Reencuentro

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    Los minutos pasaban y no había señales ni de Adrien, Alya o Nino. Marinette miraba a todos lados esperando que alguien llegara. Lo único que quería era correr en busca de sus amigos, pero le había prometido a Chat noir que se iba a quedar aquí.

- ¡Marinette!... Marinette - llamó a la chica, mientras la sujetaba por los hombros.

    La ojiazul llegó a brincar del susto, al sentir las manos de su amigo, por detrás.

-  ¡¡Adrien!! - exclamó aliviada, abrazandolo por el cuello.

    El chico no se esperaba esa reacción de ella, sin embargo le respondió el abrazo.

- No creí que Chat noir me iba a dejar tan lejos - comentó, soltándolo.
- No hay muchos lugares con poca gente - dijo, colocando una de sus manos alrededor de los hombros de Marinette - aunque eso no fue lo que me demoró... - susurró, desviando su mirada. Sorprendiendo a su amiga - tuve que esquivar... a alguien.

    Marinette lo miró extrañada, ¿a quien se refiere? ¿algún fan? antes de responder, Adrien suspiró profundamente.
   
- Lila - contestó sin disimular su molestia.

    Evitando mencionar la cantidad de metros que debió alejarse para que no lo viera destransformarse. Adrien le contó que estuvo varios minutos esquivando a la chica, que no entendía como, lograba encontrarlo. Hasta se le pasó por la mente que tenía algún tipo de detector de seguimiento.

- No es tan loco - admitió la chica. Después de todo lo que habían pasado ese día, todo era posible.

    En ese momento, sonó el celular de Adrien. Era un mensaje de Nino.

- Dice que si hemos visitado una exposición que hay cerca del castillo - dijo, mirando su celular.
- ¿Exposición? ¿de qué? - preguntó curiosa.
- Eso le estoy preguntando - dijo escribiendo la pregunta - dice que es mejor que lo veamos nosotros.
- Entonces debemos ir - dijo, sin disimular su tristeza de dejar de estar a solas con Adrien - ¿Adrien? - llamó al ver que se ruborizaba.
- De hecho... le dije que los esperamos acá - dijo avergonzado - ...nos podríamos perder - continuó desviando su mirada. Sorprendiendo a su amiga - Creo que alcanzamos a ir a una atracción más - insinuó.
- Emmm puede ser, pero... - por un lado estaba feliz de que Adrien quisiera pasar más tiempo con ella, pero si Alya y Nino venían.

    La duda se reflejaba en la mirada de Marinette y Adrien lo notó. Tomó la mano de su amiga, sorprendiéndola y con una mirada tierna le dijo...

- Si la exposición que ellos dicen esta al lado del castillo, les va a tomar, con suerte, veinte minutos y con la cantidad de personas que hay... si van a tardar un poco más - dijo. Marinette lo miraba si entender a donde quería llegar - no deberíamos tardar tanto en cruzar la atracción... ¿vamos? - invitó, girándola para que viera a que se refería.

    No pudo evitar ponerse roja como semáforo al ver la atracción que decía Adrien. No quería hacerse más ilusiones de las que ya tenía, pero el nombre de la atracción no ayudaba.

-¿Marinette? - preguntó preocupado.
- ¡¡Sii!!... digo vamos - exclamó tratando de disimular su nervios.

Antes que su amigo se arrepintiera, Marinette lo tiró en dirección a la atracción. Tras salir de la sorpresa, Adrien tomó el ritmo de los pasos de su amiga, acercándose al sitio.

Adrien tenía razón, con la cantidad de gente que había, Alya y Nino con suerte habían salido de las carpas donde se encontraba la exposición y aun les quedaba camino por recorrer. Sin embargo, había una persona que estaba más cerca de la pareja de lo que ellos creían y querían.

Cumpleaños EspecialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora