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Típica historia, empieza con uno de los protagonistas y está no es la excepción pues empieza con un erizo azabache de vetas rojo carmesí.
Este iba camino a un lugar en particular, algo fastidiado por lo que tubo que hacer, no era muy fan de hacer trabajos para cierto personaje. Pero lo hacía con un solo motivo, saber todo lo que necesita de aquel dichoso proyecto que no lo dejaba dormir.
Al llegar a una base en una pequeña isla, molesto, espero en la orilla hasta que sucediera algo, cuando una clase de pequeña nave se acerca con una pequeña pantalla mostrando la cara del que se le podría llamar "jefe".





-No tengo todo el día así que date prisa

*En la pantalla*- Solo sube a está cosa, te traerá conmigo


Cuando subió a la nave, está casi dió la vuelta completa a la base, pero se detuvo en la nada, más bien una pared de metal, en cuestión de segundos se abrió dejando un pequeño espacio para que entrará, avanzó un poco más hasta parar en frente de otra pared, solo que está se abrió dejando un espacio más grande, cuando iba entrando pudo visualizar a una persona impaciente, justo detrás de esta habían muchas pantallas y lo que parecía ser una computadora gigante. La nave se detuvo frente a la persona...

-se baja- ten - le avienta una mochila algo pequeña

-¿Así tratas al que va al mando? -dice molesto

-Te trataría bien si supieras manejar bien por lo menos una situación, y si supieras cumplir un trato- dice demasiado enojado y con una mirada asesina

-O vamos Shadow, no salgas con eso ahora que no estoy de humor para tus quejas - se da la vuelta- ya falta poco para que yo pueda cumplir con mi parte y dejes de llorar como una niña

Shadow- Vete al diablo Eggman

Eggman- Bien, ahora solo falta la mitad de mi plan - dice ignorando lo que dice y contemplando lo que tenía la mochila

Shadow- ¿Qué? Esas esmeraldas, ¿Son la mitad de tu plan? -se cruza de brazos

Eggman-Si así es, ya no iré solo por Sonic, iré por más -hace una sonrisa malvada

Shadow- Cuando necesites algo, ya sabes cómo encontrarme -dice dándose la vuelta, caminando hacia la salida

Al momento de salir de aquella base, el erizo se dirigió a su hogar, una parte del trato con Eggman decía que el ya mencionado le daría un lugar digno para vivir y es lo único que a cumplido.

Shadow se preparo para por lo menos descansar acostado en su inmensa cama, fue a su cocina y lo único que encontró fue una manzana la cual comió con calma, en realidad no había nada que hacer como para darse prisa. Cuando acabo subió a su habitación para buscar algo cómodo para después darse un baño. Al encontrar un pantalón de pijama se metió al baño; abrió la llave de agua fría y quitandose la ropa dió unos pasos para que le callera el agua, hizo lo que tenía que hacer, en pocos minutos salio vestido y listo para recostarse y esperar que el resto de la noche pasará para poder hacer algo productivo.




A la mañana siguiente




Una pequeña e indefensa eriza rosa se levantaba de su cama para iniciar la bella mañana.
Se encaminó hacia el cuarto de baño y se miro en el espejo, su aspecto no era el mejor y se dió un poco de asco. Eso era motivo suficiente para tomar la decisión de darse un baño y eso fue lo que hizo después de buscar, buscar y buscar algo que ponerse; abrió la llave de agua caliente y cuando sintió el agua recorrer su cuerpo se sintió mejor, al hacer todo lo que era necesario para sentirse mejor salio con la toalla puesta al rededor de su cuerpo, cubriendose como si alguien la estuviera viendo. Se vistió y bajo a la cocina para desayunar algo; cuando acabo subió de nuevo a su habitación a ponerse unos zapatos bajos del color de su vestido (que por cierto era color verde) y salió de su casa, llego a una casa grande, como para dos personas como máximo, tocó la puerta y alguien grito su nombre fuera de la casa...

Te acepto tal y como eres Donde viven las historias. Descúbrelo ahora