viese, era un cretino.
–¿En qué piensas chica?–dijo Darío desde atrás–sabes qué mataré a ese tal Juan Pablo en cuanto lo vea así que no pienses más en él, no vale la pena.
–No te preocupes, solo pensaba en que haré desde mañana–intenté sonreír pero seguía sin poder, Villo se llevó todo. –Yo miraré series noche y día, aguantaré a Miguel y leeré doscientos libros y dormiré como un oso, puedes unirte a mi plan si quieres pero no acepto a niñas triste así que alegra la cara. –No gracias, no quiero engordar más jajaja, estaré con mi familia supongo. Pero sí soy una linda y feliz panda–fingí una gran sonrisa a mí que reímos.
–Un poco de respeto a mi clase–regañó el profesor fulminándonos con la mirada.
–Bueno habrá que callarnos, es un pobre calvito infeliz–susurró mi amigo. No pude contener la risa y mientras explicaba su triste tema de genética mis risas se escucharon por toda la clase. Y menos de lo que pensaba el calvito infeliz me había hechado de la clase. Me dirigí a la cafetería, aún faltaban 40 minutos para finalizar el día y tenía que esperar a Darío para volver a casa juntos, revisé mis redes y me encontré con algo que no quería, Alejandro había subido un instastorie con Villa en El Centro Comercial se le veía muy feliz y eso rompió mi corazón, lo único que me hacía feliz era su maldita sonrisa y por desgracia o por suerte ya nunca me sonreiría. Salí de Instagram rápidamente no quería ver más a Villa. Publiqué en Twitter "Parece que al calvito infeliz de Genética no le gusta que rían en su clase. De alguna manera debía entretenerme mientras te espero @dario22_ " acompañado de una foto
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Algunas personas indicaron que les gustaba, incluido Darío. @jpvillamil7 indicó que le gusta tu tweet. Mi teléfono vibró y mi corazón dio un vuelco. ¿Qué acaba de pasar? Revisé mis seguidores y ahí estaba él, con la foto que yo misma le hice en la firma, este chico es tan uff no sé qué decir de él, lo odio. Bloqueé mi móvil y me dirigí a la salida ya que la campana ya había sonado y Darío ya me estaría buscando. Entonces, le vi. Tan perfecto y tan lindo como siempre, pero que estoy diciendo es un completo imbécil. Estaba ahí de pie, con la mirada pérdida entre la gente, removiendo su pelo tan nervioso como siempre, movía su pie, se ve tan lindo al hacerlo. Nuestras miradas por fin se encontraron, él sonrió tímidamente y yo sólo alcancé a ver cómo Darío se abalanzaba sobre él.
–No hagas nada Darío–grité pero él no hizo caso y arrojó a Villa al suelo. Salí corriendo hacia ellos, Darío me dijo que no me metiera y me hizo hacía atrás. –¿Cómo no voy a meterme? Mides 2 metros Darío déjalo en paz–dije furiosa. –Eres un idiota y vas a pagar por lo que le hiciste a Michelle. –Sólo déjame explicarte–noté la tensión en la voz de Villa, parecía preocupado y su mirada rogaba por mi ayuda. –Si de verdad me quieres, no le harás nada. Sabes que lo amo Darío y no puedo permitir que le hagas daño, es un estupido sí pero por favor vete yo puedo arreglar esto sola. –No entiendo Mich, pero lo haré, y a ti idiota ya te cogeré cuando ella no está, da gracias a Dios por esta vez. Darío se marchó furioso, volvió la vista y me miró con enojo. Más tarde tendría que hablar con él pero ahora tenía que hacerlo con Villa,¿qué hacía aquí?, empezó a recoger las rosas y a volver a juntar el lindo ramo que había traído todo estaba esparcido por el suelo y en sus mejillas estaban depositadas algunas lágrimas, me agaché y le ayudé a recoger todo, alzó la mirada y quedamos frente a frente, limpié delicadamente sus mejillas y él susurró el "lo siento" más sincero que había escuchado. Nos pusimos en pie. –¿Qué haces aquí Villamil?–dije con el tono más seco que pude, quería que supiese que aunque hubiese vuelto, seguía enojada con él.
–Quería disculparme y preparé esto con ayuda de Alejandro pero...–le interrumpí.
–Siento mucho lo que acaba de pasar.
–No te disculpes por nada, fue mi culpa el hacerte sufrir él es un buen amigo, solo quiere protegerte y no verte mal.
–Lo conseguiste Juan Pablo, hiciste que todas mis ilusiones se fueran al carajo, hiciste que llorará cada noche por saber que no volvería a besarte, ¿por qué vienes ahora, después de irte sin dar explicaciones? ¿Todavía necesitas restregarme que gracias a mí pusiste a tu novia celosa y volvieron?–mi voz se iba quebrando poco a poco y realmente no quería que me viese llorar así que intenté irme.
–No entiendo lo que dices, estas equivocada no es mi novia hace mucho dejó de serlo y no volvería con ella jamás, porque te amo a ti y si piensas que te utilicé te equivocas, no es eso lo que pasa es que soy un cobarde y no pude decirte todo lo que me haces sentir, me haces mejor persona Michelle, haces que a tu lado todo sea bueno, que contigo puedo ser yo mismo y quizás, mejor. Haces que quiera seguir adelante, pero a tu lado. Lo digo más en serio que nunca. Nunca he querido a nadie como a ti y aunque creas que es una estupidez no lo es, el tiempo en el que llevo conociéndote me has demostrado que sí, que el amor no es una mentira que a veces llega, cuando menos te lo esperas. Y tú eres esa pequeña parte que me dice que luche por amor y no sé tú pero a mí me gusta decir que me enamoré de ti y no pudo pasarme algo mejor, que llegases a mi vida.
Nuestros labios volvieron a juntarse, esta vez en un beso lleno de palabras y sentimientos imposibles de decir hablando. Un beso lleno de amor y miles de "te extrañé"
–Y bien, ¿me perdonarás?–dijo poniendo una cara imposible a la que era imposible resistirse y me extendió el ramo de rosas acompañado de mis chocolates favoritos un lindo panda y lo que parecía una carta.
–Tendré que pensarlo–vi como su expresión se tornaba a triste–bah, es broma claro que lo haré bobo. Le besé la mejilla y él buscó mi boca, no pude decirle que no. No ansiaba algo más, tan solo poder besarlo siempre. Entonces pensé que no había mejor lugar, que a su lado.
Buenaaaaaas lectorcill@s !!! 💚 Qué tal están? Yo estoy súper feliz, comencé a mudarme y amo mi nueva casa, por eso y porque muchos lo querían les dejo dos capítulos por aquí, mañana actualizaré si puedo. Espero que disfruten y tengan un buen fin de semana, los amo😍y se me olvidaba, pronto tendrás grandes noticias👋🏼
