Capitulo 1

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El microondas sonó; eso significaba que mis palomitas estaban listas. Me levanté del sofá y fui a la cocina. Abrí la bolsa y metí las palomitas en un bol. Cogí un refresco de la nevera. Volví al salón y me senté en el sofá. Conecté la película que iba a ver. 

Algo me distrajo. Eran golpes. Provenientes de fuera. Mi perro estaba dentro de la casa conmigo, así que, él no podía ser. Y estaba sola en la casa. 

Caminé hasta la puerta trasera y cogí un bate, por si acaso. Puse la mano en el pomo de la puerta. Y abrí la puerta. 

Un chico con pelo castaño, ojos mieles, nariz perfilada y labios carnosos estaba de pie al otro lado de la puerta, con cara de asustado y nervioso. 

-Justin. -susurré.

-¿____? -dijo él de vuelta.

Asentí y mi respiración se agitó al ver sangre en sus manos. Comencé a escuchar el ruido de las sirenas de la policía- 

-Déjame entrar por favor. Te lo explicaré todo. -dijo. Negué rápidamente. ¡¿Pero qué demonios pasaba?!

-Justin, vete por donde has venido. -le dije tratando de mantener la calma. 

-Por favor, te lo explicaré todo, pero necesito que me dejes entrar. 

Justin Bieber era el delincuente más buscado de todo Ontario. También fue mi mejor amigo y novio cuando tenia yo 16 años y el 19. Iba a mi clase, siempre era el chico malo y el chico más sexy con el que todas las chicas se querían acostar. Todas menos yo. Hasta que me enamoré de el. Pero no me entregué a el. Después de un tiempo, ya habíamos roto. Había ido a la cárcel. Nunca pensé que Justin llegaría ir a la cárcel...

Asentí al final, pasamos hasta el salón donde la película estaba en pausa. Le dije que se sentara mientras yo iba a por unos pañuelos para limpiarle la sangre de las manos. Llegué al salón de nuevo, y él estaba mirando a un punto fijo del salón. Me senté a su lado y tomé sus manos con un ligero temblor, y comencé a limpiarle la sangre que había en ellas. 

-_____. -susurró mi nombre. Le miré. -Sigues igual que hace dos años. -dijo. 

Le miré a los ojos. Esos ojos mieles que un día me enamoraron. No dije nada, seguí limpiando sus manos como si no hubiera escuchado nada.

-Tu sigues igual. Igual de guapo, pero también de capullo. -susurré acabando de limpiar sus manos.

-Veo que sigues teniendo esa actitud de niña responsable que nunca a roto un plato. -dijo sonriendo leve. Rodé los ojos ignorándolo. 

-¿Puedo preguntar que ha pasado? -dije yo.

-Claro...-Me miró y comenzó a contar. -Estaba paseando con Ryan, ¿te acuerdas de él? -asentí leve. -Pues, íbamos paseando por el callejón, íbamos a fumar, solo a eso. Y entonces un tío se nos acercó con una navaja. Sabes como es Ryan, él... se defendió, y le clavó la navaja al tío. Yo traté de reanimarlo, por eso mis manos llenas de sangre. La policía llegó, y comenzaron a perseguirme a mi, Ryan me dejó tirado. Y... recordé que vivías por aquí. 

No dije nada, ni le interrumpí ni nada. Dejé que se desahogara. No sé si creerle, ¿había matado antes? Sí. Pero estuvo en la cárcel dos años, y creo que ya llevaba suelto unos meses, y no han habido muertes ni nada. Quiero creer que él no ha sido. Conozco a Ryan, él se metía en muchos líos y arrastraba a Justin con él. Justin decidió unirse a la "banda" de él, junto con otros chicos. Desde ahí, él y yo nos distanciamos. Seguíamos juntos por que yo de verdad le quería muchísimo. Pero él decidió tomar ese camino. No sabía que decir, asique supuse que lo mejor sería que le sirviera algo para beber, ya que estaba sudado y parecía cansado.

-¿Quieres beber algo? -susurré.

-¿No me tienes miedo? -yo no respondí. -No me tengas.-me cogió de la mano. Yo tragué saliva. Le miré a esos preciosos ojos color miel. Recuerdo que me enamoraban.-Si, por favor, un vaso de agua, gracias. -yo me levanté. Fui a la cocina. Cogí la botella de agua y un vaso. Fui al salón.

-Toma. -ya no estaba tan nerviosa, le mire y sonreí. El sonrió. Extrañaba su sonrisa.

-Gracias ____... -sonreí. Se sirvió agua.

Me iba a levantar a por un vaso. Pero el me cogió de la mano y me sentó en sus piernas. Me sonrojé. No le mire a la cara, solo miraba la botella de. El me tomo de mi barbilla y me hizo mirarle a los ojos.

-Bebe de mi vaso... -fue lo único que me dijo. Miré directamente a sus ojos.

-No me mires fijamente... -susurré agachando la cabeza sonrojada. -Sabes que no me gustaba que hicieras eso. -dije con una leve sonrisa. -Justin... ¿qué fue lo que te hizo cambiar tanto?

-Muchas cosas ____... pero no te las puedo contar aun...

Asentí. Me levanté de sus piernas, ya que estaba un poco incómoda. Le serví más agua y él se la bebió tranquilamente.

-Justin, no puedes quedarte aquí por mucho tiempo. Sabes que a mi padre no le gustaba nada nuestra relación. Y él está a punto de llegar a casa del trabajo. -susurré.

-_____ solo necesito donde esconderme un par de días, la policía no saben que fui yo. Necesito estar tranquilo.

-Tu mismo lo has dicho Justin, la policía no sabe que tu estuviste ahí, no tienes de que esconderte. Además, yo no puedo esconderte, ya te lo dije. -dije seria. 

Él no dijo nada más. Asintió leve y se levantó del sofá. Le acompañé a la puerta. Él me sonrió triste, y yo le devolví la sonrisa.

-Lo siento Justin...

-_____, no he podido parar de pensar en ti desde que te dejé. -agaché la cabeza. Recordar que me dejó, era doloroso. -He vuelto para recuperarte, y no me voy a ir esta vez sin ti. -susurró.

MI corazón se paralizó al escuchar su confesión. Suspiré, por que yo también le había echado de menos. No dije nada y asentí.

-No te lo pondré fácil Bieber. -él sonrió, cerré la puerta de casa y me senté en el sofá a seguir viendo la película con una sonrisa en la boca.


Muy buenas criaturitas del señooor. Cómo veis, he editado este primer capítulo. Ahora que se me da mejor esto del wattpad, quería editar la primera fanfic que creé. Espero que os guste la nueva edición y porfavor, darle mucho amor y comentar que os parece.

Pronto iré actualizando el resto de la fanfic. Darle amor porfavor.

¡Un besito virtual! 

-L


Delincuente |Justin Bieber y tu| (PL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora