Night's Games

Capítulo 18

      - Vaya... te entiendo, pero eso no quiere decir que estoy de acuerdo con tu decisión. – Tsuna frunció el ceño, podía entender muy, muy bien. – Si eliminas la mafia... saldrá de nuevo, por no hablar de que sería casi imposible, tendrías que matar a todos los seres humanos si quieres eliminar la mafia para siempre.

      -... Pero-

      - ¿Por qué no haces algo mejor?, trabaja con alguna familia o algo que tenga buenos ideales, si es influyente y da a conocer lo que no le gusta muchas otras familias seguirán su ejemplo y se reducirá esos... esos actos inmorales... - Porque no sabía que nombre darles exactamente... - Me parece más seguro, eficaz y aditivo, pues ayudarías en mucho más de un sentido... - Tsuna hizo una pausa - ¿Qué? – Agrego ante todas las miradas, ¿por qué lo estaban mirando así?

      - Kufufufu... supongo que te paso algo similar... - Y eso explicaría muy bien-

      - No quiero hablar de eso, así que ni lo menciones. – Siseo el chico.

      - Se un buen chico y quédate quieto-

     - ¡Pero duele...!

      - ¿Prefieres morir?, te recuerdo que si no fuera por mí y estos experimentos hubieras muerto hace mucho tiempo...

      -...

      - Eso es, así me gusta... - Pausa. – Probablemente sentirás algo de dolor y nauseas, pero si esto resulta entonces valdrá la pena...

      -...

      - Por cierto chico, no le hagas mucho caso a los otros... tus padres no te abandonaron...

      - ¿Entonces qué hago aun aquí?

      -... Mira, ellos no te abandonaron, de hecho, deben de estarte buscando, el problema es... que este lugar está muy bien escondido... - Pausa. – Si algún día sales de aquí, huye lejos, muy lejos, y no llames la atención... eres un experimento muy valioso para perder, así que te estarán buscando, ¿me oyes?

      -... ¿Por eso eres...? - ¿... lo que sea que eres?

      - Si y no, pero como dije, no quiero hablar de eso si no les importa. – En verdad no quería hablar de eso...

      - ¡Al fin tenemos al mocoso!, ¡Vongola esta frita! – Risas maléficas.

      - ¡Mami!, ¡Pa- ¡Smash!

      - ¡Cállate mocoso!, ¡tus padres no van a venir por ti!, ¡así que cállate!, ¡y deja de llorar!

      Sin poder evitarlo, Tsuna lloro aún más, aterrorizado, los hombres solo se rieron y lo patearon...