Al anochecer (VicHei)

Extra 5.- Respuestas

El príncipe supo de inmediato que se trataba de un sueño

Kai normalmente soñaba con un campo lleno de flores a las afueras del reinado de su padre. Habia ido de manera incógnita una sola vez y fue suficiente para enamorarse de aquel lugar. Cada noche al dormir soñaba con el mismo campo de flores silvestres apenas abiertas. Mientras que su fragancia rebosaba en aquel jardín y el cielo iluminaba con belleza el lugar entero.

Sin embargo en esta ocasión aquel lugar que le traía una inmensa paz al dormir le dio la sensación de una melancolía indescriptible. Con tristeza apretó su mano entorno a su pecho, lo mas cerca de su corazón que latía dolorosamente.

—Kai.— 

Escucho que dijeron y volteó rápidamente buscando el origen de aquello, una bella castaña se encontraba a unos metros de distancia, su vestido blanco y sonrisa sincera se grabaron en su memoria.

—Kai.—

—¿Quien... eres?..— murmuró intranquilo por la respuesta que pudiera obtener

—Lo sabes.— la imagen de la joven se fue desvaneciendo poco a poco —¿Que harás ahora?—

Las flores se fueron desvaneciendo al igual que ella pero el olor de las rosas seguían presentes. Lo que antes fue un amplio campo se convirtió en un simple espacio en blanco. El aroma revoloteo por segundos para finalmente concentrarse en un punto. Una figura pequeña y apenas notable de otra persona

La figura de un omega que le daba la espalda. Sus ojos se abrieron al reconocer quien era esa persona. El príncipe estuvo por caminar hacia él —¡¡Mami!!— Fue el grito de un niño que paso corriendo a su lado para seguir en el encuentro del omega de cabellos rojos

La figura apenas volteo su rostro hacia el peliplateado mientras ofrecía su mano hacia el pequeño.

—Kai.— susurró suave pero reconocible para el alfa

¿Cómo..?

—Hijo, ten cuidado cuando corras.—

El omega se arrodilló un momento para luego levantar en brazos al niño que feliz se abrazo al cuello de esté mientras dejaba que su madre acariciase su cabello plateado

—Si, Mami.— Kai finalmente fue capaz de mirar con claridad ambas figuras. Heine estaba de pie con el cabello mas largo y una vestimenta diferente a la que usaba en sus lecciones, a quien cargaba en brazos era a el.  Pudo verlos por segundos mientras caminaban con tranquilidad, la sonrisa del niño se hacía cada ver más grande conforme era acariciado de los cabellos por su madre.

—Suave... suave... — Sus voces se hicieron cada ves mas lejanas y más confusas

Aquel paramo en blanco finalmente estaba desapareciendo hacia un escenario en algun lado del palacio, puede reconocerlo por el pasillo en el que se encontraba y las armaduras en cada esquina. Kai nuevamente se ve a sí mismo detrás de la espalda de Heine mientras el parece discutir con otra persona.

No entienden que dice, ni siquiera un poco. Sus voces se escuchan mudas mientras que la figura de otro niño que se aferraba a su pequeña palma apareció...

—Hermano...— 

—No... No tengas miedo... Bruno... Aquí estoy.—

Lo escuchaba —No les hara nada. Son mis hijos. MÍOS.—

— Kai.. —

Había desaparecido. La mano que sostenía con fuerza se había desvanecido al igual que las otras figuras