DÉCIMA SÉPTIMA GOTA: MIEDOS

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La primera gota de lluvia cayó. Las estrellas en el cielo se escondieron tras las nubes que empaparían la ciudad porque tenían miedo, un tremendo miedo de los truenos que apagan la luz estelar del universo para adueñarse del cielo.

Cuando Kura era niño su madre solía narrarle la historia de los tres hermanos Tormenta. Kura amaba la historia pero eso no era suficiente para matar su temor.

«La historia de los tres hermanos Tormenta inicia con una gota de lluvia que humedece la tierra para darle alimento, para darle vida y vencer a la muerte. En un reino muy lejano vivía una Reina viuda llamada Lluvia, una mujer hermosa y bondadosa que tenía tres hijos. A cada uno la naturaleza los doto de una cualidad; al mayor le dio la habilidad para crear cosas nuevas con sólo la fricción de la Tierra y las nubes. Al segundo le dio una belleza que le daba luz al rincón más oscuro del Planeta. Y al tercero le concedió una voz gruesa y fuerte que hacía vibrar las ventanas del castillo donde vivían. La Reina Lluvia los educó para que entre ellos no existiera la envidia, a diario les dejaba misiones que debían cumplir trabajando en equipo para que cuando llegara el momento de elegir al heredero del trono los otros dos estuvieran conscientes de las habilidades que el futuro rey tenía y ellos no. El trono no se le otorgaba al hijo mayor, todos los hijos tenían la posibilidad de ocupar el trono porque de esa manera se podía elegir al idóneo para el puesto. Los tres hermanos se amaban tanto que no ha existido un amor entre hermanos como el de ellos, incluso se contaban secretos muy íntimos; qué sí la princesa Nieve era más bonita que la princesa Fuego, o que incluso juntando la belleza de ambas no era suficiente para igualar la hermosura de la princesa Estrella.

»Cierto día, se anunció que la mano de la princesa Estrella estaba disponible para el caballero más valiente, más fuerte, más justo y temerario de todos los reinos, y cuando los tres hermanos se enteraron de tan dichosa noticia prometieron no tomar rencores con el ganador, pues los tres estaban completamente seguros que sería uno de ellos el que desposaría a la princesa Estrella. Los tres príncipes más los príncipes de los reinos vecinos tuvieron que enfrentar tres pruebas de valor, la primera de ellas fue encontrar el anillo de oro que la princesa Estrella había perdido en el Bosque Oscuro, todos los príncipes tenían miedo de aquel lugar, todos, menos el segundo hermano. Con su belleza iluminó el Bosque apenas entró y sin problemas encontró el anillo de oro que yacía al pie de un abeto. Sus hermanos se regocijaron por la victoria, pero no pudieron evitar sentirse celosos de él cuando la princesa Estrella se sonrojo al tener de vuelta el anillo en su mano izquierda.

»La segunda prueba de valor que pareció más de ingenio y habilidad que de valor fue encender una fogata con leños del árbol muerto que era famoso por su inutilidad para combustionar. El hermano menor le pidió a la princesa Fuego un mechón de su cabello para hacer arder la leña muerta, pero fracaso, ni el intenso fuego del cabello pudo encender la leña. El segundo hermano acepto la derrota mucho antes de iniciar la prueba, no era un hombre de mucho ingenio así que decidió perder con la cabeza en alto y el orgullo intacto, evitándose el ridículo público. Mientras que el hermano mayor le pidió una pequeña nube a su madre de las muchas que tenía en su poder para frotarla con un puño de tierra, esa era su cualidad y debía aprovecharla así como el segundo hermano había utilizado su cualidad para la primera prueba. El príncipe generó un chispazo con la fricción entre la nube y la tierra e inmediatamente la leña inició a arder. Los dos hermanos menores se sintieron celosos del mayor cuando la princesa Estrella se acercó a la hoguera de los troncos muertos para entibiarse las manos.

»La tercera prueba de valor, que fue más de talento que de valor, consistió en hacer llorar a una sirena. Las sirenas eran bellas, pero peligrosas, devoraban el corazón de los varones y sentían amor por las mujeres porque sólo en ellas podían sembrar su simiente. Los guardias de la princesa Estrella tomaron prisionera a una sirena para la prueba de valor, todo estaba permitido para hacerla llorar. El hermano mayor se acercó a la hermosa criatura y le pidió la mano, la sirena la extendió y se rio sínicamente cuando vio la sangre escurrir entre sus dedos; el primer hermano le había cortado la palma con un hielo que la princesa Nieve le regalo. La sirena no lloró, su pueblo era demasiado duro para llorar por una herida. Fue turno del segundo hermano, el cual decidió regalarle un gorrión a la sirena para después matarlo frente a ella pensando que aunque fuera mitad pez su otra mitad que era femenina se doblegaría como todas las damas de la audiencia que sintieron pena por el avecilla. Pero por segunda vez, la sirena demostró ser más dura que una mujer promedio. La muerte del gorrión sólo la hizo sonreír de medio lado. Ya era el turno del hermano menor que no tenía nada planeado, pues había perdido el tiempo pensando en que si no ganaba esta prueba cualquiera de sus hermanos podía desempatar al otro y quedarse con la princesa Estrella. Al ver que el príncipe frente a ella no hacía nada más que mirarla con semblante pálido, la sirena se apiado de él y le dio una pista. Con sus uñas decoradas con arena del mar, la sirena se acarició el cuello con descarada coquetería, así el hermano menor entendió que debía cantar. Para poder ganar la tercera prueba el hermano menor eligió cantar una canción de cuna que en conjunto con su voz gruesa conmovió el corazón de la sirena enterneciéndola para que lo acompañara durante la canción. Cuando la sirena inicio a cantar se pudieron vislumbrar sus lágrimas, la criatura marina era tan dura para soportar torturas, tan fuerte para ver como un inocente muere frente a ella, pero no era indiferente al canto que la hacía recordar a su familia en el mar, extrañaba y añoraba a los suyos con todo aquel corazón salado en su interior. El menor de los tres príncipes salió victorioso en la última prueba.

AME (Lluvia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora