Al anochecer (VicHei)

Capitulo 23.- Termina al anochecer.

Notas: Esto "~~~~" significa que es un pequeño recuerdo

**** es cambio de escena
espero evitar confusiones.

Sin más que agregar adelante.

****Presente****

Estaba amaneciendo y la ventana dejaba ver el paisaje apenas iluminado por los primero rayos del sol. El cuerpo de ambos amantes abrazados aun en el sillón en una la posición de lo más incómoda. 

Estaban exhaustos de lo ocurrido la noche anterior, la primera charla después de 9 años

El omega de cabellos rojizos fue el primero en despertar, su rostro se mostró indiferente ante la manera en como término todo y finalmente encontrarse entre los brazos del Rey. Su corazón se estrujo de alguna manera al recordar las veces que aquello no le molesto en lo absoluto

Con cuidado de no despertar al otro se separo lentamente del cuerpo de Viktor, antes de alejarse completamente suspiro, su cabeza y caderas dolían como nunca. Sus ojos carmín nublados por la falta de sus fieles lentes, con dificultad se levanto encontrándose a sí mismo desnudo completamente.

Con la mirada buscaba sus lentes y ropa, encontrándola toda en el suelo y las gafas en la mesa. Camino hacia ella y sus piernas  temblaron por instantes seguido por un liquido que escapaba de su entrada, la esencia de Viktor salía de su interior sin permiso alguno.

Con pesadez se cambió rápidamente, sus movimientos cansados y temblorosos. Al terminar camino hacia la puerta, la sensación de humedad seguía pero debía aguantar, no podía arriesgarse a ser visto sin pantalones por la servidumbre.

Su mente divago en las consecuencias que traería sus acciones la noche anterior. Su mirada indiferente cambio por primera vez a una de dolor. Su mano derecha formó un puño con su camisa por encima de su vientre.

—Ya no debo preocuparme. — pensó —Ya no puedo darte hijos, ya no Viktor.—

Nuevamente la sensación de cobardía lo había atacado, al no poder confesar la principal razón de su visita anoche.

Abrió la puerta, se detuvo y trago en seco. Su mirada carmín en el cuerpo del Rey, que en esos instantes parecía solo simple hombre acostado en el sillón sólo con sus pantalones cubriendo su cuerpo.

Se sintió feliz, se sintió lleno y pleno al tener a su destinado nuevamente, al poder sentir sus manos en su rostro. Pero lo sabía, sabía que no duraría eternamente. La muestra de ello esta tatuado en su cuello

Y cerro la puerta tras haberse marchado, consiente que eso no volvería a ocurrir

—Profesor Heine.— el hablar de una persona lo detuvo en su lugar, Heine tembló sin querer al ser descubierto, lentamente miro a la persona frente de él

—Alexander.— hablo con sorpresa

El mayordomo alfa sonrió quedamente consiente de la presentación del omega, y lo ocurrido posiblemente o posiblemente no en aquel despacho, en el fondo lo esperaba pero que no haya sido el primer día que el pelirojo piso el Palacio lo sorprendió de alguna manera

—Quisiera hablar con usted.—

Heine lo pensó —Tendrá que ser después, necesito prepararme para las lecciones con los príncipes.—

—Hoy es domingo— Alexander sonrió nuevamente mientras ambos caminaban en dirección de la habitación del omega

Heine se detuvo y sostuvo su cabeza. El mismo pidió que los domingos fueran el único día en el que no daría lecciones a los príncipes. Necesitaba hacer algunas cosas, como pudo haberlo olvidado