Daniela corría por los viñedos, corría sonriendo, sabía que Fernando iba detrás de ella tratando de alcanzar su mano. De pronto, giraba y se encontraba en Londres. ¿Cómo había llegado ahí?
— ¿Fernando?
Se sentía perdida...
— ¿Fernando? — repitió.
Alguien tomaba su mano y ella sentía seguridad de nuevo. Miraba a su lado y no era Fernando quien la sostenía, sonriendo...
Luego despertaba de golpe.
** **
— Buenas noches, señorita.
En perfecto español.
Debía estar soñando otra vez. No podía ser cierto. ¿Qué demonios estaría haciendo él en Castilla, hablando español?
¿Eduardo? ¿Que rayos...?
Dany sintió que se desmayaría y Giorgio lo notó.
— Señorita Daniela. No sabía que estaba aquí de regreso.
— Signore Bertolini. – dijo Dany a modo de saludo con un nudo en la garganta. — Volví hace unos meses...
Harry. Aún debajo de ese antifaz, sus ojos eran inconfundibles y Dany no podía dejar de verlos, ni siquiera cuando el mismísimo Giorgio Bertolini seguía hablándole.
— Es un gusto encontrarla de nuevo por estos lares. Supongo que está viene a ser su fiesta de bienvenida a la industria.
— ¡Oh, mira Giorgio! Ahí está Antonio, vamos.
Beatriz tomó a Bertolini del brazo y se fue con él.
Dany estaba en shock. No podía ser él.
— Daniela.
No. SI que era él. Esa manera de decir su nombre...
— ¿Tú? ¿Qué demonios haces aquí? ¿Cómo fue que...?
— No puedes ocultarte de mi para siempre y yo no iba a dejar de buscarte.
Los ojos de Dany se llenaron de lagrimas.
— Tienes que irte.
— ¿Qué? ¡No! No me iré sin ti.
— Y yo no me iré contigo. Harry. — Dany soltó una risa nerviosa. — Es que no puedo creer que estés aquí.
— Supongo que tienes miles de preguntas.
— ¡CLARO! ¿Cómo supiste que estaba aquí? ¿Quien te lo dijo? ¿Y cómo pudiste entrar a la Hacienda?
— Bueno, no te diré cómo lo supe ni quién me dijo, simplemente lo supe. Y entré gracias al señor Bertolini.
— ¿Y "Eduardo"? ¿Qué clase de estúpido nombre es ese?
— OYE. Es mi segundo nombre y es hermoso.
— ¡No es cierto! ¡No es tu segundo nombre! ¡Y tampoco es hermoso!
— De hecho si es mi segundo nombre...
Dany volvía a ser el centro de atención. Estaba hablando demasiado fuerte mientras las demás personas simplemente cuchicheaban.
Alguien se acercó por detrás, poniendo una mano en su cintura.
— ¿Todo bien, Dany?
Harry miró al chico que se acababa de parar detrás de Daniela.
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Don't Let Me Go
Fanfiction"Nada fija algo más interesante en la memoria, que el deseo de olvidarlo..." Tiempo, distancia, nuevas personas, nuevos labios... hay cosas que pueden ayudar a olvidar, pero sacar a alguien de tu mente es fácil. Sacarlo de tu corazón, bueno... es ot...